No More Fears (YuWin)

Capítulo: 1

Dong Sicheng, era un niño solitario que vivía en China con sus padres y a la edad de 4 años fue diagnosticado con Síndrome de Asperger.
El padre de Sicheng era un melómano, un amante de la música clásica, todas las tardes de domingo ponía sus Cds de música y se sentaba en su sillón para poder apreciarla, pero cuando la música comenzaba a sonar el pequeño Sicheng dejaba todo lo que estaba haciendo, ya sea jugar con sus juguetes o dibujar, para acercarse a donde estaba su padre y escuchar la música, él señor lo llamaba las tardes de padre e hijo ya que como Sicheng no hablaba y siempre estaba en su mundo, el momento único y exclusivo de ellos era cuando la música aparecía.
Sicheng apreciaba los sonidos e inevitablemente sus dedos se movían como si estuviese tocando un piano, su padre pensó que quizás ese instrumento podría ser el regalo perfecto para el niño, era el mes de octubre y el cumpleaños número 5 de Sicheng se acercaba.

28 de octubre de 2001

Sicheng conoce a su primer amigo, su piano.
Cuando el instrumento ya había sido ubicado en la sala, el niño lo miró con curiosidad para luego acercarse lentamente, se sentó allí y con sus pequeños dedos fue tocando tecla por tecla, después simplemente se quedó observando el piano sin hacer nada.
La madre de Sicheng le recomienda a su esposo que ponga música para que el niño se anime.
Para Elisa de Beethoven comienza a sonar, Sicheng alza la vista y empieza a escuchar con atención para luego acomodar sus dedos y tocar la pieza arriba de la música a la perfección.
Sus padres estaban sorprendidos sabían que su niño tenía un don pero pensaron que solo era el de la apreciación ¿Dónde había aprendido?
Siempre estaba en casa, tenía tutores porque a sus padres les gustaba que  aprenda en casa aunque también iba a la escuela es que ellos cuidaban mucho a su pequeño porque era un niño que le costaba mucho socializar.

A la edad de 6 años empezó finalmente a hablar volviéndose un niño muy muy hablador.
Su color favorito era el azul y todo en su habitación debía ser de ese color, los ositos de peluche que estaban en su cama siempre debían estar alineados, si esta regla se rompía él niño lloraba.

El piano seguía siendo su acompañante había sido un año de tocar a la perfección todas las obras de música que escuchaba con su padre.
El señor Dong había tomado la decisión de que Sicheng debía tener un profesor de piano y así fue como con mucha paciencia el profesor le enseñó de técnica.
Sicheng seguía con la compañía de sus profesores y su psicóloga, quien un día les informo a los padres que la única forma de que él niño se integre es socializando pero ellos amaban a su pequeñito él era su prodigio su niño especial por eso lo sobreprotegían tanto que no se dieron cuenta que eso iba a dificultar las cosas en el futuro.

Año 2017

Sicheng es un chico de 19 años que está consciente de su Síndrome de Asperger gracias a su psicóloga y al apoyo de sus padres lleva una vida normal.
Desde siempre ha estado más en casa que afuera y las veces que tenía salidas al cine o al teatro era en compañía de sus padres, pero luego de insistencia de la psicóloga y luego de ver que Sicheng se había adaptado bien a la escuela secundaria trató de tranquilizar a sus padres y decirles que él chico de a poco tenía que empezar a ser más independiente.
Él debía haber comenzado sus estudios universitarios a la edad de 18 años, pero sus padres estaban indecisos.
Finalmente hoy era el día en que sus padres le habían dejado dar ese gran paso importante la universidad y no cualquier universidad sino que nada más y nada menos que una especializada en artes donde Sicheng seguiría adquiriendo más técnica en la música.
Su madre lo acompañó ese primer día preparándose tanto ella como también preparándolo a Sicheng para decirle que él comenzaría a hacer este recorrido solo.
Así fue como empezó sus días de universidad.

Pasados unos meses empezó a hacer ese recorrido solo y él se sentía muy feliz de finalmente poder hacer algo por si mismo que no fuera tocar el piano, sabía que sus padres exageraban pero no quería que sus berrinches descontrolados salieran otra vez como el anterior año cuando sus padres se habían negado que empezara la universidad.

Nakamoto Yuta es un chico japonés que viajó a China para poder estudiar en la mejor universidad de artes de China y así poder perfeccionarse en el piano, él era independiente sabía lo que quería su sueño de ser pianista lo llevó a no pensarlo dos veces cuando la oportunidad de viajar a China se le presentó sus padres no le dieron vueltas al asunto cuando el joven de 21 años les contó su decisión y estaban muy orgullosos de su hijo que aspiraba a un futuro mejor.

Equipaje, pasaporte en mano y todos esos sueños fue lo que se llevó el joven al suspirar esbozando su característica sonrisa para luego subir al avión que le llevaría al gigante de Asia, China.

Sicheng salía de su casa y miraba a ambos lados cruzaba la calle con mucha atención, llegaba a la universidad y el tumulto de gente que iba y venía con algunos estudiantes distraídos chocaban al joven, así eran todos los días y siempre se repetía el hecho de que llegue a su hogar suspirando, como si diese gracias a estar vivo.
El mundo exterior es peligroso pero más peligroso se torna aún cuando no sabes nada sobre el.
Sicheng luchaba por ser como los demás pero él siempre pensaba que actuar a ser normal le incomodaba, no tener miedo era más difícil que tocar el Concierto para piano número 2 de Rachmaninov.
Es por eso que el único momento que no tenía miedo o no estaba incómodo era cuando comenzaba a tocar el piano.
Sicheng a amaba su piano y el piano de la universidad se había convertido en su segundo amigo.
El chico llegaba siempre una hora antes y así poder tocar lo que se le plazca sin que nadie le diga que hacer, dejaba su mochila y se sentaba para poder tocar una de sus canciones favoritas "Greensleeaves".

Nakamoto Yuta buscaba su salón de clases, estaba perdido, pero jamás imaginó que iba a terminar aún más perdido en esa melodía que provenía del salón que estaba al final del pasillo.
Se acercó para escuchar mejor y poder ver quien era la persona responsable de tan bella interpretación.
Vio a un joven tan hermoso y tan absorto en lo que era su interpretación, que no pudo evitar sonreír al verlo y darse cuenta que tenía ante sus ojos a un verdadero pianista.

Sicheng sintió la presencia de alguien dejó de tocar para así ver a Yuta quien le miró con una sonrisa.
El chico de nacionalidad china estaba sorprendido, porque nunca nadie que no fueran sus padres o sus profesores lo habían visto tocar el piano.

¿Quién era ese chico? Pensó Sicheng.