Quédate.

Premiación

Vanesa
Esa noche llegue a mi Penthouse y nana me estaba esperando sentada en la sala en la oscuridad, al principio me asuste pero luego encendí las luces y la vi medio dormida. La desperté con cuidado y me preguntó dónde estaba, con quien estaba, que estaba haciendo, pero obviamente la deje intrigada porque no le conté nada.

Ahora, estaba sentada junto a Mike en el auto para dirigirme al lugar donde sería la entrega de los premios. Me recosté en mi silla y tomé mi celular para marcar el número de Michelle.

-Diga?
-Hola - Sonreí pero recordé que no podía verme.
-Hey hola, como estas?
-Estoy bien y tú?
-Estoy un poco cansada, anoche Sofí no quiso dormir en toda la noche, no sé qué le pasó.
-Que mal, tal vez estaba enferma no? - Yo no sabía nada de maternidad así que...
-No lo se... Lo que me parece curioso es que se durmió mientras hablabas y cuando te fuiste empezó a llorar...-Mi corazón salto en mi pecho y mi respiración se cortó. ¿Sería casualidad? ¿O simplemente es un tipo de conexión con la pequeña? Mike me miro interrogante y negué.

-Lo siento, eso no sonó bien yo...

-Está bien, no te preocupes. Ya estás en la empresa?
-Sí, llegue hace poco, tú cómo vas?
-Pues bien supongo, llegare en unos pocos minutos al hotel.
-Estas nerviosa por esta noche?
-Un poco, hubiera preferido estar contigo.- La escuche suspirar y me quede en silencio.

-Suena raro decir que ya te extraño? - Sonreí y mire por la ventana de nuevo.
-No, porque yo también lo hago.

El auto se detuvo y Mike me miro.

-Ya debo irme, te llamo en la noche vale?
-Está bien, te estaré viendo por televisión.
-Lo harás?
-Lo haré.
-Bueno, entonces hablamos luego, cuídate.
-Igual para ti, suerte.- La llamada termino y Salí del auto.

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Termine de ajustar mi vestido y me mire en el espejo sonriendo por el resultado. Llevaba un vestido negro ajustado al cuerpo con un pequeño escote en el pecho, sensual, pero nada vulgar, cortesía de Alexa que lo había elegido para esta ocasión especial.

-Señorita, ya es hora.- Mike hablo y asentí dándome la vuelta.-Esta usted muy hermosa.- Sonreí y le di un apretón en el hombro.
-Gracias Mike.

Salimos y el me abrió la puerta del auto para dirigirnos al lugar donde sería la ceremonia.

Apenas llegamos vi la fila de lujosos autos, los Paparazzi no se hicieron esperar y rodearon el auto. Respire hondo y conté mentalmente hasta cien para no perder la paciencia.
El auto se estacionó frente a la entrada principal y los hombres de seguridad se acercaron para abrirme la puerta e impedir que los periodistas se acercaran.

X: ¡Vanesa! ¿Es verdad que has agredido a un periodista? ¿Han presentado cargos por eso?

X:Salió en todas las portadas de revistas, estabas consumiendo drogas en el cumpleaños de tu tía Isabela?

Escuche que preguntaban y los ignore tratando de abrirme paso entre mis escoltas, todo fue un alboroto, empujones por aquí y por allá, y no sé cuánto tiempo más podría aguantar.

X: Su prometida ya nos ha dado fecha para la boda, ¿es verdad eso?

Me detuve en seco y miré al periodista quien sostenía un micrófono en su mano. ¿Mi prometida? Si fue Alyson juro que se va a arrepentir.

-Señora por favor, solo continuemos.- Mike hablo en mi oído y asentí entrando al hotel, tenía que calmarme, no podía dejarme llevar, pero me molestaba que siguieran con ese tema.
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Una vez adentro, hablé con algunos inversionistas y cerramos tratos a futuro, también con empresarios importantes de otros países y mantuvimos una agradable conversación hasta que mis ojos se fijaron en Jacob Lewis.

-Fue un placer hablar con usted señorita Ferrer, nos estaremos viendo por ahí. - El presidente de la petrolera española se despidió al tiempo que Jacob llegaba a mi lado.

-Recogiendo las migajas Vanesa? - Habló arrogante como siempre y tome una copa de whisky del mesero que pasaba.
-Ellos vienen a mí.

Respondí secamente y le bebí un poco de mi vaso, no quería pelear, no ahora que mi mente estaba en otro lado.

-Que dice tu papi del escándalo que hiciste con el periodista? ¡Oh! No, mejor, ¿qué dice tu papi del hecho que su hija adorada está consumiendo drogas?

Tome lo que quedaba del licor de golpe y estrelle la copa en su pecho, sin romperla obviamente.

-Vete a la mierda Lewis, no menciones a Ricardo y cuida lo que dices.- Él sonrió cínicamente y alejó la copa de su pecho.
-Quiero ver tu cara cuando suba por el premio a mejor empresario, porque después de lo que hiciste no creo que te lo vayan a dar a ti.- Apreté la mandíbula y lo vi alejarse. Maldito Lewis, no sabe con quién se mete.