Maya
La fiesta. Solté una bocanada de aire y sequé mis manos en la toalla.
Eran ya pasadas las once de la noche, y yo sentía las piernas temblar sin haber salido todavía de casa. Era sólo una fiesta, nada del otro que mundo, nada a lo que temer, ... A no ser que seas como yo; un ratón de biblioteca. No había pasado un día a lo largo de esa semana que las chicas de la preparatoria no me hubieran mirado mal. Encontré uno de mis cuadernos roto cuando regresé de las lavabos el miércoles, y el jueves había una nota en mi libro de historia, amenazándome sobre demasiadas cosas. Cosas que me daba repulsión recordar.
¿Por qué iba a la fiesta si muchas de esas arpías estarían allí? Porque era el cumpleaños de mi hermano. Sólo por eso. Y, aún sabiendo que Jimin y Tae estarían allí, no podía controlar el temblor de mis extremidades ni la angustia que se concentraba en la boca de mi estómago, estrangulándome e impidiéndome respirar con regularidad.
Colocando correctamente la manga de mi vestido gris, salí del baño de mi habitación, temblorosa y asustada por todo lo que tendría que afrontar esa noche.
- Vale ... -me susurré todavía manoseando la tela de mi prenda de vestir.
Pulsé el interruptor del baño y me volví hacia el escritorio.
Jungkook estaba sentado en mi mesa, con el cachorrito en las manos. Él ya había terminado de arreglarse, por lo que pude ver. Sus vaqueros negros acompañaban a una camisa gris, de la misma tonalidad que mi vestido y una chaqueta negra. Sin olvidar sus Timberland blancas. Querría haberme fijado más en su ropa, pero me fue imposible al chocar con sus ojos, que me examinaban escrupulosamente mientras el perrito gemía y pedía por su atención. Pero ahora era yo su centro de atención.
No sé si llegué a sonrojarme cuando me miró, pero sería lo más lógico; no podía salir ilesa de un repaso como aquel.
- ¿Qué haces ... Aquí? -formulé con la garganta seca. Él continuaba perpetrando mi mirada sin contención alguna, y mi corazón revolucionó el pulso antes de que pudiera tomar aire correctamente.
- Yo ... -dio un pequeño salto para llegar al suelo, apartando la vista de mí, y vi que mordisqueaba el interior de su mejilla con nerviosismo-. Vine a acompañarte -carraspeó varias veces antes de dejar al animal en la alfombra. Juraría que sus dedos temblaban-. A la fiesta, porque pensé que -estaba perdido, no sabía que me quería decir exactamente. Sus ojos viajaban de un lado a otro de la habitación, evitando chocar conmigo- querrías que fuera ... Contigo.
Jeon Jungkook, mi vecino, mi mejor amigo, uno de los chicos más populares del instituto, me estaba preguntando si quería ir con él a una fiesta. Aguanté la respiración, notando un dulce hormigueo en mi estómago. Ya no estaba asustada por lo que me esperaba allí, sino porque Kook me estaba ... ¿Invitando?
- Pero ... -tiré de la falda del vestido, nerviosa por su propuesta-. Ya sabes que si me ven contigo pueden decir ...
- Maya -me llamó de repente.
Yo alcé la mirada, viendo cómo se acercaba a mí completamente inexpresivo.
Me alcanzó. Kookie se detuvo a un paso de distancia, haciéndome retroceder un poco. Media sonrisa iluminó su semblante, una cálida y reconfortante.
- ¿Crees que voy a dejarte sola? -su ceño estaba un poco fruncido, como si le resultase difícil de creer que estuviese aterrada. Me preguntaba, pero yo no quería responder-. No me importa, ya lo sabes. Y menos un día como hoy. Todos estarán allí. Esas chicas también, así que iré contigo hasta la puerta de baño si es necesario.
Pero yo no quería que él se viera implicado aún más, no después de salvarme aquel día en el pasillo. Ya éramos el cotilleo de la escuela, estábamos en boca de todos porque yo era la antisocial que ahora era la amiguita del popular, y me dolía escuchar todo eso. Sobre todo si incluía a Kookie.
ESTÁS LEYENDO
House Of Cards; jjk |+18|
ФанфикDonde Jungkook se enamora de la hermana de Hoseok, su mejor amiga de la infancia. -Te quiero, Maya -susurró a mi oído-. Te quiero y haré que te ames por lo que eres. Sin reproches. Sin miedos. Porque tú has sido la luz al final de mi túnel, la única...