𝑴𝒊𝒍𝒍𝒆𝒓

𝟕

Tyler

-¡Dejame, no me toques guarra!

Alejate, alejate, tú y tus sucias manos.
No me toque por favor.
Necesito huir.
No puedo.
No puedo moverme.
Gritaré.
No puedo.
Me tiene atado como un animal, de las muñecas y de los tobillos.

-No te muevas pequeño. No te va a doler.

-¡Ahh! -Desperté -. Puta guarra de mierda, la odio.

Otra vez el maldito sueño, que se repite una y otra vez sin cansarse, burlándose de mi.
Cogí un pantalón y me lo puse para ya levantarme de la cama.
Me dirigí al baño, y cepillarme los dientes.
En la cocina aún no había nadie, era muy pronto, las seis de la mañana. Abrí la nevera y cogí leche para prepararme un café.
Tras preparármelo, fui al estudio para desayunar, y empezar a ver los nuevos mensajes, o reuniones.
Habían unos cuantos mensajes, pero nada interesante, solo propaganda, y la becaria informándome de los nuevos clientes.
Mientras esperaba a que se hiciera la hora para ir donde Ian, al entrenamiento, miré unos cuantos periódicos por internet.

«Noticias, noticias... Nada interesante. Deporte, fútbol, béisbol, baloncesto... Nada interesante. Economía. Al fin».

Hemos subido un cinco por ciento, buenas noticias, las cuales no fui informado por mi becaria.

«Muy mal».

Abrí de nuevo mi correo y volví a revisar el correo que me envió Christian, sobre Emma, lo tenía en favoritos.
Me fijé en el documento, y en el cual había una foto suya, la del carné de identidad.
Parecía seria, pero con ese bonito brillo en sus ojos, que resaltaban aún más que su media sonrisa.
Abrí la pestaña que decía su correo, y empecé a teclear lo primero que se me vino a la cabeza.
Necesitaba volverla a ver.

«Con calma, no la asustes».

De: Tyler Miller
Fecha: 2 de junio de 2017 7:40
Para: Emma McCabe
Asunto: Soy demasiado imprudente

Señorita McCabe, me gustaría citarla en la cafetería Illy Caffè. Esta tarde, a las 17:30. Desearía que fuera puntual, no me gusta que me hagan esperar.

Tyler Miller.
Vicepresidente de Bank  Miller. Inc.

Me quedé un instante frente a la pantalla esperando ansioso su respuesta.
Me levanté y me dirigí hacia la ventana, para ver el amanecer de San Francisco.
Era preciso, pero para mi no era ninguna novedad.

-A Emma le gustaría estas vistas.

No sigas Tyler, no puedes estar con ella. Ella no es para ti. Déjala ir. No la vas a poder querer como quiere.

-Buenos días señor.
-Buenos días.

Era Elena, una mujer de confianza, la misma mujer que me cuidó desde pequeño.
Me escabullí de nuevo en mi ordenador y vi que al fin había respondido.

De: Emma McCabe
Fecha: 2 de junio de 2017 8:01
Para: Tyler Miller
Asunto: ¿Señorita?

Le agradezco su petición, es muy tentadora. Pero prometame que no irá con indirectas. Si no hay nada de por medio iré. Todo depende de usted.
Y desde luego que llegaré a tiempo, ¿por quién me toma?

Emma.

Me hizo reír tras recordar el día de su entrevista de trabajo.

«¿Indirectas? ».

De: Tyler Miller
Fecha: 2 de junio de 2017 8:05
Para: Emma McCabe
Asunto: Me estima

Desde luego que desconfió de usted en que no llegará tarde, ya que ayer llegó impuntual  a su primera entrevista de trabajo.
Me sorprende que diga, que esta petición la toma como indirecta. Donde quiera estar con usted se lo digo de una vez y sin tapujos. Créame, deseo verla y estremecerme con sus hermosos ojos, y labios.