Capítulo XXXI

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Ryan

–Debemos hablar.

Es lo primero que dice Perrie al entrar por la puerta. Esta semana las cosas han estado tensas entre nosotros, pero no pueden culparme, ella planea alejar a mi hijo de su padre. Nunca creí que ella haría algo así, actúa como si no me conociera. Aunque viendo el panorama completo, ella cree que me casaré con Selina y que fue una mas de mi lista lo cual no es nada cierto.

–Muy bien, sientate. –digo y señalo el sofá que esta bajo la ventana a mi lado izquierdo. Ella cierra la puerta luego de entrar y se encamina hasta el sillón color negro de semi cuero. Yo me levanto de la silla de mi escritorio y camino para poder sentarme a su lado. Se ve realmente hermosa con ese short de blue jean y esa camisa de tiras color beige con volados. E tratado de controlarme a mi mismo todos estos días, pero ella no me lo hace fácil.

–Esta bien. ¿De que quieres hablar?

–Es sobre el bebe. –dice tocando su vientre, el cual no e podido volver a acariciar desde el día que desperté moribundo con ella a mi lado.

–Si, yo también e querido hablar sobre eso contigo.

–Ok. Escucha, e pensado todo muy bien. No te voy a mentir. Si quería alejar a mi hijo de ti. –muy bien, eso dolió como el infierno.

–¿Porque?

–Porque tu y yo no terminamos de la mejor manera. Y no quería que nuestro hijo estuviera en medio de nuestros problemas. –dice bajando la mirada. Y la entiendo, también odio como termino todo.

–Pudiste decirme que estabas embarazada y luego hubiéramos hablado sobre eso.

–Entiendeme. Luego de lo que pasó, no quería verte.

–No tenias que huir así. Eso fue tu culpa.

Ella frunce el ceño para luego verme como si quisiera matarme con la mirada.

–No te e agradecido por invitarme a tu fiesta de compromiso, eso fue muy amable de tu parte. –dice de forma sarcástica y fría al mismo tiempo. Lo que me hace sentir mal.

–Yo no te invite, fue Selina.

–Que lindo de su parte. Sabes que? No se porque quería hablar contigo, me largo. –quiso irse, pero apenas se levanto la tome de la muñeca para detenerla.

–Perrie. ¿No podemos hablar sin pelearnos por una vez? Esto no es sobre nosotros, es sobre el bebe.

Ella asiente y vuelve a sentarse, pero no parece tener intención de decir algo. Así que lo hago yo.

–¿Cuanto tiempo tienes?

–Casi cuatro meses.

–¿Cuando fue la última vez que te revisaron?

–No lo recuerdo bien, hace mas de dos semanas creo. –asiento.

–Traje a Sean para que lleve el control del bebe durante el tiempo que estemos aquí.

–¿Que? ¿Cuanto tiempo estaremos aquí?

–El tiempo que sea necesario.

–Nadie me a dicho el porque estoy aquí. Por favor aclarame eso Ryan.

Bajo la mirada y paso mis manos por mi rostro, sabía que este momento llegaría, pero no tan pronto.

–Es larga la historia.

–Entonces empieza.

Perrie

Ryan tenia razón, la historia fue largo. Resumiré. Resulta que Selina amenazo a Ryan con hacerme daño a menos que se casara con ella ya que al parecer su padre es un mafioso adinerado, esa es la razón por la que el no fue a buscarme luego de un tiempo de haber terminado. Luego se entero que yo estaba embarazada, por lo que pensó que Selina me mataría en cuanto se enterara. Y por eso me saco de esa forma de la ciudad, mi vida es tan aburrida —nótese el sarcasmo— aveces.

Algo Más Que Una Amante ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora