All Change, Even You. ==-:. Erwin Smith X Reader .:-==

53 ..:: Welcome ::..

Desafortunadamente, el día siguiente era día de visita en el reclusorio. 

_tn frunció sus labios en la patrulla de su padre, estaba nerviosa, incómoda, tenía miedo, y sobre todo lo que menos quería era ver sus ojos de odio hacia ella.

- Ya llegamos. -avisó el padre de la adolescente, la cual saltó levemente saliendo de su trance. No respondió nada y solo bajó del auto seguida del hombre.

Algo que no pudo pasar desapercibido era una ducati supersport azul marino metalizado estacionada cerca de la entrada, _tn la miró y miró la otra que estaba a su lado, una del mismo modelo pero negra. Su padre repentinamente la cogió de los hombros deteniendo su paso, por el cristal de la entrada observaba a una mujer de cabellera rubia y muy corta, alta y de aspecto intimidante, que se posaba en una de las paredes del recinto penitenciario. El oficial observó sus alrededores para luego suspirar pesadamente.

- Quédate detrás de mi. -entraron y a _tn no le costó mucho acatar esas ordenes. Una vez la puerta se abrió todos miraron al padre y a su hija. Un hombre de aspecto rustico miró de reojo al oficial y a la adolescente, con unos ojos verde esmeralda que le dieron un escalofrío a _tn, el comisionado estaba frente a él.

_tn destacó el tatuaje que va desde su muñeca y sube por su brazo hasta perderse de vista en la manga recogida sobre sus codos, era una serpiente negra.

- Nanaba. - nombró el hombre misterioso, todos miraron a la rubia que sacó un maletín negro y lo acercó hacia este. - ¿Esto le gusta comisionado? -el uniformado entre abrió los labios maravillado.

- Está perfecto. -lo cerró y luego lo tomó. - Sabía que era un buen hombre de negocios señor Snake. - este sonrió levemente.

- Solo si me interesa... Señor comisionado. -recalcó.- Y Bien.. ¿Donde está mi hombre? - el comisionado asintió mirando al padre de la menor en la habitación.

- ¿Qué esperas _tap? -este respingó. - Busca a Mike Smith. -asintió dubitativo y correteó hasta la otra sala. _tn flaqueó y dio un paso atrás, sentía el peligro que desbordaba esta gente en el aire y es muy denso. El castaño rojizo del tatuaje miró a la chiquilla fijamente, como detallándola.

- Aquí está. - habló el oficial de policía que llamó la atención de todos. El dichoso rubio miraba fijamente a su jefe.

- Oh Mike... -este se acercó a él, se paró frente a este. - No es que quiera que te hagas el importante ¿eh? -peinó su cabello rojizo hacía atrás. - Simplemente, eres importante en los yakuza. Pero sabes perfectamente que si cometes otro error de este tipo en otro país, iré nuevamente yo, personalmente hasta tu celda para meterte un maldito tiro entre ceja y ceja... ¿Estamos claros? -Mike asintió sin inmutarse. - Eso espero, Nanaba, dale las cosas. -la rubia le acercó una maleta azul rey la cual tomó. - Te dejamos una ducati negra afuera. -el hombre de los yakuza y su acompañante salieron del recinto. _tn aún contenía su respiración nerviosa, ahora simplemente tiene pavor de pasar por al frente de este sitio. Alzó su mirada observando al rubio el cual le devolvió la mirada.

- Vente _tn... -llamó su padre y esta asintió siguiéndolo. 

Entraron a las celdas, y luego de pasar como cuatro de estas, se detuvieron frente a una donde se encontraba una castaña sentada en una cama.

- Jessica. -le llamó y esta respingó y corrió hasta los barrotes, _tn dio un paso atrás evitando su mirada.

- ¡Vinieron! -exclamó feliz. - Sabía que vendrían... - miró a la peli_. -Mi niña hermosa... -intentó estirar su mano fuera de los barrotes y su hija solo se llenó de dolorosas lagrimas sintiendo como su mano acariciaba su mejilla, decidió no decir nada. - Mi juicio es el miércoles... - Jessica le sonrió débilmente a su hija. - Les dirás la verdad ¿cierto? -_tn entreabrió sus labios. - Sabes perfectamente que yo no soy culpable... -la adolescente frunció el ceño.

- ¿Que dices? -masculló entre dientes.

- ¡Yo no soy culpable! ¡Yo te estaba criando como debería ser! -empezó a gritar desesperada. 

- ¡No lo eres mamá! -le respondió realmente molesta. La mujer la miró severamente, la cogió del cabello con fuerza y esta chilló del dolor intentando soltarse.

- ¡Jessica por dios! -el hombre intervino separándolas con algo de dificultad.

- ¡No seas una perra _tn! -empezó a gritarle.  - ¡Yo te dí a luz y tienes que ayudarme con esta mierda por que es todo culpa tuya! -las lagrimas de la chica salían sin consuelo, por primera vez, se puso firme.

- ¡Me vale una mierda! -le respondió callando a la mujer. - ¡Estoy cansada! ¿¡Acaso yo elegí nacer!? ¡Tu fuiste la que buscaste un hijo! ¡Ese no es problema mío si eso te jodió la vida o no! -la miró con rabia pura, la mujer le devolvió la mirada.

- No te atre... -la interrumpió.

- ¡Si me atrevo! ¡Si fue tan fácil para ti joderme toda mi vida como te dio la gana, tengo el derecho de poder decir lo que me pega la gana! - paró buscando el aire bruscamente, siguió al ver que sus padres la miraban fijamente, muy sorprendidos.  - ¡Harta! ¡Me tienes harta de toda tu mierda! Odio como te haces la victima luego de que apenas puedo respirar por tus malditos golpes... -jadeó adolorida. - Y sabes... iré con gusto al juicio, para decir todo.. Absolutamente TODO lo que tu me hiciste. Solo para ver como te pudres en una cárcel. -Jessica veía a _tn como su viva imagen cuando era chica, esas eran exactamente las mismas palabras que la mujer le había dicho a su abuela en su niñez. 

- Ya veo... Lo entiendo... -empezó a mascullar con lagrimas en los ojos. - Entiendo que tu no me ves como una madre, y yo no te veo como una hija. -_tn sintió una presión en su pecho.

- Somos completos extraños entonces. -escupió fríamente. - Con permiso me retiro. -caminó fúrica hasta la puerta, donde algunos presos la miraban fijamente.

- Uiiishhh, está jodido eso.. -comentó uno.

- ¡Cállate metido de mierda! -le gritó al hombre el cual alzó sus manos con una sonrisa ladina. _tn abrió la puerta y la cerró de un golpe, cuando miró al frente se quedó paralizada.

Mike tenía su torso desnudo y un suéter negro en sus manos, la chiquilla reaccionó parpadeando rápidamente.

- P-Perdón. -masculló corriendo hasta la otra sala en donde suspiró levemente y abrió la doble puerta, salió y se recostó del muro dedicándose a llorar con fuerza.

- Oye bonita... -escuchó cerca de ella, esta secó su rostro con sus mangas rápidamente para poder aclarar su vista.

- ¿Eh?.-miró a un tipo con campera roja y aspecto desaliñado, _tn dio un paso para atrás llenándose de miedo.

- ¿Por qué tan solita cariño? -la peli_ lo miró con terror y se movió rápidamente para entrar al recinto pero el hombre fue más rápido y la cogió de los brazos...