Against the odds

8. Yo también puedo hacerlo

POV Bill

Dicen que la curiosidad mató al gato ¿verdad? Pues eso me pasó a mi. Después de tranquilizarme (por cierto, menuda crisis de ansiedad) fui a buscar a Tom. Quería saber porqué me había dejado caer al agua ¿o sólo era una excusa para verle? Bueno, como sea. Fui a hablar con él... Pero mejor no hubiera ido. Me dejó más hecho polvo y muy cabreado. Me soltó algo como que no me servía de nada ser guapo ni rico si en el fondo era como era... Sí, una frase para reflexionar. Pero por fin me dio la razón. Yo le gustaba, así que creo que no quería acostarse conmigo por orgullo y por todo lo que le había hecho. Aunque el reconocer que le ponía ya era un paso ¿no? A mi me servía eso. Sabiéndolo, no dejaría de intentar que se fijara en mi. Tarde o temprano, Tom... Tarde o temprano.

Decidí que era hora de llamar a Georg y disculparme con él. Es que, vaya cómo la liaba siempre. No podía estar enfadado con mi amigo del alma. Me lo cogió enseguida.

-¡Mamonazoo! ¿Ya te vale no? Colgarme así el teléfono.

-Perdóname, no me pillaste en un buen momento y lo pagué contigo. Soy tonto. -sí, Bill también sabe pedir perdón de vez en cuando.

-Lo eres... Pero no puedes estar enfadado con tu Giggy.

-Pues no... Ahhh, Georg quiero volver a casa enserio... Las cosas no están muy bien.

-¿Qué ha pasado con él, Bill?

-Bueno... No te voy a dar la razón a lo que me dijiste el otro día, pero sí me pone... Mucho... No ha pasado nada todavía...

-Bill... Dime la verdad -es que no sé cómo incluso por teléfono me pillaba... Así que exploté.

-Es que no me hace caso Georg, no hago más que putearle y meterme con él a ver si así cae de una vez pero nada, le disloqué el hombro, le ofrecí dinero a cambio de que se acostara conmigo, le he amenazado con hablar con su jefe para que le despidiera, incluso le obligué a hacerme una mamada y cuando le he empezado a tocar, me ha echado del camarote y encima me ha dado una crisis de ansiedad. -me sorbí la nariz. Me frustraba este tema.

-Espera, espera... ¿que has hecho qué? Joder... ¿No crees que te estás pasando un poco? Tienes que aprender Bill que por las malas no se consigue nada nunca. Si lo hubieras tratado bien desde el principio igual te lo hubieras tirado ya. A ver, tienes que entenderlo, te tendrá miedo el pobre chico después de todo lo que le has hecho.

-No me ayudas, ¿eh? Me siento un poco mal... Pero no sé hacer las cosas de otra manera.

-Con paciencia Bill, deja que pase lo que tenga que pasar. Cuanto más le intentes forzar, más se alejará de ti. Sé más amable con él. Ponte en su lugar un momento. ¿Qué hubieras hecho si todo eso te lo hubiera hecho él a ti?

-Seguramente le hubiera partido ya la cara...

-Pues eso... Deja de forzar las cosas.

Georg me dejó muy pensativo. Quizás tenía razón. Igual era hora de cambiar un poco con él. Nunca me había visto en esta situación, así que no sabía que hacer. Iba andando por el pasillo cuando los vi... Tom le estaba comiendo la boca a un chico rubio. Pero qué cojones... Me entró una rabia ciega y me subió el calor a las mejillas. No aguanté más y fui a hablar directamente con el jefe. Ahora que quería hacer las cosas bien, pero no... No se puede reír de mi de esta manera. En parte, me sentí dolido ya que poco tiempo antes me había dicho que le ponía y ahora estaba con otro tío. Que cínico... Si es que no dejaría de ser un muerto de hambre...

Hablé con su jefe que me dijo que le iba a despedir inmediatamente por acostarse con un cliente. Pero la cosa me salió mal, ya que no era un cliente sino el fisioterapeuta. Me cago en la puta. Esta te la voy a devolver, Tom...