The summer without you|Daniel Seavey T2

Capítulo 3

"She isn't the love of my life"-"Ella no es el amor de mi vida" 

Narra Daniel

¿Qué acababa de hacer? 

No podía dejar de llorar, me dolía el pecho como nunca antes. Creí que había tomado la mejor decisión, que todo se iba a sentir mejor y que esa sensación de vacío se iría. Pero, ahora estaba aquí sintiéndome peor. 

Arrojé la taza que me había regalado _____(Tn) contra la pared, sonó un estruendo y todos los vidrios volaron por la habitación. Cerré la lapto y la arrojé fuera de la cama. Me odiaba por haber sido tan estúpido al dejarla ir. El enojo me invadía junto con una emoción tan dolorosa que sólo quería gritar hasta quedarme sin voz.  La amaba, la amaba demasiado ¿Por qué había sido tan imbécil? ¿Por qué? Me acosté en la cama con las manos cubriendo mis ojos, nunca había llorado tanto. Y lo peor era que no podía parar.

—¿Qué fue ese ruido?—preguntó Bailey entrando a la habitación. 

¿Por qué tenía que estar sólo ella en casa? ¿Por qué los chicos se habían ido a comprar la cena sin ella? 

—¡Lárgate, Bailey!—exclamé poniéndome en posición fetal en mi cama, dándole la espalda. 

Quería retroceder en el tiempo sólo tres malditos minutos para jamás haberle dicho que la dejaba ir. Ahora nunca me iba a perdonar. La había dejado ir. 

—No me iré, arrojas cosas como loco mientras lloras. Ni loca voy a dejarte solo—sentí el peso de su cuerpo en la cama. 

—Bailey, no quiero ser grosero otra vez. Pero, de verdad quiero estar solo—insistí cerrando los ojos. 

Sólo venían a mi mente los llorosos ojos de ____(Tn) mientras le decía aquella estupidez. 

Recordé esa frase que leí una vez en algún lado, que decía: Irse es la forma más cobarde de amar. 

Yo era un cobarde.

—Prometo no hablar, sólo estaré aquí, Daniel—aseguró Bailey abrazándome por la espalda. 

Lloré largo rato acariciando sus manos alrededor de mi pecho, sentía su respiración en mi cuello, sentía el calor de su cuerpo junto al mío. Y sólo quería una cosa, sólo una. Quería que ella fuera ___(Tn). Me giré quedando frente a Bailey. Quería que secará mis lágrimas y me besara como lo haría ella, quería que se subiera sobre mí y me hiciera enloquecer como ella lo hizo aquel verano. Pero, no era el amor de mi vida, ella no era _____(Tn).

—Quien te haya hecho llorar merece ir al infierno—susurró Bailey limpiando mis mejillas con sus dedos. 

—Ella se merece el universo entero—murmuré cerrando los ojos para dejar salir todas las lágrimas que quedaban. 

—¿Hablas de ____(Tn)?—preguntó Bailey acariciando mi mejilla. 

Sólo asentí perdido en sus ojos oscuros, eran oscuros como los de _____(Tn). 

—¿Por ella estás así?—me preguntó en susurro.

—Por mí. Soy un idiota-le respondí quitando unos cabellos rebeldes de su frente. 

—¿Termin...—Bailey fue interrumpida. 

—¡Llegó la pizzaaaaa!—cantó Jack entrando a la habitación—Oops, mejor me voy—dijo al vernos acostados tan juntos. 

—No, Jack...—hablé sentándome mientras sonreía un poco, pero Jack ya se había ido pensando mal de Bailey y de mí. 

—Me gusta cuando sonríes—murmuró Bailey—Prométeme que no volverás a llorar por ella-se sentó a mi lado tomándome del hombro—Prometemelo, Daniel—insistió pasando sus dedos por mi cuello cariñosa. 

—Lo siento. No puedo prometerte nada—dije en murmullo poniéndome de pie.

Era pésimo con las promesas.

(...)

Tiempo después

Narras tú

No recuerdo haberme quedado dormida aquella noche, sólo sé que al día siguiente mi madre me despertó para ir al colegio, y fui. Los días han pasado tan rápido y las noches tan lento. Cada día que pasa tiene menos sentido. Ya había llegado diciembre y yo aún seguía en septiembre. 

—Ya puedo sentir la libertad—murmuraba Ashley emocionada a mis espaldas. 

Sólo quedaban cinco minutos para que empezaran las vacaciones navideñas.

—Podrías callarte—pedí riendo por su baile en la silla. 

—Es que mañana me voy a Dallas—lo dijo tan rápido que creí que era una broma.

—¿No estás hablando en serio, o sí?—pregunté sin creerle.

—Creí que Daniel te lo había dicho—habló confundida por mi sorpresa. 

¡Cierto! Había olvidado que Daniel y yo no le habíamos contado a nadie sobre nuestra ruptura. Al menos yo no lo había hecho, no estaba lista para decirlo en voz alta. Y por lo visto, Daniel tampoco se lo había dicho a nadie aún.  

—Tienes razón—hablé asintiendo sonriente—Pero, creí que irías a California no a Dallas—traté de arreglar las cosas. 

—Voy a Dallas a la casa de Zach a conocer a sus padres. ¿No es increíble que mis padres me dejaran ir a pasar navidad con la familia de Zach? ¡Aaaaahh!—Ashley casi flotaba de la emoción. 

—Sí, es una locura total—comenté y el timbre sonó. 

Y de un segundo para otro ya Ashley me llevaba arrastrada fuera del instituto. Como era de esperarse, Ashley y yo hicimos una pijamada en su casa al caer la noche, con la excusa de que no nos veríamos más hasta año nuevo, la ayudé hacer el equipaje y comimos dulces como locas. Ella se durmió primero que yo. Apagué el televisor y tomé mi celular para leer un rato. Me di cuenta que tenía un mensaje de voz de un número desconocido. ¿De quién era? Reproduje el mensaje de voz. 

—¡HAGAN SILENCIO, MALDITA SEA!—gritó la voz de Daniel a las otras personas que se escuchaban gritando en el fondo, también había música—¡ES ____(TN) MITCHELL! ¡ES MI ____(TN)!—gritó Daniel, mi cuerpo se estremeció, todos empezaron a gritar que me amaban, gritaban como locos—¡TE AMO ____(TN) MITCHELL! TE AMO. SIEMPRE SERÁS EL AMOR DE MI VIDA—Daniel se movió de lugar, la gente gritaba y la música cada vez tenia mas volumen, pero Daniel entró a un lugar silencioso—Sé que no tendría que llamarte, porque sé que dije que terminábamos, pero sólo quería decirte que estoy bien, sé que te preocupas por mí—suspiró y mis ojos se nublaron—Espero que tú también estés bien. Quería oír tu voz, pero como no contestaste la llamada, yo...—y terminó el mensaje de voz. 

Daniel estaba ebrio, eso era obvio.  Pero, no podía evitar sentir mi sangre correr como loca por mis venas, mi corazón exaltado y mis ojos conteniendo las lágrimas más agridulces. Hacia casi tres meses que no oía su voz, hacia casi tres meses que soñaba con ese sonido, con esas palabras. No dejaría pasar esta oportunidad para hablar con él, tenía que decirle que estaba bien, o eso era lo que le decía a todos, tenía que hablarle. Aunque me rompiera el corazón en el intento. Corrí y me encerré en el baño de la habitación de Ashley.

El mesaje había sido enviado hacia media hora, sin más rodeos, llamé a ese número desconocido. Mi estómago se sentía vacío con cada *deep*. 

—¿Halo?—contestó una voz de chica del otro lado de la línea. 

—Hola ¿Quién habla?—pregunté sintiendo tanto miedo de la respuesta. 

—Habla Bailey ¿Quié...—colgué de inmediato. 

Debería haberlo sabido, ahora dolía mucho más. Dolía como el infierno darme cuenta que yo era la única atrapada en el pasado de aún amor de verano. 

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Por fin, actualizo♥ 

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