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Escritora: Samara García. Fb: www.facebook.com/samara.garcia.378 Twitter: SamG_Belieber.

— ¿Y estarás tranquila en lo que resta del día? Le preguntó.

Ella asintió, Justin sonrió mientras se acercaba a sus labios, y le daba un beso y le acariciaba el pelo. 

Nirvana cerró los ojos con fuerza, que Hada le quitara los puntos no era para nada agradable, aunque le había sorprendido el hecho de que lo hacía delicadamente, igual tenía miedo. Al final se miró en un espejo, y de lo bueno que pudo apreciar era que no tenía marcas. Había logrado que Lucía le prestara su celular, y había buscado entre sus cosas el número de la mamá de Omar, ¡Al fin! Estaba feliz, ellos podrían hablarle de su padre, lo extrañaba muchísimo y quería saber cómo estaba, y entonces convencería a Justin de que la llevara a verlo aunque sea por una hora, se escabulló por el jardín, marcó varias veces pero nadie respondía, al final cuando alguien habló, se cortó la llamada, miró el celular, no había señal, siguió caminando y cuando por fin pudo tener señal sintió una presencia detrás de ella.

— ¿Qué estás haciendo aquí? Preguntó Justin.

Ella se agachó y puso el celular detrás de una piedra disimuladamente, aun llevaba el uniforme así que si lo entraba en su bolsillo él lo notaría.

— ¿Te estabas tratando de escapar? 

Ella negó mientras retrocedía, él avanzó hacia ella arrinconándola contra la pared.

—No me iba a ir, ya te lo dije, dijo mirando al suelo, él era más alto que ella, sentía su respiración en su frente, él estaba demasiado cerca. Ella cerró los ojos al sentir como él le acariciaba el pelo. —Es algo extraño pero cuando estoy a tu lado lo único que quiero hacer es besarte. 

El corazón de ella empezó a palpitar aceleradamente, —No empieces con esas cosas.

—Me estas volviendo loco, no sé qué me está pasando, pero lo único que quiero es…

—Basta, es mejor que te vayas de aquí.

Silencio.

Justin no se contuvo, no sabía lo que ella tenía pero simplemente la quería sentir entre sus brazos y sin importar que estuvieran en el jardín la pegó de una pared y la levantó, — Te deseo, y tú también lo haces, le susurró al tiempo que la besaba fuerte. 

CONTINUARÁ...

Amor Destructivo. Disponible en Físico & PDF (Links in bio)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora