Amor Destructivo. Disponible en Físico & PDF (Links in bio)

89.

—Dime, ¿Qué te pasa? Le volvió a preguntar acariciándole la mejilla. —Es por el auto ¿Verdad? Dijo revisando su bolsillo y sacando unas llaves. —Tómalas, fui un completo imbécil, ese auto solo es tuyo. Hoy mismo sacaremos tu licencia y pondremos el vehículo a tu nombre. Dijo besando su frente y abrasándola fuerte. —Dame una sonrisa ¿Si? 
Ella forzó una pequeña sonrisa. 
— ¿Por qué estás triste? le preguntó. —Lo siento… En serio, lo siento.
—Estaba aburrida en casa, mintió mientras miraba hacia otro lado. 
Justin frunció el ceño como analizando sus palabras pero luego sonrió un poco, la tomó de la mano y se sentó con ella en sus piernas abrasándola. Nirvana no podía sentirse más incómoda, era como si estuviera un cartel en la frente que decía: “Llevo conmigo los papeles del divorcio.” Pero si ya había empezado a ser perra tenía que terminar como tal, sino su plan nunca funcionaría. 
Forzó una de sus mejores sonrisas y le dio un beso en la mejilla. Lo que menos quería era levantar sospechas. 
Las demás horas pasaron realmente aburridas, aunque ella no lo dio a demostrar, él se la pasaba tecleando en su laptop y ella fingía que se sentía atraída por las revistas de economía que había en la oficina. 
La secretaria entró a la oficina cargada de papeles, los dejó en su escritorio. — ¿Qué es todo eso? Preguntó Justin asombrado. 
—Son todos los papeles del contrato que firmaste con VS Company ¿Recuerdas? Solo necesitan tu firma para que sea aprobado. No necesitas volver a leerlos, prácticamente hablan de lo que se habló en la reunión de ayer. 
Justin asintió. —No tengo tiempo de leerlos, solo los firmaré… Pero lo haré después del viaje. 
Nirvana se mostró algo interesada por su conversación. Él había vuelto a mencionar el viaje, no sabía exactamente qué día saldría del país ya que lo había pospuesto, y mucho menos sabía por cuanto tiempo. 
—Hay una reunión que está a punto de empezar para coordinar los últimos detalles y dejar a los que se quedarán a cargo de la empresa en tu ausencia, dijo la secretaria observando a Justin. 
—Cierto, respondió como si se le hubiera olvidado. —Nirvana, Vengo en unos minutos, no te vayas ¿Bien?
Ella asintió mientras lo veía salir junto con su secretaria. 
Ella suspiró. Observó la pila de papeles que había en el escritorio y un pensamiento corrió por su mente. “— Solo necesitan tu firma para que sea aprobado. No necesitas volver a leerlos. ” “—No tengo tiempo de leerlos, solo los firmaré… Pero lo haré después del viaje.” 
Y entonces todas las ideas se alinearon. Él no revisaría esos papeles, él se iría de viaje rápido. Lo que le daba tiempo, tiempo para irse, si le dejaba los papeles del divorcio entre esa pila de papeles entonces él los firmaría sin prestarle atención, lo que la liberaba de su primer problema, y además si él salía rápido del país entonces en su ausencia tendría tiempo para irse lejos, lo más lejos que pudiera de él y cuando él volviera no la encontraría ni sabría dónde podría estar. Perfecto. 
Sacó los papeles de su bolso rápidamente, él estaba enfrascado en una reunión así que no volvería de una vez pero igual tenía que hacer las cosas rápido. Por si acaso.
Metió los papeles en el medio de la pila de papeles. Y lo acomodó de forma que cuando él viera la hoja solo vería su nombre para firmar. En ese mismo momento sintió que alguien entraba a la oficina. — ¿Qué haces? Preguntó Sonia detrás de ella. 
Su pulso se aceleró. — ¿Qué haces buscando entre los papeles de Justin? volvió a preguntar. 
No pudo mover ningún musculo, — ¿Revisando papees? Preguntó con risa nerviosa. — ¿de qué hablas? Volvió a preguntar mientras trataba de idear alguna excusa convincente. —Estaba buscando esto, dijo tomando el bolígrafo que había detrás de la pila de papees y girándose a observarla. — ¿Por qué? 
Sonia se le quedó viendo algunos segundos. Achicó los ojos y luego frunció el ceño. —No era eso lo que estabas haciendo. Dijo. 
— ¿Ah no? Preguntó nirvana sonriendo. — ¿para qué tendría que revisar esos papeles? Es algo como tonto ¿No? 
—Eso dímelo tú. ¿No? Preguntó con voz diminuta. 
En ese momento entró Justin. — ¿pasa algo? Preguntó.