5.- S̤̈Ö̤N̤̈R̤̈Ï̤Ë̤N̤̈D̤̈Ö̤.

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          Mientras contemplaba las hermosas puertas,me entraban unas enormes ganas de abrirlas,pero, realmente lo pensaba mucho.
           Lleve una de mis manos a mi pecho y sentí como el corazón se comenzaba a acelerar. Respire profundo y lleve mi otra mano al picaporte y abrí una de las puertas.
          Adentro estaba totalmente oscuro y no lograba ver nada. Entre dando pasos pausados, la puerta se cerro de golpe al  encontrarme  fuera de su alcance.

Que hago?

- No pensé que llegaras a entrar - la voz de Elias causo que un escalofrío recorriera mi cuerpo - no se si dejar que veas lo que en este cuarto se esconde...
- Es malo? - pregunte en un hilo de voz.
- No  es tanto eso, sino que es importante para mi.
- No me importaría si usted no quiere.
- Bien, entonces sera en otro momento ya que así tendría mas tiempo para saber como mostrarlo. 
- Por mi esta bien.
- vayamos a los jardines que rodean la casa.
- claro - seguía sin ver nada, pero escuchaba ciertos sonidos como el crujir o el arrastre de ramas y hojas.
Que sera?

       La puerta se abrió y con la luz que dejaba entrar dibujo un camino el cual seguí sin dudar y cuando trate ve voltear para tratar de distinguir lo que ahí había me percate de que Elias se encontraba a mi lado.
Me preguntó si todo el tiempo estuvo a mi lado?

      Estando fuera de esa habitación Elias me estiro su mano con una hermosa sonrisa... Nunca antes había visto una sonrisa tan cálida, le  brinde mi mano y el la tomó firmemente como en un principio.
      Silky se encontraba en la entrada principal y cuando nos vio dio unos pasos hacia la puerta y la abrió. El anochecer ya nos había alcanzando y la luna dejaba caer sus rayos plateados de luz.
- Mira hacia las rosas - me pidió.
- Claro - mis ojos no podían  creer lo que veían. Las risas estaban siendo alumbradas por cientos o mas bien miles de luciérnagas...
    Era algo tan hermoso que era inevitable sonreír ante algo tan magistral.
- Eso pasa cada inicio de primavera - cierto, esa era la primer noche de primavera, el primer día después de  querer morir, el primer día en un nuevo hogar y el primer día alado de un hombre que me ha salvado,que me ha brindado un hogar y además que me a dejado sonreír.

LA BELLEZA DE SU SER'✿ฺDonde viven las historias. Descúbrelo ahora