42.- DESEOS.

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-No llores... No es mi cuerpo, y aun así puedo sentir tu dolor.
Parecía que el llanto no iba a detenerse, mi cuerpo se relajo de tal forma que quedo colgado de mis ataduras. Era un dolor asfixiante.
Era muy difícil ver lo que pasaba,  y en ocasiones lograba escuchar un poco lo que Elias y ella discutían.
- Quien eres? Donde esta Chise?
- Por que demonios solo tu...?  - no sabia si eran gritos o susurros, pero era lo que lograba escuchar.
- Contesta...
- Porque? 
A que se refiere?  Sus palabras parecían no tener sentido alguno, pero, tenia que ver algo en todo eso... Pero, que?
Ya no podía soportar tal dolor y me deje vencer...

[...]

Formo parte de las SEIRÍNAS, a diferencia de una sirena basada en mitos y leyendas nosotras no nos dedicamos a secuestrar marineros. Nosotras vivimos de los malos sentimientos de las doncellas. Mujeres que caminan sin rumbo alguno cargando cientos de sentimientos que nublan su pensar, después de una larga caminata llegan a un hermoso lago de aguas cristalinas el cuan refleja la luna a su perfección. Lago que las llama, tan solo basta con tomar una gota del agua para que nosotras podamos acudir y consumir su malestar y su alma...
Pero, un día ocurrió algo que jamas hubiéramos imaginado...

El lago o el lugar donde vivimos es llamado Speculum Heroicum meam, un lugar que es encontrado solo por mujeres en forma de lago, pero que se encuentra en la blanca luz de la  luna. Se necesita ser un ser con poderes mágicos para visualizar nuestra existencia sin problema... Pero, nunca conté con el hecho de que me encontraría con un  viajero, y mucho menos conté con que el seria capaz de verme.
El caminaba seguro por el bosque, el no miro ni una sola vez a sus espaldas, su brillante mirada color ámbar solo miraba hacia enfrente... Como si algo buscara.
Lo seguí manteniendo una distancia considerable, en ese entonces apenas tenia conocimiento de los humanos... Seres  sin sentido. Su caminata fue realmente larga antes de que se dispusiera a tomar un descanso. Prendió lumbre y se dispuso a descansar...
- Realmente la luna es hermosa... - La luz de luna funcionaba como una extensión de las aguas que nosotras usábamos para vivir, así que esa era la razón por la que podríamos pasear por los bosques en las noches. Me postre en la rama de uno de los grandes arboles y deje salir mis palabras creyendo que nadie podía escuchar, pero no fue así.
- Lo es... - no esperaba respuesta de alguna, pero las palabras de ese hombre me tomaron por sorpresa.
- Me puede escuchar? - la pregunta la hice sin pensar... Que hago?
- Claro, te escucho fuerte y claro - volvió a contestar - de hecho me has seguido por un largo rato.
- Pero, usted es humano... Como es que me puede ver?
- Digamos que mis ojos son los especiales...
Dedique toda esa noche a escucharlo, trate de no dar muchos detalles de nuestra existencia.
Al momento de despedirnos, él me pidió que nos volviéramos a ver, por un momento pensé en negarme... Pero, si lo quería ver.
- Estaré bajo aquel gran árbol cuando la luna allá tomado su lugar en el cielo - señale un gran árbol de ramas colgantes, al cual llamábamos "Curzlamni" era un lugar al cual evitabamos ir, ya que ahí es donde los humanos mas iban a buscar seres mágicos. Él acepto y me retire.
Mientras avanzaba entre la luz de la luna, comencé a sentir algo extraño en mi pecho, no sabia como definirlo... Sera dolor?
A la orilla del gran lago y todas las demás parecían aburridas...
- Kenala, encontraste presa? - me pregunto Kalin...
- Ni una sola... - realmente no había perdido mi tiempo en eso.
- Vaya, fue una noche terrible... - se quejo Marien.
- Para todas lo fue... Verdad, Kenala? - Kalin me hablo.
- Así es.
Ese día transcurrió tranquilamente. Me sentía ansiosa por que llegara la noche y pudiera ir a ver a aquel hombre.

Llegada la noche me apresure a tomar mi camino entre la luz de luna, había cambiado mi peinado, deseaba verme linda...
En ese momento llegue a tener mas de mil deseos.
Tarde en llegar ya que la luz era tenue y se me complicaba el avanzar, él ya esperaba por mi.
Mi corazón comenzó a latir a mil por segundo... Que es lo que me esta pasando?
Al verme él se acerco a mí, y me entrego un hermosa flor de mil pétalos, las cuales solo se entregaban cuando alguien era especial... La acepte y la coloque debajo del árbol junto a nosotros.
La conversación solo se centraba en lo que yo preguntaba. Su vida me parecía excitante... Algo que jamas podría alcanzar... Pero era algo que deseaba.

Del día luna que nos conocimos han pasado mas de veinte días luna. Nuestras platicas siempre me llevan a imaginar paisajes diferentes, amaneceres que jamas conoceré... Pero por este momento lo tengo a él.
Mis deseos en ese momento solo enfocaban en lo que me podía imaginar a su lado... Tan solo en él...

LA BELLEZA DE SU SER'✿ฺDonde viven las historias. Descúbrelo ahora