LA BELLEZA DE SU SER'✿ฺ

26.- SALIDA~.ुु

Tenia la respuesta a lo que había dicho Ulisse, sabia que era lo que éste lugar intentaba quitarme.

Elias.

Esa era la razón por la cual no tenia el tiempo necesario para verlo o convivir. Por esa razón sus ojos se mostraban de otro color y sus labios eran fríos. Lo que no sabía era como hacerle, que le tenia que decir?

Cuando me encontraba frente a la puerta tome una gran bocanada de aire y entre. Sabia lo que tenia que hacer, así que camine dirigiéndose al estudio. Ese era él único lugar de la casa al cual yo no me acercaba , primero tome él picaporte y realmente me aterraba hacerme a la idea de que tenia que enfrentar a Elias.
Abrí la puerta y lo primero que ví fue a Elias sentado, se encontraba detrás del gran escritorio sin excreción alguna. Los fríos ojos sin brillo de ese Elias me causaban cierto grado de inquietud.

Por que tenia que usar esa apariencia?

Comencé a dar pasos hacia él tratando de no mostrar inseguridad.

- Chise, ocurre algo? - no me llames... Pedía en silencio. Seguí avanzando sin dar respuesta alguna. Mientras mas atención le ponía a "Elias" me daba cuenta que de él salia un sentimiento de temor, duda, inquietud... No sabia como describirlo, lo que si entendía era que se debía a mi acercamiento.

- Elias, hay algo que no se como expresar... - mi voz mostraba un tono de seguridad.
- A que te refieres? - su voz era demasiado baja.
- Desde hace tiempo ya no estas a mi lado de la misma manera, tus palabras hacia mi ya no son de aliento...
- Puede que sea por que estoy ocupado... - me interrumpió, pero sabia que desde aquí todo tomaría un solo camino - pero prometo que cuando termine los pendientes cumpliré mi promesa.
- Promesa? A que te refieres?
-  A...A que pasare mas tiempo contigo, a eso me refiero -  la duda comenzaba a apoderarse de él.
- Ya veo, así que lo has olvidado. Ahora dudo de todo lo que me has jurado.
- Chise, yo no seria capas de olvi... No, yo no sería capas de jura... De jurar - no sabia si el estaba jugando al igual que yo o realmente ya no sabia que contestar. Su respuesta cambiaba, él se trababa.
- Sabes el por que ya no sabes que decir o pensar...? - su rostro, sabia que en esa apariencia el rostro de Elias ocultaba toda expresión, pero, yo aprendí a detectar sus sentimientos de otra forma... Y esta no seria la excepción,  tenia miedo, estaba aturdido, no sabia que hacer y estando consiente de su sentir - La razón por la cual ahora estas en ese estado es... Por que tu no eres Elias, todo esto es una mentira... TU NO ERES ELIAS!! - todo a mi alrededor se paralizó y la persona que tenia frente de mi se comenzó a marchitar.
Mi alrededor se comenzó a desaparecer como si de polvo se tratara, hasta mi existencia se iba desvaneciendo.

Me fusionaba con la nada y el todo a la vez.

                           ***

Aun sabiendo que mi linea de sangre va más allá de lo que imaginé  no cambia el hecho que soy solo una persona ordinaria. A diferencia de Elias yo no poseo magia o algún tipo de poder que me ayude a afrontar este tipo de problemas.
Soy consciente que desde el primer momento que llegue a la vida de Elias los problemas se hicieron presentes... Nunca tuve que cuidar de mis actos, nunca tuve que distinguir el bien del mal y nunca tuve que pensar en los demás.

Siempre estuve sola.

Pero...

Ahora tengo una razón para avanzar, para querer vivir, para querer avanzar y no dejarme rendir... Nunca mas.

                          ***

Podía escuchar como Elias soltaba gritos de desesperación, Ulisse trataba de calmar sus impulsos con palabras.
- No me dejan dormir, saben? - mi voz no escondía el cansancio y el dolor que sentía. Fui abriendo mis ojos poco a poco y lo primero que vi fueron los hermosos ojos de Elias - amo el brillo de tus ojos. Y mas cuando solo es para mi.
- Chise, yo... Perdón... No... - su voz era un susurro que se iba ahogando.
- Estoy bien, tranquilo.
- Pero, todo esto es mi...
- Nada es tu culpa, si estuviera sola también tendría estos problemas, pero, no sabía afrontarlos... Puede que a estas alturas ya no viviría.
- No digas eso... No lo...
- Mago, nuestro amigito esta perdiendo el control - la voz de Ulisse mostraba miedo y burla.
- Cuanto tiempo paso?
- Unos cinco minutos o poco mas.
- Vaya... Yo sentí que fue mas que eso...

Ahora que había regresado dolo faltaba enfrentar a la persona que tanto ambicionaba.
A la persona que de ahora en adelante enfrentaremos... Sin dejarnos caer...