-¿Estás mejor?-Susurro.
Intento que mi voz salga suave para no alterarlo más de la cuenta.
Su cabeza se mueve y sus ojos revolotean.-Sí.-Se lleva uno de los dedos a sus párpados y se los frota débilmente apartando las lágrimas ya casi secas.
Lame sus labios rápidamente, y baja de nuevo su cabeza, suspirando.-Estoy mejor.-Su voz suena enrronquecida.
Aprieto los labios y miro sus manos sobre su regazo, temblando.
Aunque parece que intenta disimularlo apretando sus dedos fuertemente sobre sus rodillas.Inclino mi rostro y veo como muerde su labio inferior con fuerza.
Sus mejillas normalmente pálidas se ven sonrrojadas por el llanto.Alargo mi mano en el aire y la detengo justo delante de las suyas, dudando si debería de tocarlo para darle consuelo. Pero después lo pienso bien, y decido dejarlo.
Aprieto mis dedos en mis rodillas, copiando su posición, y lo miro. Algo se encoje dentro de mi al ver su estado.
-¿Nunca nadie te ha acariciado?
¿Abrazado? ¿Nada?.-Mi voz sale con una tonalidad extraña, pero es que todavía no me termino de créer que nunca nadie pusiera un dedo sobre él.Parece algo realmente ilógico e imposible bajo mi punto de vista.
Yo nunca podría haber sobrevivido sin el cariño y el amor de mis padres.
Y una caricia de ellos, por ejemplo, siempre ha sido mi mejor cura cuando me encontraba mal, ya sea física o mentalmente.Akram deja su labio quieto y eleva su cabeza para dejarme ver su rostro.
Sus pestañas todavía siguen algo húmedas. Sus pupilas deformadas parecen enfocarme, aunque ciertamente, no me ven.Sacude su cabeza.
-La primera vez que toqué a alguien, fue cuando tome tu mano en el desayuno, cuando nos conocimos. Fue la primera vez que sentí la calidez de una persona, estando consciente.-Pestañea.-Mi madre me sostuvo al nacer.-Se encoje de hombros y traga saliva.-Pero cuando vio mis ojos, me tiró a la basura. No creo que importase, por que no lo recuerdo.
Así que para mi, tú eres la primera.Frunzo el ceño.
-Eso fue muy cruel.
Vuelve a encogerse de hombros.
-No nací con suerte.-Murmura.
Elevo mis cejas y lo miro de reojo.
-Mis padres me han enseñado a créer en el destino, no en la suerte.
Mi padre siempre me ha dicho que las cosas malas aveces pasan por una razón.-Me toco los ojos y luego me detengo, por que no puede ver mi gesto.-Mis ojos son así por una razón. Ellos decían que solo la persona que de verdad me quisiera, los amaría.-Susurro.-Yo los amo.-Afirma.-Los adoro.
Abro mucho los ojos y me atraganto.
Mis mejillas empiezan ha arder salvajemente.
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ELEK (Maverick II)
Romance"Un niño ciego no puede amar algo que no ve" "Papa crée que Akram es débil, que no puede protegerme, pero él no sabe que alguien con ojos perfectos nunca podría amarme tanto como sus ojos rotos lo hacen." "Akram se convirtió en el Rey del infierno...