neighbors | ꜱᴍ

Capítulo 15.- Desayuna Conmigo.

Jade's POV

Sentí unos movimientos debajo mio, abrace con fuerza el suave pecho que tenía con mis brazos. Una gran comodidad estaba experimentando.

Espera... ¿Que?

Tal vez me quede dormida unos minutos más, estaba cansada, lentamente abrí mis ojos, tratando de acostumbrarme a la luz que entraba por la ventana.

Suspiré, había tenido un sueño realmente malo, casi podríamos llamarle pesadilla.

—Hola.

Me equivoque, es real.

Con fastidio mire a chico ruloso que sorprendenteme estaba sentado a mi lado.

—Buenos días. —Me dijo, ya que no había respondido anteriormente—. Espero que tengas hambre pues te he preparado el desayuno.

Sonrió.

Esas malditas sonrisas, eran las culpables de todo.

—No gracias, tengo que conseguir otro boleto de avión para esta tarde. —Le dije sin pensar.

Ni siquiera había pasado por mi mente eso, pero tengo que recoger algo de mi orgullo después de lo de anoche.

No dijo nada, al parecer quería que hiciera algo, me miraba con suma atención esperando.

Me sentía desnuda, sabía perfectamente que traía mi ropa de la noche anterior puesta. Pero su maldita mirada la sentía en todas partes. Con cuidado de no caer por mis piernas temblorosas camine hasta la puerta, giré la manija y casualmente no abrió.

Oh genial.

Estaba cerrado. No. Mejor dicho, estamos encerrados.

—¿Puedes abrir la puerta por favor?

—Claro que puedo, pero no lo haré.

Me esta jodiendo.

—¿Por qué?

—No quieres desayunar, no saldrás de aquí.

—¿Sabes que esto se considera secuestro no?. —Lo miré con una ceja alzada y el rió.

—Por supuesto, he leído bastante, y también que en varias ocasiones la víctima, en este caso tu, se enamora perdidamente de su secuestrador, en este caso yo. —Se apuntó así mismo con un dedo y una sonrisa triunfadora en su rostro—. Se le llama estocolmo. —Susurró por último en mi dirección.

—¿Y no has leído que la víctima en ocasiones logra matar a su secuestrador y escapa gloriosamente?

—No de hecho no, ¿es capas eso?. —Se levantó y camino a mi con los dedos escondidos en los bolsillos delanteros del vaquero negro ajustado que traía puesto.

—¿Quieres probar?. —Cruce los brazos frente a mi, para crear un poco mas de espacio entre su cuerpo y el mio.

—Si, pero ¿Por que no mejor comenzamos con lo que yo leí?

—¿Y por que no abres esa maldita puerta de una vez y dejas que me largue de aquí?

—Eso no es divertido. —Hizo un puchero.

—Por favor Shawn, basta de juegos.

—No es un juego Jade. —Hablo con seriedad—. De verdad me gustaría que desayunaras conmigo.

Baje la mirada he hice una mueca, lentamente asentí.

—Vamos. —Susurró e intento tomar mi mano, fui más rápida y la aparte.

Deje que abriera la puerta y caminamos por un corto pasillo, hasta llegar a la cocina. Desde donde estaba podía ver perfectamente la puerta de entrada.

—Ni lo pienses, también la cerré. —Me dijo mientras dejaba un plato de hot cakes frente a mi. Lo mire con el ceño fruncido—. ¿Que?

Negué y comencé a comer.

Recuerdo el día que hizo una transmisión en vivo por instagram. Donde estaba cocinando arroz y preparando te. Le quedo bastante raro por lo que vi. Ese recuerdo me hizo sonreír.

—¿Que pasa?. —Preguntó intrigado mientras se sentaba frente a mi.

—Solo recordé algo.

—¿La primera vez que salimos? ¿El día que salimos a cenar? ¿A patinar? ¿Nuestro primer beso tal vez?

Lo mire fijamente, ¿Por que demonios me recordaba eso? Conmigo era mas que suficiente.

No le respondi y termine lo que me había servido.

—Ahora me voy. —Me levante, sin esperar su respuesta—. Gracias.

El también se levanto y tomó un pequeño juego de llaves, espere que llegara a la puerta para que abriera, pero cuando estaba ahí, no lo hizo. Solo guardaba silencio mirándome.

—Jade. —Me hablo y lo miré—. ¿Alguna vez podre recuperar lo que teníamos?

Me quede pensando, ¿se podría? ¿Le daría otra vez mi confianza?.

—No lo se, aun no te puedo responder eso. Aunque quiera. Solo te diré que no te guardo rencor, ya lo supere.

—¿Lo que tuvimos lo has superado?

—No. —Suspire y lo mire—. No puedo.

Confesé.

—Jade. —Me volvió a llamar—. ¿Podrias...? —carraspeo—. ¿Podrias no irte?. Se que no soy quien para pedirtelo pero, no lo se. No quiero que te vallas, tengo miedo de que no regreses.

Deje mi orgullo y mi frialdad de lado cuando mire como hablaba, estaba triste lo podía ver perfectamente en sus ojos, estaba siendo honesto. Podía sentirlo.

Me acerqué y pase mis brazos por detrás de su cuello para abrazarlo con fuerza, de inmediato sus manos estaban estrujandome contra el.

—Ya no te vallas Jade, por favor, te lo pido. —Mi corazón se estrujo con sus palabras—. Se que te dije que en cuanto pidieras que me alejara lo haría pero no puedo. Simplemente no.

—No te lo pediré, no me iré.

Lentamente lo solté, mis manos subieron hasta su cuello para acercarlo a mi. Se dio cuenta de lo que quería hacer y junto su boca con la mia. Sentí cosquillas en mi estómago, desde hace tanto tiempo que extrañaba sus dulces labios y su suave lengua, jugué un poco con el cabello de su nuca. Nuevamente mis manos bajaron pero esta vez hasta el cierre de su suéter negro. Lo baje completamente y se lo quite.

—¿Que haces?. —Preguntó divertido con cierto brillo en los ojos.

Le sonreí y volví a juntar su boca con la mía, no protestó y siguió con el beso. Ahora más fuerte, necesitado y apasionante. El beso más atrevido que nos habíamos dado.