Estaba perfecta, no es por ser egolatra pero estaba para comerme. Ana me habia mandado silbidos y frases tontas con las que me mataba de risa.
El vestido era ajustado y marcaba bien mi cuerpo, me encantaba el color y mi peinado hacia lucir mucho mas. Esperaba no llamar la atencion pero eso iba a ser demasiado dificil.
Me gustaria lucir el vestido acompañada de alguien importante pero solo voy de visita como representantes de la compañia. Cogi mi hermoso auto, me sentia que era la esposa de alguien importante que huia de sus enemigos.
Rei ante mi pensamiento, me habia perdido tanto en mis pensamientos que ya habia llegado sin darme cuenta. En la entrada estaban dos hombres de trajes.
Se veian demasido guapos, parecian modelos para revistas. Me acerque a la entrada y note la mirada de ambos hombres.
Uno se me acerco sonriendo, no era facil asi que ni un coqueteo hoy.
-¿Vienes de parte de la empresa Reyes?
Eso llamo mi atencion, asenti, el me tomo de la mano sin previo aviso y me guio hasta el otro hombre modelo.
- Esta es la bella dama que estabamos esperando.
- No me secuestren - no se ni de donde salio eso pero esa era la frase de los villanos. Simplemente se echaron a reir.
- No te vamos a secuestrar, aunque tenta la idea - me sonroje - pero somos tus dos compañeros, de plantas diferentes.
- Vaya, perdon pero admitan que era una frase de villanos.
Pasamos un rato mas platicando, pero tuvimos entrar no era demasiado justo llegar tarde. El salon era lo mas hermoso que habia visto, era bastante espasioso, las mujeres estaban muy bien vestidas.
Los hombres era para comerselos con la mirada demasido guapos para ser legal. Divisamos a Tayler a unos cuantos metros. Los tres nos acercamos a el, sentia varias miradas quemandome la nuca pero pase de ellas.
- Buenas noches, Señor Reyes.
El fruncio el ceño, despues de que conociéramos mejor siempre lo llame Tayler.
- Buenos chicos disfruten la fiesta, Teresa necesito hablar con usted.
Asenti con ma cabeza y fuimos hacia un lado, Martin y Nathan estaba ahi, estaban bastante guapos los dos. Nathan estaba ganándose las muradas deprabadas de todas las mujeres, extrañamente eso me molestaba.
- Caballeros, ya llego Teresa.
Sali de atras de Tayler y Martín silbo comicamente lo que causo una risa de mi parte. De parte de Nathan recibi un casi desapercibido gruñido.
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Mi Vida, Mis Reglas Y Mi Jefe.
AcakTeresa magomery esta cansada de lidiar con un pasado tortuoso y un presente lleno de hipocresía, ella decide mudarse a Canadá para alejarse de la vida que lleva en Rusia, su país natal. Sin embargo no sabrá lo que se encuentra ahí. Nathan Reyes un...