La vida de Leonel estaba llena de maltrato, tristeza y dolor. El universo lo puso frente a Javier.
Ambos eran físicamente iguales, y para la terrible suerte de Leonel, aquel chico era incluso una mejor versión de él.
Él lo llamó "Mi gemelo", pero de...
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TODO LO BUENO, LLEGA DESPUÉS DE UN GRAN ESFUERZO
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Estaba Leo en el estacionamiento de aquella enorme universidad. El auto lo dejó de un lado, con una de las llantas sobre la acera, todavía no lograba controlar correctamente aquella unidad. Pocas veces había conducido un auto y no era muy bueno en ello.
La alarma del automóvil se escuchaba a todo volumen, Leo presionaba los botones del pequeño control en su mano, en un intento desesperado por silenciar el molesto ruido.
Estaba por darse por vencido cuando una mano femenina arrebató dicho aparato y con solo mantener presionado uno de aquellos botones, el ruido terminó.
—Hola, Javi —saludó una linda chica morena clara de ojos verdes, devolvió el control a Leo y sin darle tiempo a reaccionar, estampó su boca con la de él.
Leo estaba en shock y quieto como una estatua, como si sus pies estuvieran pegados al pavimento.
—¿Ni...Nimue?
—¿Dónde? —La chica giró sobre sus talones buscando a la susodicha sin verla, rio y dio un juguetón golpe al pecho de Leo.
«¿Cuántas novias imaginarias tiene Javier?»
—Me pareció verla, olvídalo —Leo mintió esperando que la chica no se diera cuenta de que no la conocía.
—Tonto, pensé por un momento que ya había llegado la pesada esa —ella le guiñó un ojo.
—Solo la aluciné, olvídalo.
—Pero no te preocupes, Roxana me dijo esta mañana que va a alejar a esa tipa molesta de tu vida —se encogió de hombros— dice que ya te hizo sufrir lo suficiente por haberla rechazado. Solo quiso darte una lección, haciendo creer a esa tonta que tú la querías como novia. No te preocupes, hoy se solucionará ese asunto.
—Eso no se hace. Es muy injusto tanto para esa chica como para Jav... mí —Leo la miró indignado.
