La vida de Leonel estaba llena de maltrato, tristeza y dolor. El universo lo puso frente a Javier.
Ambos eran físicamente iguales, y para la terrible suerte de Leonel, aquel chico era incluso una mejor versión de él.
Él lo llamó "Mi gemelo", pero de...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
AUNQUE EL MIEDO SEA GRANDE, AUNQUE TODO PAREZCA EN CONTRA, LUCHA POR SEGUIR ADELANTE, TU VIDA ES VALIOSA, ASI QUE SIGUE CAMINANDO, NO TE DEJES VENCER POR UNA DERROTA
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Y se hizo el silencio mientras Jumara estaba en medio de Leonel y de Javier, mirando a ambos chicos con completo asombro.
—¡Pero si son igualitos! —La peliazul habló emocionada mientras daba pequeños brinquitos en el mismo lugar.
—Esto no es real —Leonel negó con la cabeza y comenzó a caminar hacia un pasillo pequeño, oscuro y húmedo, que daba a la calle.
«No puedo seguir un segundo más aquí»
—¡Oye espera! Solo quiero hablar contigo un minuto —Javier lo tomó por el codo izquierdo, reteniéndolo para que no se fuera— ¡Somos gemelos!
De un tirón brusco, Leonel se soltó procurando alejarse lo más posible de este chico.
—¡No soy tu gemelo! —Alzó ambas manos en rendición— Y no quiero saber nada más de esto.
—Amor, cálmate. No te cuesta nada escucharlo —comentó la chica.
—Pero... —Aquel chico insistió de nuevo acercándose al otro.
—¡Pero nada! —Leonel salió corriendo por el pasillo sin hacer caso al llamado de Javier, ignorando también a su novia Jumara.
«Mis padres se me murieron, no tengo más familia asi que yo no tengo un gemelo»
Javier no lo iba a dejar ir tan fácilmente, pues ¿qué tan probable es que encontremos a nuestro doble?
Algunas personas creen que todos en el mundo tienen un doble que es su exacta réplica, es casi imposible poder encontrarlo y si la fortuna les ha sonreído de esta forma ¿por qué desperdiciarlo?
Y Javier no iba a perderlo sin siquiera haber hablado con él ¡Esto es la solución a todos sus problemas!
Decidido, Javier dio unos pasos, iba a correr detrás de aquel chico, pero se detuvo cuando un grito retumbó a su espalda.
