Sálvame » Omegaverse

27.

Los chicos se encontraba el la sala y esperaban su oportunidad mientras se turnaban el mando de la Wii con la simple regla de "el ganador se enfrenta con el siguiente contrincante".

Esperaban visitas, Tord había recibido un mensaje de Patryck el cual mencionaba que debían verse en la casa que el noruego compartía con sus demás amigos, en un principio creyó que se trataba de algo grave pero se tranquilizó cuando el polaco le dijo que no era un problema de ningún tipo.

--¡Vas a perder!-- gritó Tord concentrado mientras realizaba cambio de botones en el mando.

--¡Aún tengo oportunidad!-- gritó igualmente Matt, solían gritar mucho cuando jugaban, sus vecinos estaban artos.

La pantalla que dividía a los jugadores marco la victoria del mayor con un letrero que decía "Ganador - RedLeader" por su traducción lider rojo, era el nickname que Tord usaba en videojuegos o incluso para algunas bromas.

El timbre de la casa sonó y los tres chicos gritaron al unísono.

--¡Yo no!-- un grito conocido entre ellos que significaba que no se levantarian de sus asientos para atender la puerta.

--Maldición-- dijo Matt por lo bajo mientras se ponía de pie, el no había dicho la señal por lo que él debía atender. Simples reglas de la casa.

Al abrir la puerta el pelinaranja se encontró con dos hombres tomados de las manos, uno más alto que el otro, con cabello bastante largo mientras que el contrario resaltaba por unas grandes cejas marrón y sostenía un cigarrillo entre sus labios.

--¡Hola Matt!-- saludó Paul después de soltar al aire el humo de su cigarrillo.

--¡Hola chicos adelanté!-- dijo Matt y se movió hacia un lado de la puerta dejandoles entrar.

Los chicos saludaron a la recien llegada pareja y la invitaron a tomar asiento en la sala con ellos.

--¡Edd felicidades!-- dijo Patryck señalando el cuello vendado del mencionado.

--Muchas gracias-- agradeció el castaño con leve rubor.

--¿Quién es el afortunado?-- preguntó Paul dando unos cortos y lentos aplausos.

--Es Matt-- respondió y abrazó al pelinaranja sentado a su lado.

La pareja conformada por Paul y Patryck aplaudió y por un momento ambos miraron a Tord el cuál al sentir la mirada volteó, lo miraban con una señal que Tord reconocía y era que ambos tenían la esperanza de que hasta este momento el haya tenido la oportunidad de marcar a Tom como suyo.

Tord negó con la cabeza lo más disimulado posible y la pareja respondió con ambos bajando las cejas el señal de lastima.

--Bien chicos en realidad a eso hemos venido-- dijo Paul.

--¿A que te refieres?-- habló Tom finalmente.

--La notícia es que...-- Patryck hizo una pausa en la cual tomó la mano de su pareja entre sus manos y la recargo sobre su pierna --Paul y yo nos casaremos--.

Los aplausos y las felicitaciones inundaron la sala, todos miraban sonrientes a la pareja que se daba un beso frente a ellos.

--Me alegro mucho-- dijo Tord poniéndose de pie a abrazar a ambos por el cuello.

--Gracias-- dijo la pareja y rieron de felicidad.

Después de aquel largo abrazo por parte del noruego.

--Les hemos traído la invitación-- dijo Paul sacando de su abrigo un papel el cual Edd tomó.

Era un papel color crema con algunos diseños de textura sobre él, en la portada unas letras "B & B" muy comunes en la sociedad que indicaban la unión de dos Betas en matrimonio. En su interior la fecha era dentro de tres días y el lugar de la boda que se llevaría acabo entro de el salón de un hotel muy conocido.

--Muchas gracias por invitarnos-- dijo Edd terminado de dar una ojeada a la invitación.

--No hay de que chicos, bueno dejaremos de molestar-- dijo Patryck poniéndose de pié, apunto de despedirse.

--Chicos, por favor, quédense a cenar-- invitó Edd.

--Si, hoy a Tord le toca cocinar la cena-- dijo Matt burlón.

Después de conversar un rato he incluso jugaron unas cuantas partidas en la Wii, Tord se dispuso a comenzar la cena y con algo de pesadez caminó hasta la cocina, no era el mejor cocinero incluso el mismo solo comía tostadas de desayuno si Edd no le cocinaba algo.

Se decidió por unos macarrones con queso fáciles de preparar y que a todos les gustara.

Unos cuantos minutos pasaron, había cocinado la pasta y la estaba dejando reposar mientras rayaba el queso cheedar, pasos fue lo que escuchó por detrás de él.

--¿Necesitas ayuda?-- preguntó alegre Patryck acercándose a él.

--Está bien solo debo cocinar el queso-- respondió Tord.

--Bien-- dijo Patryck, hubo un pequeño silencio antes de que volviera a hablar --¿Como vas con Tom?... Ya sabes por que no veo una mordida sobre su cuello.

El noruego río con un poco de lástima --Si, no tiene marca aún--.

--¿No planeas morderlo?-- preguntó el polaco --Sabes que es peligroso para un Omega el no tener marca--.

Tord esparcia el queso sobre la pasta a fuego lento que poco a poco iba tomando un tono amarillento.

--Planeo hacerlo pero no quiero presionar las cosas, ya lo presione demasiado-- dijo con un tono serio --La cena está lista ¿podrías avisarle a los demás?--.

Patryck asintió y salió de la cocina había notado ese repentino cambio de tema por parte de su amigo de la infancia, tal vez no quiera hablar de eso.

Los chicos y la pareja invitada cenaron entre un ambiente cómodo rodeado de algunas bromas sobre los macarrones de Tord y anécdotas.

Pasado media noche la pareja se despidió de todos, agradeció la cena y salió. Los volverían a ver en la boda.