S I E T E

432 24 0
                                    

~León~

Una vez que cerro la puerta, sentí como si me ahogara, ni siquiera me permitió explicarle.

Simplemente, no quiere que tener nada que ver con este mundo, con nosotros, conmigo...

Y no se porque demonios me duele, no somos nada, no nos conocemos, jamás hemos congeniado.

Pero al verla dormir en mi cama, respirar su aroma y sonreír, me hizo sentir bien, muy bien, pero supongo es lo mejor.

Recuerdo su expresión, le da pánico y terror enfrentar la verdad por ello prefiere no conocerla.

Es aceptable, si a mi me hubieran dado opción, seguramente habría elegido una vida normal.

Su aroma a orquídeas, dulce y deleitante aún sigue impregnado en mi.

Debes mantener el control León, tal vez esto solo lo sientes por la conexión de almas gemelas y con esa idea, sobre llevo mi día.

Entreno exhaustivamente hasta no poder más, maldito Draak, pagará por enviar aquel Moordernaars por Sheccid.

Estoy furioso, frustrado, culpable y dolido, demasiadas emociones en un corazón demasiado apasionado.

Todo en mí, ahora es tan natural, tan animal y salvaje.

Simplemente desearía que ese maldito jamás la hubiera lastimado, entró a este mundo de la peor manera, como se supone que ella nos salve, que yo la ayude, si no va permitir que me acerque.

Tampoco es como si tú hubieras sido la persona más agradable del mundo, que digamos.

Estúpida conciencia, pero tiene razón tal vez todo hubiera sido más fácil, si la hubiera tratado bien desde un inicio pero era un niño.

Un niño demasiado maduro e inteligente para su edad.

Golpeo con fuerza el saco y lo tiro, me limpio el sudor de la frente con el dorso de mi mano una vez que me quite el guante.

- Supongo las cosas con Sheccid, no fueron bien.- escucho a Logan y me giro para verlo.

Me mira burlón y suelta una carcajada, supongo para él es divertido verme molesto.

- Ella no quiere tener nada que ver con nosotros. - espeto y voy a por el saco.

La sonrisa de Logan desaparece y abre paso a la seriedad.

- ¿Cómo demonios ha pasado eso? - grita Logan.

- No me dejo explicar nada, simplemente acortando todas sus palabras, "No quiero ser parte de esto", y en sus ojos note que no solo era eso, sino que tampoco nos quiere cerca. - explico y Logan gruñe.

- Sin Sheccid, la guerra se irá al drenaje, jamás venceremos a Donker. - dice rendido, ruedo los ojos.

- Habla con ella, persuade a Sheccid a escucharte. - opino y tomo mi botella de agua, el tacto frío del envase es refrescante.

La destapo y comienzo a beber la sustancia.

- No deberías hacer eso tú, tú eres su guardián y alma gemela. - me atraganto con el agua.

Cuando ya me he recuperado, lo miro molesto.

- Soy su guardián pero me rehusó totalmente a ser su alma gemela. - espeto colérico.

- Pero si ya lo eres. - dice Logan y lo fulmino con la mirada.

Un carraspeo nos interrumpe, miramos en esa dirección y los ojos caoba de Sheccid me reciben.

El aire se atoro en mis pulmones, ella nos miraba seria.

- Sólo vine por que quiero respuestas. - dice y sus mejillas se sonrosan y frunce el ceño.

Su cara muestra molestia.

- ¿A que te refieres con "alma gemela"? - hace comillas con sus manos y mira inquisitiva a Logan.

A mi me ignora por completo, hago una mueca, eso duele.

- Sheccid... - empieza Logan para calmarla.

- No, dime que es una broma, no puedo tener un alma gemela o al menos no deseaba saberlo. ¿Es cierto, lo que dijiste, León es mi alma gemela?- lo mira ansiosa.

Yo solo contemplo la escena, nadie me nota.

- Si. - contesta y ella frunce el ceño.

- Y de casualidad, me pondrían aclarar ¿por qué me toco un alma gemela que me detesta? - dice irritada y ligeramente noto una nota de dolor.

Hago una mueca de nuevo, es como pequeños cuchillos siendo lanzados a mi.

- No importa, comparto tú opinión,- me mira directo a los ojos sin duda y con determinación. - Yo también me rehuso totalmente a ser tu alma gemela.

Mi pecho duele aun más y siento como respiro con dificultad, me lo merezco, se que lo merezco pero no pensé que doliera tanto.

Ella mira a Logan y le hace una seña de que se acerque.

- ¿Me puedes explicar todo? Por favor. - pide, Logan sonríe a ella y la lleva a dios sabe donde.

Carajo, he tenido una cucharada de mi propia medicina y no me gusta en lo absoluto.

Camino desesperado por encontrar a Sheccid y disculparme, no quiero que me odie, aunque me lo merezca por maldito egoísta, pensé solo en mí cuando tomé la decisión y no consideré los daños que le provocarían a ella.

Escucho risas, emprendo mi camino hacia ellas, veo a Logan transformado en tiburón en la piscina y Sheccid sonríe asombrada.

- Eso es genial, Logan. Eres genial. - dice y mi pecho duele de nuevo, ¿desde cuando soy tan sensible?

- Oye una pregunta, ¿por qué León me detesta tanto? ¿Qué le he hecho? No, olvida eso, no importa. - suspira y se pasa las manos por su cabello.

Logan deja su transformación y se acerca a ella.

- No te odia, simplemente que piensa que por que son almas gemelas lo que sientan el uno por el otro, será manipulado por esa conexión, cuando no es así, muchas almas gemelas no se aman de manera romántica, solo son amigos y eso les hace felices. - explica mi hermano y yo escucho atento jamás comenta el tema conmigo, tal vez sea por que soy un idiota que se molesta con su sola mención.

Ella asiente, mira al techo y suspira.

- Será mejor que ya vuelva a casa, te veo mañana, gracias por explicarme. - le da un beso en la mejilla y se despide.

Pego carrera y me escondo para que no se enteren de que estuve espiando. Supongo que por mis tonterías, me he quedado sin alma gemela.

Soy un idiota.

Instintos © Donde viven las historias. Descúbrelo ahora