Instintos ©

D I E C I N U E V E

Cuando pasó ese momento emotivo, Draak se fue y yo obedecí a sus indicaciones, me encerré y entré a la ducha.

El agua caliente relajó mi cuerpo y se llevó todas las preocupaciones, al menos temporalmente, traté de no pensar demasiado, pero fue imposible.

Terminé de bañarme y volví a la cruda realidad, estoy en bata con mi ropa interior que lave y seque con una secadora que estaba en el baño.

Espero a que llegue Draak mientras veo Phineas y Ferb, no puedo creer que Phineas sea tan ciego para no notar el amor que le tiene Isabella.

Unos golpes en la puerta me sacan de mi debate y me tenso, Draak tiene llave, corro al baño y me encierro, pongo seguro, me meto en la bañera y cierro la cortina.

Me tapo la boca asustada, se escucha como golpean hasta tirar la puerta. Draak vuelve, por favor, te necesito.

Me arrinco a la pared, escucho voces pero no las reconozco, golpean la puerta del baño, un chillido se me escapa.

La puerta se sale de su lugar y golpea la pared, me pongo en posición fetal, quitan la cortina y grito.

Me sujetan, no veo quien es, tengo cerrados los ojos, forcejeo, pero una voz me calma totalmente.

— Sheccid, soy yo. — abro los ojos y observo esos ojos jade que no sabía que extrañaba tanto.

Sonrío y lo abrazo, dioses, que alivio.

— Vámonos, antes de que vuelva el chico. — dice Logan y León me jala, entonces me doy cuenta de tres cosas.

1. Los chicos están aquí.
2. Draak no ha vuelto.
3. Estoy en bata con ropa interior, semidesnuda básicamente.

— Alto, detenganse. — digo y me zafo del agarre de León.

Me miran como si tuviera tres cabezas y León suspira con fastidio.

— Sheccid no hay tiempo, tenemos que irnos. — frunzo el ceño, a la vez que Draak ingresa en la habitación con la preocupación en su rostro.

Los chicos se ponen en posición de ataque y Draak también, me interpongo entre ellos y evito que ataquen a Draak.

— Basta, no lo entienden, él no me está haciendo daño, me está ayudando. — aclaro y miro a Draak, sonrío en un intento de darle calma.— Tranquilo, no permitiré que hagan nada, estamos juntos en esto, recuerdas.

Él sonríe y asiente, regreso mi vista a ellos.

— Calma, Draak es mi amigo, así que no pueden lastimarlo, ¿entendido? — los miro con una amenaza tácita.

Logan desiste pero León aún desconfía, ante mi mirada termina desistiendo. Bien, ahora tendré que explicar un montón de cosas, que brete.

*Desde otro punto de vista*

Hago puños mis manos cuando veo a Sheccid sonreírle pero lo que me enloquece es que como la mira él, como si fuera lo mejor que vio en su vida.

Ella regresa su mirada a nosotros pero con una clara amenaza, si lo dañamos pagamos el precio.

— Calma, Draak es mi amigo, así que no pueden lastimarlo, ¿entendido? — su mirada aumenta de intensidad y Logan se rinde pero yo no.

Me mira a los ojos con firmeza, determinación y molestia, después de segundo cedo, pero aún así no bajaré la guardia.

Nos sentamos pero ahí es cuando noto algo, Sheccid esta en bata y Draak trae una bolsa.

— Sheccid, aquí tienes la ropa, espero te quede. — le entrega la bolsa y ella lo mira agradecida.

— Voy a vestirme, no quiero peleas, si escucho algo por el estilo, — no para de mirarme y ruedo los ojos.— y sí León, va más para ti que para los demás, si escucho algo por el estilo, desearán no haber nacido.

Dicho eso entra al baño y cierra la puerta, entonces enfoco mi mirada en Draak, vaya nombre, él siente mi mirada y voltea.

Nos observamos y una guerra de miradas inicia, ninguno cede, las ganas de arrancarle la maldita cabeza se abren paso en mí y cuando ya nos vamos a poner de pie, porque al parecer no soy el único con ganas de pelear, Sheccid abre la puerta sorprendiendonos.

— ¡Porque por una puta vez no pueden obedecer a lo que digo! — vocifera y ambos pegamos un salto para sentarnos inmediatamente.

Logan se ríe y Sheccid lo fulmina con la mirada, se calla inmediatamente y tengo que resistie reírme.

— Bien, ahora, ¿cómo me encontraron? —

Logan le explica todo con lujo de detalles y cuando llega a la parte donde menciona que siente algo por mí, Sheccid niega todo.

— Jamás dije eso, ¿yo? ¿sentir algo por el rubio petulante? ¿por ese arrogante? Estás loco, pasar tanto tiempo con León ya te averió los sesos. — abro la indignado con lo que dijo mientras que Draak estalla en carcajadas.

— Draak está de prueba, ¿Draak yo dije aquella aberración? — lo mira y él niega.

— Obviamente que no, los petulantes no son su tipo. — ahora ella estalla en risas. Hijo de su...

Logan me mira divertido, se acerca a mi oído y susurra.

— ¿Celoso? — la diversión tiñe su voz.

Bufo y ruedo los ojos, obviamente que no, ella es sólo mi amiga, si quiere salir con Draak, que lo haga, no interesa.

— ¿Qué les parece irnos antes de que Donker mande a buscar por ella y por mí? — el rostro de Sheccid deja de tener alguna alegría o diversión y es invadido por la fría seriedad que tiende a caracterizarla cuando no quiere que sepan que piensa.

Asentimos, seguramente los chicos ya están preocupados, Sheccid coge sus cosas y sale del cuarto, Logan y yo le seguimos, atrás se queda Draak.

Al llegar al auto, Sheccid se detiene y gira cambiando de rumbo.

— ¿A dónde vas? — digo y ella voltea verme luego regresa la mirada a un auto negro, un BMW.

— Voy con Draak, iremos detrás de ustedes. — dice para luego dirigirse al auto, veo salir a Draak y lo fulmino con la mirada, no entiendo porque ella quiere ir con él.

Esta bastante grande para saber cuidarse por su cuenta. Ruedo los ojos y bufo molesto, subo al auto y todos me dedican una mirada curiosa.

Los ignoro y enciendo el auto, pongo rumbo a Guanajuato e intento no pensar en el hecho de que Sheccid prefirió irse con él a conmigo.

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Curiosidad: ¿Qué piensan de esto? ¿Creen que Draak y Sheccid harían linda pareja? ¿O están con el rubio petulante? En cualquier caso, déjenme sus comentarios y no olviden votar si les va gustado la historia.

Adiós mis pequeños guerreros.