Era un hermoso día en la sabana africana, todo estaba tranquilo y en orden, los antílopes pastaban, las aves volaban y la manada de leones descansaba del calor del mediodía o al menos la mayoría lo hacía, excepto un pequeño cachorro de león de flequillo café. Desde el nacimiento de Kopa ya habían pasado unos tres meses aproximadamente y se encontraba ansioso por poder explorar y conocer las tierras de su padre, así que sin perder tiempo fue hasta donde se encontraba el león pelirrojo.
Simba y Nala se encontraban dentro de la cueva descansando, la noche anterior fue atareada, ya que tuvieron que solucionar algunas disputas entre los animales del reino, por lo que se encontraban cansados. Kopa llego hasta ellos y salto sobre la melena de su padre provocando que este se sorprendiera.
-¡Papá, papá! ¿Puedo salir a jugar?- pregunto emocionado el príncipe.
-está bien hijo, puedes ir. Pero no te tardes, porque tengo que mostrarte algo importante hoy.- contesto su padre.
-está bien papá ¡Gracias! Nos vemos luego.- se despidió el cachorro.
Kopa estaba emocionado, era la primera vez que saldría a recorrer Las Praderas por su cuenta y no sabía por donde empezar, quería ver tantos lugares. Mientras caminaba tranquilamente se topó con una silueta a la distancia que parecía ser de un cachorro de león, al pequeño esto le sorprendió, no sabía que había más cachorros de su edad por Las Tierras del Reino.
Se acercó con cautela hasta ella, mientras lo hacía pudo distinguir que se trataba de una cachorra que se encontraba de espaldas, sentada sobre una roca. Tenía un pelaje beige oscuro y un flequillo en su frente.
-¡Hola!- saludo alegremente el príncipe.-¿Quién eres? Nunca te vi por aquí.
La cachorra lo observo con desconfianza, ella podría hacerle la misma pregunta.- soy Vitani, ¿y tú?-
-me llamo Kopa, un gusto conocerte Vitani.-
-¿Kopa? No he oído ese nombre...-
-que extraño, la mayoría de aquí me conoce.- contesto el cachorro con ingenuidad.
Ella alzó una ceja en señal de confusión y bajo de la roca en donde se encontraba para estar a la misma altura que el cachorro.-¿y por qué te conocen?-
-oh, es que soy el hijo de Simba y Nala, los reyes de aquí.-
-debí de imaginarlo, tienes un parecido a ellos.-
Él rio por el comentario.- eres chistosa, ¿quieres jugar conmigo?-
Ella lo pensó por un momento, su hermano tardaría en llegar de quien sabe dónde fue y ya estaba cansada de esperarlo.- bien, juguemos.-
Ambos cachorros comienzan a jugar, al principio Vitani se notaba un poco retraída y es que no estaba acostumbrada a jugar con cachorros de su edad, pero poco a poco tomo confianza. Resulto ser que la leonsita era muy buena en las peleas.
Había pasado ya bastante rato y Kopa recordó que tenía que volver temprano a su hogar, así que despidiéndose de Vitani volvió hasta La Roca del Rey y fue hasta donde su padre.
-perdón por tardarme papá.- pronuncio un poco apenado.
-está bien hijo, no te preocupes. Ahora sígueme, tengo algo que mostrarte.- Simba comenzó a subir hasta la punta más alta de La Roca del Rey, donde se podía observar todo el reino, mientras su hijo lo seguía por detrás.
Ya arriba ambos se acercaron a mirar las amplias Praderas, Kopa se encontraba asombrado, nunca pudo ver tan ampliamente las tierras de su padre como ese día, todo era visible desde allí.
-mira hijo, todo lo que toca la luz es nuestro reino.- explicó el mayor como lo había hecho Mufasa con él.
-Wow... cuando sea rey, ¿todo eso será mío?-
-así es.-
-¿y ese lugar de sombras?-
Al escuchar esas palabras el rey no pudo evitar recordar los problemas en los que se había metido al ir hasta allá, no quería repetir la historia.-nunca debes ir a ellas Kopa, está más allá de nuestras tierras...- dijo con severidad, pero manteniendo la calma.
-está bien padre, nunca iré, lo prometo.- si algo caracterizaba al joven príncipe era la obediencia a las reglas de sus padres.
Simba sonrió, se sentía muy afortunado de tener un hijo como Kopa.- está bien, ahora volvamos, tu madre tiene una sorpresa para ti.-
-¿de verdad?-su padre asintió, el pequeño príncipe no tardo en salir disparado hasta donde se encontraba su madre.
-¡Mami...! Papá me dijo que tienes una sorpresa para mí.- Nala rio ante lo expuesto por su hijo. Simba apenas pudo llegar hasta donde se encontraban, Kopa lo había dejado atrás.
-si mi pequeño, y es que serás hermano mayor.-
-¿Cómo? ¿De verdad?- cuestiono él sin poder creerlo.
-así es.- contento su padre.
Kopa saltaba de felicidad, estaba emocionado por tener un hermanito con quien jugar.
Kopa esta muy contento por ser hermano mayor, pero su felicidad no durara muchos días, el terrible destino le espera ¿se salvara?
Bueno espero les allá gustado el capitulo adiós.
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El rey león: la historia de tres hermanos.
FanfictionEsta historia trata de los hijos de Simba y Nala: Kopa, Kiara y Kion, y sus aventuras. Kopa de cachorro tuvo un accidente con algo o mejor dicho con alguien y tiene que regresar a casa. Kiara había conocido a alguien muy especial, pero su padre no a...