Capitulo 15: Revelaciones

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-Gracias por venir, Sherwin-dijo Dana despidiéndose del pelirrojo con un abrazo.

-Adiós, señora, fue un gusto conocerla-dijo Sherwin correspondiendo su abrazo.

-Sólo dime Dana, estamos en confianza. Me alegra saber que Jonathan está en buenas manos.

-Adiós, Erick-dijo Sherwin despidiéndose del nombrado.

-Adiós, Sherwin-le contestó el contrario dándole un apretón de manos y abrazándolo-Cuidate mucho desde ahora. Tal vez las cosas se vuelvan algo difíciles...-le susurró el mayordomo en su oído dejando a Sherwin algo confundido.

-Acompañaré a Sherwin al paradero-dijo Jonathan.

-Ok, vayan con cuidado-dijo la mayor.

-Bien, adiós, mamá-se despidió Jonathan llevándose al pelirrojo.

Cuando estuvieron solos, la señora no pudo evitar soltar un largo suspiro.

-¿Pasa algo?-preguntó Erick.

-Erick, tengo miedo. Sé que mi esposo no acepta a ese niño, y me preocupa que haga algo que dañe a mi hijo. Si él es feliz por mí todo está bien...por eso no me importa si su pareja es un chico, además se ve que su amor es recíproco... Pero, Matias no es igual, sé que no se quedará con los brazos cruzados, y no sé que podría pasar...

-Dana, es tu hijo de quien hablamos...no tienes porque preocuparte, él es fuerte. Además se ve que Sherwin también lo es, ambos sabrán sobrellevar lo que sea. Jonathan ama mucho a Sherwin como para dejarlo por cualquier obstáculo, y más cuando su amor es la solución. Todo estará bien...-dijo Erick calmándola.

-Me alegro poder contar con tu ayuda-dijo la mayor-A veces me arrepiento de haber aceptado ese compromiso arreglado...Me hubiera gustado ser feliz...a tu lado-dijo Dana abrazando a su primer y único amor.

-Eso ya quedó en el pasado-dijo Erick-Hay que concentrarnos en el presente-sin poder evitarlo abrazó a Dana, aún la amaba. Pero el destino los había unido muy tarde.

Erick sólo buscaba un trabajo como mayordomo, pero el tipo que lo contrató resulto ser el esposo de su amada. Pero, Dana no le era infiel a Matias por si eso piensan. No, ella era respetable.

Y sin embargo, a veces se miraban y recordaban el pasado, recordaban su amor, recordaban que nunca se olvidaron, recordaban que fueron separados injustamente...Pero, eso es el pasado...

***

-Oye, Sherwin, ¿que te dijo mi padre realmente?-preguntó Jonathan.

-Sólo me dio la típica charla-dijo Sherwin sonriendo falsamente.

-Mi amor-el moreno se posicionó frente a Sherwin-Se que estás mintiendo, conozco a mi padre. Y sé que no es la clase de tipo que deja sus convicciones de la noche a la mañana.

-Pues la verdad, es que tu padre...-empezó Sherwin.

-Él es un maldito hijo de.....-de pronto apareció Roy y empezó a decir unas palabrotas que Sherwin le tapó los oídos a Jonathan. Demoró unos minutos pero soltó todo lo que pensaba sobre Matias-Listo, eso es todo lo que quería decir de ese...

-Roy, calmate-dijo Sherwin quitando sus manos de los oídos de Jonathan.

-Ok, ok-dijo Roy.

-Bien, al parecer lo odian-dijo Jonathan-Aunque no me sorprende, él puede ser algo...molesto.

-Jonathan, no te preocupes-dijo Sherwin-Esta bien.

-No, no lo está. Voy a intentar hacer que te acepte, aunque eso me cueste mucho tiempo.

-No creo que me acepte.

-Sherwin, quién no podría amarte. Eres el mejor-dijo Jonathan besándolo dulcemente-Y quiero que eso le quede en claro, y quiero que todos sepan que quiero estar a tu lado.

-Para mí, tú eres el mejor, amor-dijo Sherwin besándolo de nuevo algo sonrojado.

-Creo que ese es tu bus, ¿no?-dijo Jonathan al ver como el bus con destino a la casa de Sherwin se acercaba.

-Oh, sí. Me voy-dijo Sherwin parando el bus, pero antes corrió de nuevo a donde su amado y lo abrazó-Te amo...-susurró, pues no quería que hubiera ninguna duda ni en Jonathan ni dentro de él.

-Yo también-dijo Jonathan besándolo en la mejilla.

-Ganas de tener una cámara en momentos así-dijo Roy.

-Oigan, soy fujoshi, pero no puedo esperar mucho, así que dejen sus homosexualidades y  sube chico-dijo la conductora viéndolos feliz pero con prisa.

Ambos se sonrojaron y Sherwin subió al bus. Jonathan se fue directo a su casa pensando en como hacer que su padre acepte a su amado.

***

Una nueva semana, lunes para ser precisos. El pelirrojo se había levantado de buen humor, quería ver pronto a su amado.

-Ya quiero ver a Jonathan-dijo Roy.

-Tu cuando no quieres ver a Jonathan-dijo Sherwin.

-Pero no soy el único-se burló Roy.

-No te preocupes, ya estoy listo-Sherwin se encaminó a la salida de su casa-Adios, mamá, adiós Sara-se despidio Sherwin de las dos mujeres de su casa.

-Adiós Sherwin. Cuidate-dijo su madre.

-Adiós, hermano-se despidió Sara.

Sherwin caminó y llegó a su escuela. Pero al llegar todos lo miraban mal mientras observaban un periódico. Mientras decían cosas que hicieron sentir mal y confundido al pelirrojo.

"Qué puta"
"Sabía que nunca tomó en serio a Jonathan"
"Es un maldito"
"Te dije que los homosexuales no son de confianza"
"Zorra homosexual"

Sherwin no entendía nada, sólo hasta que vio a Beth acercarse a él con un periódico. La rubia tenía una mirada de tristeza y decepción.

-Beth, ¿que pasa? ¿Por qué todos me miran mal?-preguntó Sherwin.

-¿No lo sabes?-dijo la rubia triste entregándole aquel periódico que dejó helado al pelirrojo.

En primera plana estaba la foto de Esteban y Sherwin besándose y otras fotos de ellos dos juntos. El título era "Infidelidad" , pues aunque era corto reflejaba todo eso.

-Beth, yo no...-empezó a decir Sherwin nervioso.

-Sherwin, ¿qué pasó? ¿Por qué Esteban y tú se están besando? ¿Acaso no amabas a Jonathan?-preguntaba la rubia.

Jonathan. ¿Cómo se encontraría él, tal vez aún pueda explicarle...

-¿Dónde está Jonathan?-preguntó el pelirrojo mirando a su alrededor.

-Él...está muy enojado, no quiere verte, además es lo menos recomendable ahora-dijo Beth-deja que se calme. Pero, ahora yo quiero una explicación. Dime, ¿qué pasó?

Y así ambos se dirigieron a su salón, pero las miradas seguían concentradas en el pelirrojo, el cual sólo esperaba que Jonathan quisiera escucharlo.

***

Esteban se encontraba en uno de los pasillos en donde no había presencia de estudiantes, pues se cansó de sus miradas fulminantes. Estaba en posición fetal apoyado en una pared.

Vio el periódico que tenía en sus manos y la culpabilidad lo invadió. Sherwin era el único inocente en esto y de seguro ahora todos lo estarán juzgando. Su amado tendría problemas, eso lo entristecía.

De pronto aquel periódico se le cayó de las manos y quedó tirado en el suelo, por unos minutos vio la portada de nuevo, en la cual sus labios se juntaban con los del pelirrojo.

Estiró su brazo para alcanzar el periódico pero alguien lo hizo antes que él.

-¿Esto es tuyo?-preguntó el que estaba frente a él.

Levantó su mirada y se encontró con unos ojos azules que lo veían con ira. Se congeló al ver al novio de su amado con unas notables ganas de matarlo en su mirada. Era Jonathan.

In a heartbeat: Una historia de amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora