Bianca sonrió mientras se echaba aire con una mano, JunMyeon volvió a tomar su mano y tiró de ella hacia la pista de baile. Bianca no midió sus movimientos tontos y terminó derramando un poco del vaso con mojito que tenía sobre el atuendo del más alto que no hizo más que reírse mostrando todos los dientes.
Bianca veía un sinfín de luces con efectos despampanantes que la hacían retroceder y saltar, para ser navidad había muchísima gente y ella estaba bastante contenta por no tener que pasar una fecha tan terrible sola, JunMyeon tomó su mano atrayendo su atención y esta se acercó luego de beber un poco del contenido del vaso.
¿Te gusta esta canción?-dijo este cerca de su oído.
Bianca asintió sintiendo como el alcohol y la buena música que retumbaba en sus oídos hacían que esta moviese las caderas de manera graciosa, el más alto se unió a ella y luego de beber el contenido de su vaso la obligó a beberse el suyo. Esta no recordaba cuando había empezado a sentirse de esa manera, solo podía recordar que este había hecho un chiste y Bianca había reído muy alto atrayendo la vista de todos los del bar.
Ahora se encontraba junto con este bailando una canción que la traía loca, Firestone, cerró los ojos y esta vez alzó los brazos dejando envolverse por la melodía hasta que este se había pegado a ella, su nariz rozaba el cuello de Bianca y fue como un flash lo que vino a su cabeza.
Oyó la respiración agitada de la persona que más deseó olvidar en ese momento y trató de obviarlo pero le fue tan intenso aquello que ya tenía la piel de gallina, Bianca incluso sintió que las manos que ahora le tocaban las caderas no eran las de su acompañante si no las de su ex novio, movió la cabeza de derecha a izquierda suavemente hasta que aquel movimiento la hizo acreedora de algo que no recibía hace mucho.
JunMyeon atrapó sus mejillas con una mano y se acercó a esta para besarla, Bianca no supo cómo reaccionar ante aquello por lo que solo le siguió el juego entreabriendo los labios y sintiendo como le presionaba este con la otra mano la cadera, Bianca se separó por un poco de aire, sin embargo, quiso continuar y le besó las comisuras dulce lentamente haciendo que volviese a caer en el juego.