Bianca se arrastró ese fin de semana por toda la casa consumiendo tazas de café mientras miraba en Netflix una serie que se había hecho popular, miró por un segundo los muebles, la oscuridad de la casa y se dio cuenta que la idea de mudarse con él no estaba nada mal.
Tenía agua caliente cuando quería, comía lo que quería, bebía cuando quería y dormía a la hora que se le pegara la gana, Bianca asintió con un gesto de satisfacción en la cara y giró la vista hacia la pantalla gigante que tenía frente a ella hasta que le dio play.
Fue cuestión de segundos cuando oyó el teléfono y de un salto salió del sofá, dejó la taza de café sobre la mesa de centro para luego buscar el aparatoso que estaba en una esquina, lo tomó entre sus manos y contestó carraspeando un tanto preocupada por la identidad de la persona del otro lado.
¿Sí?-contestó nerviosa.
¡Bianca!-oyó la voz enérgica de JunMyeon del otro lado y los nervios se le fueron, Bianca miró hacia el televisor un tanto disgustada como si él estuviese ahí- ¿Qué haces despierta tan temprano?
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Bianca miró el reloj de la pared notando que eran casi las seis de la mañana, luego miró la mesa que estaba frente a ella. Casi se había parado y regresado al sofá unas seis veces por café, asustada miró el teléfono oyendo la risa de JunMyeon y luego miró las esquinas de la casa imaginando que la espiaba, no se le hacía raro incluso que hubiese insertado un micrófono para oír lo que decía.
¿Cómo has pasado estos días sin mí? ¿Ya me tienes una respuesta?-Bianca horrorizada miró el teléfono, en cuestión de segundos recordó lo que había pasado noches anterior y un pequeño matiz rojo se posicionó sobre sus mejillas. No sabía que contestar por lo que solo suspiró haciendo reír nuevamente el muchacho del otro lado-Esta semana te visitare, he tenido demasiado trabajo y si sigo así me volveré loco.
Bianca solo lo oyó atenta y asintió como si él estuviese ahí.
Nos vemos pronto-oyó su voz y luego colgó.
Bianca se sentó sobre el sofá oyendo en su mente la conversación que había tenido ese día con JunMyeon mientras estaban sobre las sábanas y como un grito vino a ella aquella frase que había culminado con todo esa mañana.
"No cometas el error de enamorarte"
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
