HATE TO LIVE. (Terminada)

capitulo 22. El sueño de Jane.

-tu papa viene esta en casa, viene subiendo las escaleras!.-dijo jane mirando a Hugo.

El de inmediato se paró del suelo y se sentó en mi escritorio tomando un libro, yo también me levante y me senté en mi cama.

-hola Jane.-dijo mi papa al encontrar a Jane en el pasillo.

-hola señor.-escuche a Jane contestar.

-Ros podrías…oh! ¿Quién es tu amigo?.-dijo mi padre al entrar a mi habitación.

-es Hugo papa, el…él es…mi compañero de clase.-le dije, no fui capaz de confesarle que era mi novio.

-ah ya veo.-dijo mi padre con sospechas.

-hola señor.-dijo Hugo saludando.-mi nombre es Hugo Leclercq, mucho gusto.-se presentó.

-¿leclercq? Acaso es…

-francés, si mi apellido es francés, de echo yo también lo soy.-dijo Hugo sonriendo.

-¿en serio? Wow justamente en mi empresa estoy investigando sobre la cultura francesa, hay unos clientes de parís y vendrán a visitarnos muy pronto, estoy investigando sus costumbres, tradiciones, su idioma…soy bastante malo hablando francés….

-je pourrais aider.-dijo Hugo, nadie entendió.

-¿Qué?

-yo podría ayudarle.-dijo Hugo sonriendo.

Mi padre soltó una carcajada.

-ves te digo que no sé nada de francés.-dijo. Todos reímos.-¿enserio podrías ayudarme? Soy bastante malo.

-si, claro señor, hay quien dice que soy un excelente tutor.-dijo Hugo volteándome a mirar regalándome una sonrisa.

Mi padre noto las miradas.

-¿acaso estas cortejando a mi hija?.-dijo mi padre serio.

Hugo borro la sonrisa de su rostro, yo hice los mismo.

Papa soltó una carcajada.

-estoy jugando, es claro que eres el tutor de mi hija, porque la verdad no creo que ella sea tu tutora ¿o sí?.-dijo mi padre.

-si.-dijo Hugo aliviado.-yo le enseño matemáticas, es bastante buena, aunque no lo crea.

-qué bueno.-dijo mi padre con una sonrisa de oreja a oreja.-me agradas Lecres

-es Leclercq.-dijo Hugo.

Mi padre soltó otra carcajada.

-te digo que no tengo idea de francés.-dijo y se fue riendo.

Hugo y yo nos quedamos en la habitación, el silencio reinaba en el lugar. Era incomodo, asi que hable:

-eso estuvo cerca.-dije riendo.

-si.-dijo fingiendo un sonrisa.

-le agradaste a papa.-dije

-si, lo note.-dijo con algo de sarcasmo.

-¿Qué tienes?.-dije son rodeos, sabía que estaba enojado, lucia enojado, pero no sabía porque.

-¿compañero de clase? ¿eso es lo que soy para ti?.-dijo molesto.

-Hugo!!! Porfavor, no te vas a enojar por eso.

-bueno, entonces ¿Por qué no le dijiste a tu padre que somos novios?-me reclamo.

-porque no sabía que diría.-me excuse.- el no te conoce. No como conoce a Marcus o a Porter, ellos se han ganado su confianza pero lo hicieron con esfuerzo.

-¿así que si tú y Porter fueran novios tu papa no te pondría problema?.-dijo Hugo

-probablemente no,  a el le agrada mucho Porter, pero eso no pasara, el no me gusta y yo a el.

-y ¿ti que sabes si el gusta de ti o no?.

-Hugo por favor! Eso es como decir que Marcus gusta de mi.-le dije.

-¿y eso que? ¿estas segura de que el no siente nada por ti?.-dijo Hugo.

-Hugo!!! Mejor cállate, no sabes lo que dices.-dije enojada.

-¿Por qué no? ¿Nunca pensaste que Marcus y tu puedan tener algo? ¿o Porter?.

-ellos son mis hermanos Hugo!!!.-le grite.

Hugo se quedó pasmado, no creía lo que le estaba diciendo.

-¿Cómo que son tus hermanos? pensé que tu única hermana era Jane.-dijo ya calmado.

-no, ellos no son mis hermanos como… como lo es Jane.-dije.-no compartimos sangre, pero dime ¿acaso eso impide que seamos familia?, padre es el que cría no el que engendra. Igualmente pasa con los hermanos, hermanos son con los que creces, son los que te protegen y te cuidan, yo me crie con ellos desde que tengo uso de razón, desde que mi madre se fue, mi única figura materna fue Gigi, ella junto con la madre de Porter nos crio, crecimos juntos. Y me duele que pienses que soy capaz de meterme con ellos. Me duele que no confíes en mí.

Mis ojos se aguaron al decir esto, pero contuve las ganas de llorar. Hugo se quedó callado un largo rato.se acerco a mi y me miro muy arrepentido, me tomo fuerte y me abrazo.

-lo siento.-dijo.-no volveré a desconfiar de ti, lo prometo.-me susurro al oído.

Contuve un poco más las lágrimas, pero luego fue inevitable que salieran. Intente contenerlas pero no me fue posible.

-no llores, no me gusta verte así.-dijo.-soy un idiota, te juro que nunca volveré a ser la causa por la que llores, nunca.

Hugo limpio suavemente las lágrimas de mis mejillas, luego las empezó a besar. Literalmente Hugo limpio mis lágrimas con sus besos, y sin pensarlo poco a poco con ellos mismos empezó a curar las heridas de mi corazón.

*

-asi que eres hermana de Ros Tilly.-dijo Kate tratando de molestarme como siempre.

-eso no es de tu incumbencia.-dije sin ser grosera con ella.

-¿Qué te pasa?.-dijo tomándome fuerte del brazo.-¿acaso no piensas contestarme?

-suéltame, me lastimas.-le suplique.

Kate me soltó empujándome, caí al suelo en medio de todo el pasillo. Todos se burlaron de mi.

-hay es donde deben estar las zorras como tu.-me insulto.

Mis ojos se llenaron de lágrimas.

-¿ahora vas a llorar?, awww la nenita va a llorar.-dijo y todo la gente del pasillo empezó a decirlo en coro.

-CALLENSE TODOS!!!.-grito alguien, callando todas las burlas.

Kate y yo volteamos a mirar al mismo tiempo. Era Hugo, se veía furioso.

-¿Qué es lo que les pasa a todos?.-dijo mirando a los chicos que empezaron con la burla.- ¿acaso se creen muy hombre al burlarse de una mujer?.- dijo, luego volteo a ver a Kate. La fulmino con la mirada.

-ella empezó…-dijo Kate tratando de excusarse.

-eso no es cierto.-le dije.

-deja de mentir, tu solo eres una tonta, eres una bastarda, el señor Tilly es un idiota al aceptarte en su casa como si fueras su hija, de seguro te recogió de un basurero.

Sus palabras me hirieron demasiado, no pude evitar romper el llanto, me tape la cara, no quería que nadie me viese llorar de tal modo. Hugo me abrazo intentando consolante. Entonces escuche abucheos y una que otra risa. Luego todo quedo en clama. Me quite las manos de la cara y pude ver a Kate tapándose la cara tirada en el suelo.

-eso es lo que te mereces…-dijo Ros sobando su puño.

-Ros, no tenías que golpearla.-dijo Hugo.

-ella se metió con mi familia, eso es suficiente razón para partirle la cara….-dijo Ros. Mi corazón se alegró enormemente ¿acaso mis suplicas habían sido escuchadas? ¿Acaso al fin Ros me iba aceptar en su familia? Eso era lo que más quería en todo el mundo, ¿acaso mi sueño se había vuelto realidad?