HATE TO LIVE. (Terminada)

capitulo 6. Recordando viejos tiempos.

Salimos de la preparatoria y nos montamos en mi auto, le dije a Marcus sobre lo que quedarme en su casa por unos días y el acepto encantado, siempre que me quedaba en su casa, junto con los otros chicos, armábamos un desmadre, hacíamos fiestas, comíamos hasta mas no poder, veíamos películas de terror y nos hacíamos bromas mientras dormíamos.

-hay que llamar a todo el mundo.-dije apenas llegamos a la casa de Marcus.

PARTY TIME ACTIVATED.

Fuimos a comprar todo para la fiesta, compramos sodas, frituras, cerveza, luces de neón y un montón de cosas más, llegamos a casa y mientras Marcus alistaba todo y guarda en su habitación todas la cosas de valor de la casa, yo instalaba la luces, el humo, y el equipo de sonido junto con mi mezcladora pionner, que escondía en casa de Marcus para que mi padre no la viera y la cual siempre sacábamos cuando había fiesta. Terminamos de organizar todo, los primeros en llegar fueron nuestros amigos: Antón, el rompecorazones, Joel, el maestro del desmadre, Porter, el encantador, Sonny, chiquito pero peligroso, y Dillon, el alma de las fiestas.

Apenas llegaron se formó el desmadre, al poco tiempo empezó a llegar gente por montones, la casa se llenó tanto que muchas personas salieron a el patio trasero, la música sonaba por todas partes, yo junto con Sonny, empezamos a prender la fiesta con Dubstep. Sonny al principio, cuando apenas lo empiezas a conocer parece algo tímido, pero apenas escucha la palabra “dubstep” o “fiesta”, se vuelve loco, y junto conmigo siempre hacemos tremendo desorden, nos tiramos a la gente, nos montamos en las mesas, bailamos como locos y simplemente disfrutamos lo máximo posible. Ya iban 2 horas desde que la fiesta empezó, deje a Sonny mezclando junto con Porter, y me fui a buscar a Marcus y los otros chicos, mire a Joel y estaba bailando como un loco y haciendo caras muy raras, definitivamente estaba jodido de la cabeza, pero aun así lo quería, voltee y vi a Antón, como siempre, estaba con unas chicas coqueteando y como siempre, todas las chicas embobadas con él, un fuerte grito me hizo meter un salto, era de Dillon quien gritaba “¡que comience el desmadre!”, estaba en la sala mirando directamente a la piscina que estaba en el patio trasero, al decir esto, corrió hasta afuera y se tiro de bomba a la piscina, muchos miraron sorprendidos, Dillon aún no salía del agua, entonces de repente salió y grito “!woo¡ ¡esta fría¡ ¿pero que están esperando?, me siento solo aquí adentro”, todos empezaron a gritar y a tirarse al agua junto con él, yo solo me carcajeaba aun en la sala, entonces alguien tomo mi mano, era Antón, quien había dejado a las chicas aun lado, para agarrarme del brazo y arrastrarme para tirarnos juntos a la piscina.

-jajaj, ¿te mojaste?.-dijo Antón riendo.

-no solo que un tonto me tiro a la piscina.-dije echándola agua en la cara.

El hizo lo mismo y comenzamos una lucha de agua, luego de detenernos soltamos una carcajada y salimos de la piscina.

-mira como me dejaste, estoy empapada.-dije al salir del agua.

-yo también estoy igual tonta.-dijo el sacudiendo su pelo.

-vamos arriba, tengo que cambiarme, está haciendo mucho frio, no quiero atrapar un resfriado.-le dije.

Antón asintió con la cabeza y ambos subimos al el segundo piso.

Entramos a la habitación en la que siempre que quedaba, encima de la cama estaba mi maleta aun sin desempacar, la abrí y empecé a buscar ropa.

-hey, ¿crees que esto me quedaría bien?-dijo Antón agarrando un short de mi maleta y poniéndoselo por encima de la ropa.

-jajaja, se te va a ver chico el trasero.-dije riendo.

 Tome  un short, una camiseta sin mangas y mis zapatos Nike, para cambiarme, Antón salió de la habitación y fue a el cuarto de Marcus, tomo un jean y una camiseta a cuadros que había dejado allí la última vez que se quedó. Mientras estaba afuera de la habitación, comencé a desvestirme y secarme en cuerpo, me quede únicamente en ropa interior, luego de secarme bien, me puse el short y los zapatos, empecé a buscar mi camisa, pero no la encontraba por ningún lado, ¿en dónde la había dejado?, la busque por todas partes sin éxito.

-hey Ros, que te parece si baja….¡oh!-dijo Antón al entrar a la habitación.

Lo mire y a los 5 segundos me percaté de que estaba en sostén, de inmediato intente cubrirme, pero no tenía nada a la mano, mire a un lado y al otro desesperada pero no encontré nada. Antón empezó a reír.

-jaja¿ no encuentras con que cubrirte?.-dijo burlón.

-sabes que, no se para que me molesto, ya me has visto así.-le dije.

-¿así? He visto mucho más que eso.-dije acercándose a mí.

Antón y yo, por un tiempo tuvimos una relación desinteresada, así es, desinteresada, porque estábamos juntos pero sin compromisos ni nada de eso, al principio funciono, pero luego empezamos a sentir cosas el uno por el otro, en especial de Antón hacia mí, él es un rompecorazones profesional, un mujeriego, y enamorarse no está en su lenguaje, tuvo miedo de estar enamorado de mí y por eso se acabó la relación.

-sabes, me gustaría recordar viejos tiempos.-dijo ya enfrente de mí.

-pero que mala memoria tienes.-dije sonriendo.

-sí, es pésima, ¿me ayudarías a recordar?.-dijo acercándose a mis labios.

Voltee mi rostro, no estaba segura si quería besarlo, un impulso en mi quería hacerlo, se veía tan guapo, con sus ojos verdes, su cabello perfecto y su barba que tanto me encantaba, pero algo en mi sentido común decía que no lo hiciera, pero, ¿Qué rayos? Jamás le hacía caso a mi sentido común, ¿Por qué hacerlo ahora?. Antón tomo mi mentón son su mano y delicadamente lo puso en dirección a sus labios, se acercó lentamente,  el impulso en mi hizo que me abalanzara hacia él, tenía infinitas ganas de besarlo intensamente

El me tiro a la cama y yo metí mi mano por debajo de su camisa, el hizo lo mismo, empezó a besar mi mejilla con dulzura y luego mi cuello, me causo cosquillas y comencé a reír.

-siempre lo arruinas tonta.-dijo riendo.

-jajaja, sabes que soy muy sensible en el cuello.-dije

-¡ah¡ es cierto, lo había olvidado.-dijo y empezó a besar mi cuellos provocándome mas cosquillas.

Empezamos a luchar, él estaba sobre mí, pero lo empuje tirándolo a un lado de la cama, luego me puse sobre él y empecé a hacerle cosquillas, el para detenerme, me tomo de la cintura y me sostuvo para que no pudiese moverme.

-jajaja, suéltame ya.-dije zafándome de sus brazos y sentándome encima de el.

-contigo las cosas nunca son serias.-dijo mirándome.

-ya sabes como soy.-le dije guiñando el ojo.

 Él se incorporó y se acercó  a mí para besarme, me tomo de la cintura y la acaricio con suavidad.

-hey, seguimos siendo solo amigos ¿no es así?.-le pregunte.

-¿Qué acaso alguna vez hemos sido algo más?.-dijo sonriendo y volviéndome a besar.