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15. ↓Deѕvαɴecιdo↓

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Pov Jungkook

No sé en qué momento se había hecho de madrugada y yo seguía plantado en el mismo lugar desde que vi a Jimin desaparecer, sentí que era definitivo, y debo sentirme bien por ello, debería.

Dejé de pensar en el, total ya es punto y aparte en mi vida. Me levanté de donde estuve un buen rato tirado, tenía el cuerpo entumido y frío. Me acerqué a la fiesta para buscar a Hoseok, pasaría al menos un rato con él, ya después le pediría que nos fuéramos. A decir verdad ya me sentía cansado, apático y aburrido.

Al llegar y observar a todos riendo y viviendo la vida de cualquier estúpido joven me pregunte ¿Por qué simplemente no me puedo integrar con facilidad a ellos? ¿Hay algo mal en mi? De no ser por mis amigos en la facultad me sentiría completamente solo, lo estaría. Siempre había sido amable con todos... Pero no sé por qué me resulta ahora tan difícil pasar tiempo con más personas, es como si quisiera hacerlo pero a la vez me importa un carajo. Pero estoy creciendo y no me puedo quedar dependiendo de mis amigos para siempre ¿No? Las cosas ya no eran como cuando tenía de 14 a 16 y tenía amigos falsos y tóxicos, la vida me ha recompensado con Hoseok, Jin y Tae, pero a veces me siento una carga.

Me acerqué hasta donde estaba un grupo de chicos demasiado borrachos, ya no me observaban de la forma en la que hacían cuando llegué, es como si me hubiera quitado por fin de la frente la palabra "Jimin".

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Pasé esquivando a varias personas que estaban tiradas en el piso afuera de la casa. Cuando abrí la puerta los ojos me ardieron, el humo de la marihuana era asfixiante. La música de la fiesta había cambiado de género a Rock, ahora podía escuchar a Blessthefall resonar en la casa con "Meet me at the gates". No me iría ahora, cerré los ojos y me dejé llevar por el momento, tal vez el hecho de estar inhalando el humo de la hierba había conseguido calmarme y nublar mi mente de a poco.

Cuando abrí los ojos me encontraba dejándome llevar por la música, había una chica bailando muy pegada a mi cuerpo, no pude reconocer quien era, pero sus ojos me llamaban y me incitaban, estaban llenos de cosas que no podía describir y comprender. Me miró fijamente, ella era demasiado inquietante, casi daba escalofríos a pesar de ser demasiado hermosa, joder ¿Qué digo? La chica era ardiente. Se acercó más a mi, y de pronto me volví a sentir parte de algo. De un grupo. La presencia de la chica me gritaba lo tóxica que sería, pero yo quería eso al menos hoy.

Pude notar que puso una píldora en su lengua de forma provocativa y sonrió. Estaba embobado, ella me tomó del cuello y me acercó a su rostro, estaba encendiendo todo mi cuerpo y la razón me gritaba "peligro" pero yo no quería huir. Quería llegar lejos con la chica desconocida.

Sé que no saldría herido de una forma profunda, pues ni si quiera estaba enamorado o algo por el estilo, así que ¿Qué importa ya?

Unió sus labios con los míos y tiró con sus dientes de mi labio inferior para permitirle el paso a su lengua. Le correspondí y sentí como pasaba la pequeña píldora a mi boca con movimientos lentos provocados por el choque de nuestras lenguas. Tragué la pastilla. Todo comenzó a sentirse distinto, me sentía ligero, comenzaba a ver doble y a sentirme eufórico, todos los sonidos se intensificaron a mi al rededor, en especial el de la música, era como si ya no hubieran más personas cerca y solo estaba la chica que me observaba con expresión divertida. Joder, de la nada comencé a sentirme demasiado excitado y ella lo notó y llevó una mano a mi entrepierna, mi respiración comenzaba a tornarse pesada.

En algún momento ella me tomó de la mano y salimos de la casa, todos en la fiesta me observaban curiosos, ahora no lograba reconocer a nadie, sabían obviamente que era lo que estaba a punto de ocurrir. Nos dirigimos a la puerta de la entrada y al llegar a esta choqué con un chico de cabello naranja más bajo que yo, si que era atractivo, pero tal vez no soy su tipo, porque cuando me vio de la mano de la chica su expresión fue rara. En fin.