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46. Eυғorια

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Pov tercera persona

-Volviste.- Habló por encima de la música alternativa y tomó asiento frente al chico.

-¿Volví?- Preguntó fingiendo sorpresa.

-No quieras hacerle al tonto Taehyung.

-No le hago al tonto Yoongi. Simplemente quiero dejar en claro que no es el mismo Taehyung el que volvió, al menos no para ti.- ¿Era necesario mencionarlo? no tan necesario como haber tenido que matar todo lo que sentía por ese chico.

-¿Qué quieres decir?- Vaciló el peliazul por unos momentos, pero al ver que Taehyung se mantenía serio cambió su semblante.

-Que no corté cualquier comunicación con ustedes durante dos largos años por nada. No hice todo esto en vano.- El peliazul lo observó aún confundido.- Ya no estoy enamorado de ti.

Lo logré, creo que así lo he hecho, y prefiero seguir por el camino de la eterna mentira a aceptar que no es así y continuar sufriendo por ser tan idiota, pensó Taehyung.

-Ohh...- ¿Debería sentir alivio? Si, definitivamente Yoongi debería sentirlo, porque esto quería decir que su relación con Hoseok ya no estaba en peligro, pues su novio probablemente sería capaz de dejarlo si se enterara que su mejor amigo estaba enamorado de Yoongi y que muy probablemente el amor que Taehyung sintió por el peliazul fue más fuerte y que a causa de esto sufrió durante un tiempo prolongado.

-Creo que antes debí haber aceptado que tu no eras para mí, que injusto, Hoseok ni si quiera se tuvo que esforzar por hacer que lo notaras ¿y qué puedo hacer yo? la historia para los que no recibimos amor correspondido siempre es la misma. Nos alimentamos de estúpidas ilusiones, cualquier pequeña señal falsa de que todo funcionará parece extraordinaria, cualquier estúpida señal que nos haga creer que estuvimos en su mente al menos unos segundos puede cambiar nuestro día en instantes dándonos un día más de esperanza, hasta acumular esa esperanza y hacer de esos días meses, o años.- Bajó la mirada.- Engrandecemos los pequeños gestos de la persona que nos hace volar la cabeza, pero al final, todo eso no significa nada para ellos, y siempre es la misma historia, siempre escogen a la persona que nunca los observó primero, es una cadena y un círculo vicioso.

Debería sentirse aliviado porque todos se mantenían al margen haciendo lo correcto, pero con Taehyung al rededor, Yoongi llegaba a sentir que su relación con Hoseok comenzaba a tener fecha de caducidad. Debería sentirse aliviado, pero no podía después de que pasó los últimos dos años pensando más en la partida de Taehyung que en su relación con Hoseok.

Si, ésta aparente "nueva situación" era preocupante para Min Yoongi, el chico de sentimientos inconfundibles y fieles hacia Hoseok.

Yoongi no quería descifrar de qué iban sus sentimientos, pues tenía miedo de lo que descubriría, sabía que Hoseok era para él, que hacían la pareja perfecta y se complementaban a la perfección, eran el noviazgo ideal para todo aquel quién los viera, todo era tan correcto, sin complicaciones y con mucho amor correspondido... Era tan normal que a Yoongi le aterraba la idea de que aquel noviazgo de casi tres años comenzara a aburrirlos a ambos.

Pero Taehyung, no era complementario, no tendrían mucho de qué hablar si se les dejara solos, no lograrían generar una larga conversación aunque tuvieran gustos iguales, eso sí, de alguna manera Taehyung tenía mil y un formas de ser, lo preocupante del asunto era que todas y cada una de ellas llamaban la atención de Yoongi, lo intrigaba, no lo atraían en definitiva, pero le causaba más curiosidad de lo que podría esperar.

Sabía que nunca dejaría a Hoseok por el chico de cabello caramelo y mechones verdes, lo cual era muy triste para Taehyung, pero aun así, existía algo, algo completamente invisible e imperturbable al paso del tiempo, algo que últimamente hacía que Yoongi dirigiera su atención hacia aquellos ojos profundos clavados en su memoria, hacia aquella personalidad tonta para él, pero a la vez interesante, por las mil y un facetas con las que Taehyung adornaba su personalidad.