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43. Eғίмero

(Escuchar audio hasta que se indique. Canción "Void" de The Neighbourhood)

Pov. Tercera persona

Ten se encontraba desayunando en la cafetería del instituto junto a sus amigos, revolvía con los cubiertos su almuerzo a la vez que observaba con atención a Jungkook mientras este hablaba, notaba algo completamente distinto en el, para empezar, estaba hablando y no estaba volteando a ver en dirección a Jimin como si su vida dependiera de ello, Jungkook ahora reprimía sonrisas y había un brillo de esperanza en su mirada, definitivamente algo había cambiado en el, la razón la desconocía, pero sabía que en cuanto Jungkook se sintiera preparado para hablar, lo haría, el no quería ser la clase de amigo hostigoso que de una u otra forma busca sacarle la verdad a las personas, Ten prefería que ellos hablarán libremente cuando sintieran la necesidad de hacerlo.

Pero por lo menos al fin podía decir que sentía algo de alivio respecto al comportamiento del pelinegro. Levantó la mirada en busca de alguien en específico y sonrió cuando lo vió hablando con Jimin, seguramente era respecto a alguna tarea, se puso de pie y sin avisar fue corriendo hasta su novio para sorprenderlo abrazándolo por la espalda, porque sí, Ten y Taeyong ya llevaban más de un año siendo novios, y podían presumir de que eran la relación más estable y bonita del instituto, porque realmente lo eran, como todas las relaciones, llegaron a tener altibajos, pero ambos supieron solucionar sus problemas, pues sabían que su novio era más importante que cualquier pelea de secundaria, ambos tenían personalidades distintas y con éxito lograron complementarse hasta crear una burbuja de armonía entre ellos, la extravagante personalidad de Ten le daba seguridad a Taeyong, así como la tranquila y racional personalidad de Taeyong le daba estabilidad a Ten. Y lo que era aún mejor, sabían administrar bien su tiempo para verse sin dejar a sus amigos de lado, ellos hacían las cosas funcionar porque simplemente así lo querían.

-Ah si, adiós amigo.- Dijo Doyoung al asiento vacío a su lado, pues no había notado cuando fue que Ten desapareció de ahí.

-Realmente son de las únicas relaciones que valen la pena en este instituto.- Sonrió Jungkook cuando se dió cuenta hacia donde había ido su amigo.

-Ojalá todos los noviazgos fueran así.

-Eso no sería bueno, la relación funciona bien para ellos, pero no quiere decir que para todos será de la misma forma.

-¿A qué te refieres?

-Se perdería la pasión, hay personas que necesitan de estúpidas disputas constantes para recordarse lo que valen y el dolor que sentirías si realmente todo termina, si las relaciones fueran así de fáciles, todo sería monótono, no habría pasión, ni alegría al ver a tu pareja, todo se volvería aburrido, porque ambos olvidaron de pronto el valor de su relación al tener las cosas fáciles, mientras más luches por algo, más aferrado estarás a ello una vez que lo consigas, pero si obtenerlo no te costó nada... Pues entonces tampoco te va a pesar perderlo.

-Mierda, tienes razón.- Se quedó pensando en ello Doyoung.-  Que suerte tuvo Ten.

-No fue suerte.- Dijo Jungkook al recordar la mirada triste y vacía que algunas vez Ten tuvo en Francia, cuando le contó de aquel chico que se suicidó creyendo que Ten lo detestaba, cuando la realidad era que estaba tan enamorado de él que lo asustó y no supo cómo manejarlo, ni como aceptarse, optó por ser un imbécil con el chico para alejarlo, pero no sabía que lo alejaría permanentemente, y desde entonces no se permitió abrir su corazón para alguien más.- Ten de verdad merecía un buen noviazgo... El es una persona increíble, los dos sabrán cuidarse mutuamente.

-También confío en que así será.- Sonrió Doyoung y Jungkook comenzó a reír.- ¿Qué te ocurre?.- Frunció el ceño el chico.

-No puedo con tus dientes de conejo.- Comenzó a reír sonoramente el pelinegro.- Tienes cara de conejo asustado, por dios, eres demasiado adorable idiota.- Continuó riendo Jungkook.