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42. Lυɴα rojα

(Desliza imagen y escuchar audio hasta que se indique) Canción: "The night we met" de Lord Huron.

Pov Jungkook

"Red moon" Fue lo primero que leí al llegar al lugar en el que el taxi me dejó, en letras grandes y brillantes de color rojo, en un letrero tipo neon sign que resultaba intimidante pero a la vez instaba a entrar, nunca antes había estado aquí.

La música rock de las bandas en vivo que se presentaban en el lugar era audible desde afuera, demasiado para ser exacto.

Me sentía demasiado nervioso, era casi como llegar a un primer día de clases o algo similar. Afuera del bar habían varios chicos y chicas con botellas de cerveza en la mano y chaquetas de cuero, cada una con un estampado de un lobo en la espalda. En cuanto me vieron comenzaron a virotear y decir algunas estupideces como "¿Se te perdió tu mami niño rico?" o "¿Qué hace un pijo de dinero aquí?" Si antes me parecía intimidante el interior de aquel bar, ahora me parece una opción factible de refugio de estos tipos.

¿Cómo diablos había terminado trabajando aquí Jimin? Y sobre todo ¿Qué ha sido de su vida en estos dos años? Mi vida fue una mierda, ¿pero el? Al parecer maduró en muchos aspectos. Maldita nostalgia, sobre todo... maldito anhelo de volver a ser lo primero en lo que el piense.

Tome una gran bocanada de aire e ingresé al lugar, evadiendo la hostil mirada que me dirigió el guardia de seguridad de la entrada, usaba la misma chaqueta de cuero con el lobo que los tipos de antes.

Asumo que éste es el tipo de vestimenta que llevan los chicos rudos de este lado de la ciudad.

El interior era oscuro y solo lo iluminaban luces rojas, pasé por un largo pasillo donde habían personas fajando y otros simplemente estaban tirados durmiendo, completamente ebrios seguramente. Me limpie el sudor de las manos en el pantalón cuando llegue al final del pasillo y finalmente me encontraba dentro bar.

Los taburetes cerca de la barra estaban atestados de personas, y el resto de las mesas cerca de la pista donde estaba la banda en vivo también. El ambiente era pesado, pero ahora que lo veo mejor, este lugar no era mucho peor que otros sitios en los que estuve antes. Era exótico, si, pero nada fuera de lo común. Lucía como el lugar perfecto para encontrar a alguien como Jimin.

Me abrí paso entre las personas y meseros que estaban merodeando por el lugar buscando sus lugares o atendiendo personas. Debí haber planeado venir con alguien, al menos para no estar como idiota yo solo buscando donde sentarme.

Sentí un inmenso alivio cuando luego de diez minutos en el establecimiento un lugar en la barra se desocupó, e inmediatamente tome lugar en el.

Una vez sentado en el lugar, caí en cuenta de la realidad por la que pasaba, no sabía que decirle a Jimin después de dos años, no sabia por donde comenzar, y tampoco sabía si el me querría escuchar, y si lo hacía... Tampoco sabía si el aún me quería, era obvio que ya no, pero he vivido con una pequeña esperanza, y si el aún lo hacía... No podría arrebatarselo a Jennie sin más.

Duele, duele haber pasado dos años alimentandome de falsas esperanzas, despertar todos los días con la estúpida ilusión de que tal vez ese sea el día en que Jimin me vuelva a hablar, se vuelva a fijar en mi, que tal vez... sólo tal vez, terminara su noviazgo con Jennie.

Había pasado por alto el hecho de que Ten me dijo que al parecer Jennie se entero de mis sentimientos por el, y al ser Jimin su novio, le ha prohibido en parte hablarme, no dudo de que eso ocurriera, pues tan pronto comenzaron a salir, ella también dejo de hablarme de la nada.

Pasé tanto tiempo esperando un gesto de el, el suficiente para entender que si yo no lo buscaba, saldríamos de la universidad y entonces si nunca más volvería a dirigirme la palabra, porque simplemente en el ya no existía ninguna iniciativa ni ganas para buscarme, ni verme, y menos hablarme. No se que ocurrió con el, para que de forma tan drástica me sacara por completo de su vida siendo que albergaba tantos sentimientos por mi.