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Pensar que en que puede estar haciendo se hizo muy habitual. Una semana completa ha pasado, Zayn se mudó y Niall no presenta quejas con ello, casi todo marchaba bien.

Menos horas, preocupación, nervios, quiero tirar la toalla, ¿Cómo es posible que no la pueda encontrar? Tal vez  se fue a Nueva York y  yo, yo ruegó para que no sea así. Estaba camino a el internado, pues hoy salía una internada, por buena conducta, al llegar no saludé y pase directo a la oficina de mamá.

—Hola querido— saludo mamá de buen humor.

—Hola mami— respondí su saludo con un beso en su frente.

—Ella es Anastasia— apunto a una chica rubia, que estaba detrás del escritorio, con los brazos cruzados, esperando irse— Anastasia Hadid, sale del internado más prestigioso de Londres, esperemos a tus padres para que firmen algunos papeles— Mamá hablo buscando en su escritorio.

—No les intereso— Hadid hablo— digo, mi hermana vendrá por mi— corrigió inmediatamente.

— ¿Tus padres?— pregunto mirándola con cautela.

—Estan de viaje, no sé cuándo vendrán— alzo los hombros.

—Está bien, ¿Tu hermana vendrá?— Hadid asintió.

— ¿A qué hora?— pregunté un poco desesperado.

—Tranquilo, ya no más llega— Hadid hablo con amabilidad.

Los minutos pasaban y eso aun mas me desesperaba, no tenía tiempo que perder, tenía que seguir buscando a Madison y la hermana de Hadid no llegaba.

—Lamento mucho la tardanza, había demasiado tráfico y...— Jade entró apresuradamente, alzo su vista encontrándose con la mía. —Harry— su vista se puso nerviosa, se quedó estática, sin poder formular palabra alguna.

—Jade, ¿Que haces aquí?— la mirada cómplice de Anastasia y Jade hablaron mucho por ellas.

—Soy la hermana de Anastasia, nuestros padres no pueden venir y me mandaron a mi— hablo la rubia tomando asiento.

—¿Dónde está Liam?— pregunté.

—Am... Él ni idea— alzo los hombros.

—¿Dónde está Madison?— devolvió la pregunta.

—Pensé que tú ya lo sabías— se removió de su asiento incómoda.

—¿Porque debería?— volvió a alzar sus hombros.

—Pareces incómoda, ¿Que pasa? — Jade volvió a alzar los hombros, estaba nerviosa.

—No lo estoy— dijo cortante—¿Puedo hacer una llamada?— pregunto levantando de su asiento.

—Señorita, estamos aquí para que firmen estos papeles, al parecer se conocen y al parecer tienen problemas, este es un internado con suma educación, lamento que mi hijo la haya incomodado.— carraspeo mi madre que por unos minutos había olvidado completamente su presencia.

—No hay problema señora, solo quiero hacer una llamada, me urge— dijo ya saliendo, apresurada.

La curiosidad mato al gato, inmediatamente quise salir con ella, al llegar a la puerta Hadid se interpuso.

—Harry, necesito que resuelvas una de mis dudas.

—Anastasia, tengo que salir— quise salir.

—Harry, ven ahora mismo y resuelve las dudas de la señorita.— Ordenó mamá.
Resignado, solté un suspiro, estoy seguro de que ellas saben algo.

—¿Cuáles son Hadid?— la mire con seriedad.
Mire hacia la ventana, mi curiosidad despertó al ver una chica hablando por celular, sus fracciones eran muy parecidas a las de Madison a diferencia de que la chica que se encontraba parada en la entrada era un poco más gorda, su cabello tenía mechones rosados y llevaba unas gafas de sol puestas. Debo admitir que parecía nerviosa, achine mis ojos para verla un poco mejor.

Ella se quitó las gafas e inmediatamente miro hacia mi dirección, era Madison.

¿Niña Mala?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora