Acusado de numerosos crímenes y homicidios, Justin Bieber deberá contarle a su abogado la historia detrás de los hechos que lo condenaron a prisión.
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Portada hecha por: @sirentale
[Historia ganadora en los #BieberAwards2017 y #WorthyAwards20...
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—Ha despertado—la apresurada voz del doctor hizo eco en cada rincón de la sala de espera.
Justin y Liam se levantaron de sus asientos en el acto, mientras Kendra apareció junto a Sarah segundos después. Los rostros de todos delataban distintas emociones, cada uno parecía estar sumergido en una preocupación personal que demostraban a su manera.
—Si lo desean—el doctor se dirigió al grupo—, uno de ustedes puede entrar a verla.
De inmediato, fue Justin quien dio unos pasos hacia el frente.
—Iré yo—dictó firme a modo, más bien, de orden. Tan solo bastaba escucharlo para saber que no había persona en el mundo capaz de negarle esa petición.
Justin quería verla, deseaba tanto verla que no le importaba en lo más mínimo pasar por encima de la indignante mirada de Sarah y, por supuesto, de Liam. Aunque este último parecía estar más de acuerdo con lo dicho.
—Acompáñame por aquí, por favor—el doctor le hizo unas señas a Justin con las manos y este le siguió hacia los interiores de aquella sala de emergencias que solo permitía el acceso a personal autorizado.
—Ella es tu novia, ¿verdad? —una vez adentro, el hombre se giró hacia a Justin. El tono de sus palabras se escuchaba más como una indiscutible afirmación que como una pregunta.
Joder, ¿es que acaso todos esa noche se habían propuesto hacerle confesar sus sentimientos?
Con un leve movimiento de cabeza, Justin negó:
—No, Claire no es mi novia.
—Oh, vale, lo siento—el doctor esbozó una media sonrisa—. Pero debo suponer que ella es importante para ti, ya que deseabas entrar con tanto apremio.
Justin gruñó para sus adentros. Detestaba a la gente entrometida, y este doctor se estaba empezando a ganar ese calificativo.
—Debes pensar que estoy preguntando demasiado ¿no? —el hombre volvió a tomar la palabra.
—En realidad, sí—dijo Justin, reteniendo la poca paciencia que le quedaba.
—Solo necesito saber si podrás hablar con ella ahí adentro. Verás, Claire ha sufrido una descompensación propia de un ataque de pánico. Sucede cuando el sujeto recibe alguna noticia directamente emocional o cuando experimenta emociones fuertes que lo noquean por un gran periodo de tiempo—le explicó—. Allá adentro Claire necesita ver a alguien que la apoye. Una persona con la que se sienta cómoda y pueda soltar todo lo que trae consigo. Y yo necesito saber si esa persona puedes ser tú.
El chico tragó saliva. El bulto en su garganta se movió de arriba hacia abajo mientras un único pensamiento atravesaba por su mente en ese instante: Claire me detesta.
