El trato.

Capitulo 10.

AYSEL.

Llego a la casa y me bajo rápidamente del auto, abro el portón y corro por el jardín hacia la entrada. Toco la puerta y Emir abre, yo le pasó por un lado y llego a la sala de estar en donde me detengo de golpe al ver a mi papá preocupado en una esquina, Ozan tendido en el sofá llorando y preguntarse ¿Qué es lo que pasó?, Mamá sentada en el mismo sillón con la cabeza de Ozan apoyada en sus piernas y el señor Onur con los brazos detrás de la espalda.

—Aysel..— se pone en mi camino

—Onur por favor necesito ir con Ozan — digo con lágrimas

—Calmate, todo va a estar bien. Vamos a resolver esto en familia— Suena calmado ante la grave situación que a pasado.

Yo volteo y mis espaldas se encuentra Emir, observandome fijamente y un escalofrío se produce.

—Si— respondo regresando mi mirada hacia mi hermano

Onur se hace aun lado y yo puedo ir con mis padres, me hinco en el suelo y tomo la mano de Ozan diciéndole que todo va a estar pero él solo dice que tiene miedo.

—Ustedes saben sobre las deudas que los ahogan..—él camina a lo largo de la sala y de regreso

—Emir, por favor no hagas esto— Papá suplica y mi mamá rompe en llanto

—No han aceptado el trato de mi padre que es...el fin de sus muchas y millonarias deudas junto con la firma de las acciones a cambio de su hija Aysel..— Papá lo interrumpe

—Si no acepte ese trato fue por que mi hija no es una moneda de cambio..— Emir lo hace callar con un gesto de su mano

—No hagas arrepentirme de lo que diré Farik, es mejor que te calles.— Emir amenaza. —El punto es que yo me ofrezco a salvar a su hijo Ozan de la prisión.

—¿De verdad harías eso?— pregunto levantandome.

—Claro pero todo tiene un precio— dice con soberbia

—¿Y cuál es el ese precio?— mis padres me miran ante mi pregunta

—ponganle un precio a su hija, señores Yilmaz y yo lo pagaré

—No Emir, no Emir, no Emir.— trato de decir mi respuesta pero es lo único que puedo pronunciar

—¿¡Qué esperas Farik?!— Mamá grita mientras abraza a mi hermano.

—No mamá por favor...— miro a Ozan tan devastado —Debe de haber otra salida. No me hagan eso— halo mis cabellos entre mis dedos

—500 mil liras turcas, la firma de las acciones y Ozan fuera de la cárcel.— papá dice sin mirarme

No es posible mis propios padres me acaba de vender, no me han dado alternativas para pensar.

Emir suelta una risa

—¿Lo viste, Aysel? No vales más que medio millón de liras turcas, una firma y tú hermano— hace un cheque —Tambien yo cumpliré con mi parte pero también tienes que cumplir con la tuya.— se acerca a mi.

Tranquila Aysel es todo por tu hermano a quien más amas en el mundo, salvarás a tu familia.

—¿Es un trato?— mamá se levanta del sofá y me mira

—No lo entiendo..¿Cumplir con que?— me alejo de Emir

—Cumplir como mi mujer...— toca mi rostro

Todo sea por mi hermano.

—¿Quien me asegura su bienestar?— señalo a Ozan

—Yo lo haré, solo si tú aceptas el trato—sigue con tocar mis labios

—No Aysel...—Ozan dice —Por favor no vendan a mi hermana...yo iré a la cárcel pero no le hagan esto a Aysel. Se los suplico— como puede se pone de pie.

—¿Debo pagarle a tu padre Aysel? ahora quiero que deci...

—no puedo permitir que te lleven a ese lugar, te amo Ozan y es lo mejor para todos— le doy un fuerte abrazo

—Perdoname— susurra

—Paga a mi padre, Emir— le ordeno

Emir le da el cheque y saca los contratos de las acciones, los pone sobre la mesa, los firma rápidamente y se los entrega a mi padre.

—Haremos la boda lo más pronto posible— Mamá sale de la sala de estar con Ozan.

***

Cuando llegamos a mi casa tuve que dejar a Ozan en su habitación para que descanse también le dije que no se preocupe y que sólo se dedicará a dormir.

—Aysel vamos a hablar.— mis padres aparecen cuando yo cierro la puerta del cuarto de mi hermano.

—Ustedes y yo no tenemos nada de que hablar— contesto enfadada —Lo me hicieron no tiene perdón y solo acepté por mi hermano no por ustedes ni la reputación de esta familia— me voy caminando

—AYSEL VEN AQUI— Mamá me llama y yo tengo

—¿QUE QUIERES MAMÁ?— respondo

—Aysel no le hables así a tu madre— Papá regaña

—USTEDES YA DEJARON DE SER MIS PADRES. LOS ODIO, ARRUINARON MI VIDA— grito entre mi llanto

—Algún día nos los vas a agradecer— Responde papá

—JAMAS— sollozo

—ahora estas comprometida con Emir y creo que ya sabes que tienes que terminar con ese tal Andy, él delicuente— mi mamá me toma fuertemente del brazo

—!ANDY ES EL AMOR DE MI VIDA¡— Me suelto de un tirón —LOS ODIO, LOS ODIO, LOS ODIO— Me voy corriendo a mi cuarto y cierro la puerta azotandola.

Me tiró a mi cama a llorar. Tendré que acabar con Andy, lo voy a lastimar mucho pero no puedo decirle la verdadera razón del por qué.

Ideo planes en mi mente para poder escaparme pero inútil si lo hago, emir mandara a Ozan a prisión y yo no puedo soportar eso.

AL DIA SIGUIENTE.

Despierto con el rostro rígido debido a mis lágrimas que hacen secas sobre el. Son las 8 AM, "dios perdóname" pienso mientras me levanto y camino hasta el baño. En mi mente imagino la forma de decírtelo sin romper su corazón pero no sirven de nada mis ideas.

Me siento triste y deprimida. He pensado en marcarle por teléfono pero es algo cobarde de mi parte. Tengo que ir a darle la cara y eso para mí será muy difícil.

Paso por la habitación de ozan y doy unos leves toques en la puerta al momento se escucha un "pase".

—Hola..— cierro la puerta detrás mío

Ozan no me mira y se queda inmóvil en la cama, en su mesita de noche aún yacen sus medicinas que le dan por la noche.

—No te tomaste tu medicina..— murmuro

Un largo suspiro suelta Ozan y se hunde más en su cama.

—¿Para que?— Pregunta

—para que te sientas mejor..y puedas recuperarte más rápido— camino hasta a él y me siento en el borde su cama

—Todo es mi culpa Aysel..— su voz se quiebra

—Ozan..

—Soy un cobarde..un maldito asesino— la rabia en su voz se hace presente

—No voy a dejar que nada malo te pase— él se vuelve a mi y me abraza con mucho fuerza

—Perdón Aysel..— solloza

Yo Acaricio su cabello y lo calmo..

—Shh...te amo Ozan..Amar una vez....y morir mil veces— canto la frase de una canción que es la favorita de mi hermano y mía

—Amar...una vez y morir mil veces—repite

—Asi es..ahora toma tus medicamentos— nos dedicamos a abrazarnos por un largo rato

Después de dejar nuevamente dormido a Ozan. Tomo nuevamente mi bolso y me dispongo a salir de mi hogar.