Woman || h.s. (Completa/En Edición).

23.

Harry me tomó por la barbilla haciéndome verle a los ojos y depósito un dulce beso en mis labios. Luego tomó una pequeña flor amarilla de el suelo y la acomodó en mi pelo.

-¿Quieres regresar? -dijo tomándome de la mano y acariciando mis nudillos.

-Bien -dije.

Harry se pusó de píe con dificultad, tomó sus muletas del suelo y la acomodó bajo su brazo. Luego se inclinó ofreciéndole una mano para levantarme.

-Gracias, pero será mejor lo haga sola. No quiero que te hagas daño -dije levantándome del suelo.

Harry y yo caminamos de regreso a la fiesta.

-¡Hey, se habían perdido! -gritó sobre la música Louis.

-Necesitaba un poco de aire fresco -dije encogiéndome de hombros; Louis hizo una mueca con sus labios e imitó mi acción.

-Lo sé, lo sé... Tiempo a solas de pareja ¡No hay problema con eso! -rió por lo bajo y dió un golpecito a Harry en el hombro. Harry volteó hacía mí aguantando la risa y regresando su atención a Louis cerró sus ojos por un instante y asintió. Louis asintió varias veces y se alejó de nosotros para platicar con uno de los invitados.

Cerré mi boca. Dí una manotada a Harry en el hombro.

-¡Auch! -se quejó y rió seguido.

-Auch. Auch -imité sarcástica-. ¿"Tiempo a solas"?.

-Chicos, planeamos una salida mañana, no sé si podrás venir con nosotros Harry -Liam se acercó animado junto a Gemma.

-¡Claro! ¿Adonde iremos? -el ojos verdes contestó interesado.

-Aún estamos en eso -dijo Gemma.

-Yo no podré ir chicos -interrumpí.

-¡Vamos! ¿Cómo está eso de que no irás? -se acercó Lis detras nuestro.

Ladie mi cabeza.

-Lo siento pero... Hay algo que tengo pendiente -dije.

-¿Pendiente? -dijo Harry.

-Sí.

Al día siguiente, el frío de la ciudad me obligó a usar un abrigo para mantenerme caliente al salir de casa. Manejé hasta mí destino. Bajando del auto, acomodé mi bufanda, frote mis manos más por los nervios que me invadían que por el frío en realidad y respiré hondo. Un mechón de pelo calló sobre mi cara debido a el viento; paso a paso el rechinar de mis botas eran lo único que me hacía compañía. Me adentré en el lugar que parecía desolado y en un profundo silencio que hizo poner mi piel de gallina. Apresuré el paso por inercia. Una vez reconocí el nombre grabado en aquella piedra me detuve casí sin poder creer que fuese verdad aún.
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Te extrañaremos.

Adam Mathews.
1993-2017.

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Leí en la lápida frente a mí. Pasé mis dedos sobre el grabado y sín poder evitarlo, tapé mi boca con una mano y empezé a llorar en silencio. De rodillas sobre la grama nueva y fresca lloré al recordar como lo conocí, como tuve momentos alegres con él que aunque no pudieron hacerme olvidar a Harry me hicieron darle un espacio en mi corazón pues a pesar de todo lo que pasó luego... él fue parte de mi vida y lo que vivimos fue lindo por un tiempo.