Eres un idiota

Capítulo 40

Mes uno

-Mira, mira, mira, mira- gritó JiMin emocionado.

JungKook quien comía su típico pan de chocolate (porque él también parecía embarazado), salió corriendo hacía la dirección de su novio.

- ¿Qué pasa? - preguntó asustado- ¿Te duele algo?, ¿Te sientes mal?

JiMim muy al contrario de lo que pensó JungKook, estaba muy sonriente con sus manos en su pancita.

-Ven aquí- dijo y JungKook obedeció.

Al llegar a donde su novio, este tomo su mano y la puso también sobre su pancita y comenzó a moverla de arriba abajo.

- ¿Lo sientes? - preguntó JiMin emocionado.

JungKook abrió mucho sus ojos y acaricio más la barriguita de JiMin.

-Ya está creciendo- habló muy emocionado.

JiMin comenzó a reír y JungKook bajo para besar el abdomen de JiMin.

-Hola- empezó a hablar- Yo soy tu papá, y quiero que sepas que te espero con ansias- siguió- déjame decirte que serás muy bien recibido o recibida, tendrás muchos tíos y personas que te quieran, crece fuerte y sano o sana y por favor espero que tengas todos los rasgos de JiMin, sus ojitos bonitos y brillosos, su sonrisa llena de alegría y súper resplandeciente, pero más que todo sus tiernos cachetitos suaves y rellenitos- volvió a besar la pancita de JiMin- te amo.

JungKook se puso de pie después de su conversación con su futuro hijo o hija, y lo primero que vio fueron los ojos de JiMin, llenos de lágrimas.

-No llores bebé- dijo JungKook y comenzó a secar sus lágrimas.

-Lo siento, es que fue muy lindo lo que le dijiste- respondió y se abrazó a JungKook.

JungKook comenzó a acariciar la cabecita de JiMin y los dos se quedaron así por un largo rato.

-Te amo- hablaron los dos inconscientemente, sonriéndose y con la misma idea en la cabeza, ellos estaban destinados a estar juntos para siempre.

Mes dos

-Pareces liquipaper- comentó TaeHyung y comenzó a reír.

Jin quién estaba a su lado, golpeó su cabeza y lo reprendió.

-No le digas así- retó, para luego dirigir su mirada a JiMin- en realidad te ves muy tierno.

JiMin tomó ambos comentarios chistosos y comenzó a ver la pequeña curvita que se había formado ya en su vientre.

- ¿Ustedes creen que sea niña? - preguntó perdido en sus pensamientos- ¿o niño?

Ante tales palabras los tres guardaron silencio, y por primera vez en sus vidas coincidieron en algo.

-Niña- dijeron al mismo tiempo.

Los tres comenzaron a sonreír e intercambiaron miradas de felicidad, pues ellos sabían que iban a querer a ese bebé mucho más de lo que se querían ellos mismos.

Mes tres

-Aún no puedo creer que vayas a tener un hijo- comentó Jackson quién estaba acompañando a JiMin a comprar comida.

-Pues yo tampoco- respondió aquel rubio- pero luego mis ganas de comer todo lo que se me atraviesa, me lo recuerda.

Jackson soltó una carcajada por las palabras de JiMin y se acercó para mirarlo fijamente.

-Quien diría que un rubio pequeño, con deditos tiernos y sonrisa bonita, enamoraría a un pelinegro testarudo y rudo, que no pensaba en nadie más que en sí mismo.