Capítulo 1

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Yoongi

Ya ni recordaba la última vez que había vuelto a Corea, a mi pueblo, a la casa donde me crié. Y la culpa me estaba empezando a atormentar. Tal vez debería haber vuelto más seguido. Tal vez si hubiese trabajado menos, e ido a visitar más seguido a mamá, me habría dado cuenta de que no estaba bien de salud.

Quién sabe, tal vez hubiese podido ayudarla.

Pero de nada servía lamentarse. No se puede cambiar el pasado. Habían pasado ya casi dos meses de su muerte y de eso no había vuelta atrás.

Recién entonces me animaba a ir a casa. Tenía tantas cosas de las que ocuparme, entre ellas pagar deudas, buscarle un buen lugar a sus pertenencias y poner en venta la casa.

Cuando llegué, estacioné el auto enfrente y observé como todo se veía igual que siempre. Nada había cambiado...excepto que ella ya no estaba, y esa era solo una casa vacía.

Los flores en el jardín del frente se veían perfectas como si alguien hubiese estado cuidando de ellas. Mamá adoraba ese pequeño jardín.

Tomé mi bolso y bajé del auto.

Atravesé el camino de la entrada hasta llegar a la puerta y busqué mis llaves. Mierda, incluso ya me había olvidado cuál era. ¿De verdad había pasado tanto tiempo?

Había vivido 17 años en esa casa. Desde que nací hasta que me fui a la universidad. Ahora tenía 27 años y me sentía como un adolescente nuevamente recorriendo esas habitaciones.

Definitivamente debería de haber venido más seguido. Hacía años que vivía y trabajaba en Estados Unidos, y el vivir tan lejos, siempre había sido una buena excusa para no ir y nunca se había sentido tan incorrecto hasta el momento en que recibí la llamada que me informó que mi madre había fallecido.

Fui hasta mi vieja habitación y también todo seguía igual. Muchas veces le había dicho a mamá que se deshiciera de todo pero ella nunca quiso porque decía que aún necesitaría un cuarto cuando fuera a visitarla.

Me sentí como un idiota y como un muy mal hijo, pero de nuevo, era inútil lamentarse.

Tenía que dejar eso y ponerme a hacer lo que vine a hacer.

Me tiré un momento en mi cama, sintiendo la familiar comodidad de mi viejo colchón, para descansar un rato. El viaje en avión había sido cansador y conducir otro buen rato desde el aeropuerto me había terminado por agotar. Casi que me estaba quedando dormido cuando el sonido del timbre me despertó.

Había alguien en la puerta.

No tenía ganas de ver a nadie pero aún así bajé las escaleras y fui a ver de quién se trataba.

Era mi vecina, la señora Park. Aunque supongo que ahora debería decir ex vecina ya que yo ya no vivía ahí desde hace años. Se veía más vieja y con un par de kilos más que en la imagen que tenía de ella en mi mente pero definitivamente la reconocí.

- Joven Yoongi! ¿Te acuerdas de mí? - me habló con una sonrisa tímida.

- Claro que sí, señora Park - le sonreí también con una sonrisa fingida.

- Vi que bajaste del auto y decidí venir a saludarte. Hacía años que no te veía...creo que la última vez que te vi por el vecindario fue una navidad hace unos cuantos años. ¿Tal vez unos 4 años?

- Puede ser, ya no recuerdo.

- Lamento mucho lo de tu madre. Era muy querida por todos aquí. Bueno, eso tú ya lo sabes.

- Sí, lo sé. - respondí haciendo una mueca. Eso era cierto. Mamá siempre había sido muy querida por todo el mundo.

- Si necesitas algo o lo que sea en el tiempo que te quedes no dudes en ir a golpearme la puerta.

Cuídame - YoonminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora