Capítulo 29

3.6K 388 28
                                    

Yoongi

Tuve que tomarme dos calmantes y pasar el resto del día acostado para que se me pasara el dolor de cintura y espala que me había dejado la caída.

Amaba a Jimin pero iba a matarlo por haberme tirado de esa ventana.

Por otro lado, esa tarde recibí un par de llamadas de varios compradores que estaban interesados en la casa. Fue como si hubiesen caído todos de golpe. Y arreglé con dos de ellos para que pasaran a ver la casa el día de mañana.

Y vaya sorpresa que me llevé cuando una de esas personas se trataba nada más ni nada menos que del padre de Jimin.

Me habló muy serio por teléfono como si aún tuviese algún problema conmigo por ser gay, pero fuera de eso fue muy respetuoso. No me dio detalles de por qué quería comprar la casa pero acepté que viniera como cualquier otro comprador.

Aún así me seguía pareciendo todo muy raro.

Al día siguiente, por la mañana, el señor Park fue el primero en llegar.

Vernos cara a cara después de tanto tiempo, fue un poco fuerte. No me olvidaba de toda la mierda que le hablaba de mí a Jimin cuando era pequeño. Decirle en la cara que en la actualidad su pequeño hijo disfrutaba revolcándose conmigo en la cama fue muy tentador pero claro que no lo hice.

- Min - me saludó dándome la mano.

- Señor Park.

Lo hice pasar y le mostré la casa. Creo que nunca antes había entrado aquí, sino mal recordaba, durante el tiempo que había sido vecino nuestro.

- Se ve bastante bien. - comentó.

- Sí, mi madre la cuidaba bastante. Solo tuve que arreglar algunas cosas nada más. Y el precio no es tan alto.

- Lamento...lo que pasó con tu madre. - dijo con dificultad. Se notaba que era incómodo hablar de esto. O creo que el solo hecho que nos estuviésemos viendo ya era incómodo.

- Gracias. ¿Y se puede saber por qué quiere comprar la casa? - cambié de tema - ¿Va a venirse a vivir aquí?

- Es la idea.

- ¿Por qué habría de querer venirse a vivir enfrente de su antigua casa?

- ¿Quieres saber? - me miró desafiante - Te lo diré entonces. Por Jimin. Quiero estar cerca de mi hijo. Sé que nuestra relación es complicada y que no le gusta ir a verme. Así que si me vengo más cerca, no tendrá excusa.

- ¿Usted cree que Jimin no quiere ir a verlo por un tema de distancia nada más?

El señor Park me miró molestó. No le gustó nada la forma en la que le había hablado.

- No,  sé que también pasa mucho tiempo contigo aquí.  Supe desde el primer momento que habías vuelto y que Jimin empezó a ayudarte con la casa. 

- Así es. ¿Tiene algo de malo eso? - pregunté sin dejarme intimidar.

- Pues tengo que confesar que me sigue sin gustar que Jimin pase tiempo con alguien como tú.

- ¿Con alguien como yo? - me estaba empezando a sentir ofendido.

- En fin, Jimin ya está grande. - respondió ignorándome - No puedo manejarlo y controlarlo como cuando era pequeño. Y menos cuando no estoy por aquí para vigilarlo. Su madre es demasiado blanda con él y le deja hacer lo que quiere. Me parece que Jimin tiene que tener una figura masculina cerca en su vida, que lo guíe por el camino correcto.

- Jimin está perfectamente bien. No hay nada malo con él. Y en todo caso, se hubiese acordado antes de irse a vivir al otro lado de la ciudad.

- ¿Tú que sabes de mi hijo, eh? - se acercó y me miró con desprecio. - ¿Hace cuanto tiempo que llegaste aquí? ¿Y ya te crees conocerlo? ¿Crees saber que es lo mejor para él? Yo soy su padre creo que sé muy bien lo que le conviene y lo que no. Y el por qué me fui del pueblo no es asunto tuyo.

Estaba empezando a enfadarme de verdad. Apreté mis manos en un puño resistiendo la ganas de darle un puñetazo a ese imbécil. Si supiese que yo conocía a su hijo incluso mejor que él.

- Además, si compro la casa, te irás ¿no es así? Volverás a donde sea que vives y dejaras a Jimin en paz.

Maldito imbécil. Estaba loco si creía que iba a venderle la casa a él después de todo lo que me estaba diciendo.

- Entonces esa es la verdadera razón por la que esta haciendo esto.

- Ya te dije que hago esto por Jimin. Haré lo que sea por él, para que siga siendo un buen niño. Me necesita a su lado. Y sino mírate. Tú eres el claro ejemplo de lo que pasa cuando falta una figura paterna al lado.

- ¿Perdón?

- Sé que tu padre murió cuando eras muy pequeño. No es tu culpa y lo entiendo. Pero tu madre...ella debió hacer al respecto. Debió buscar un hombre que te criara correctamente, para que no salieras así...

- ¿Así? - pregunté con mi ojos inyectados de furia. Sabía lo que iba a decirme solo quería que tuviese las bolas de decírmelo en la cara.

- Maricón - respondió sin vacilar.

Fue suficiente. Si quería hablar mierda de mi, que lo hiciera. Si quería pretender que era el padre del año, que lo hiciera. ¿Pero meterse con mi madre? Eso si que no.

Lo tomé de su camisa con fuerza, y lo miré lleno de odio. ¿Cómo podía existir alguien tan hijo de puta como ese tipo?

- Adelante golpéame. - me dijo sonriente.

Ganas no me faltaban. Realmente quería romperle la cara. Pero entonces mirándolo de cerca, vi cuan parecido era a su hijo. Solo por fuera, por supuesto. Pero aún así el rostro de Jimin se me hizo presente en mi mente.

Y entonces me di cuenta. Ese hombre era el padre del chico que amaba. Por más que lo odiara, nada podía cambiar eso. Y jamás le haría daño a alguien de la familia de Jimin, no importa cuan complicada sea la relación.

Lo solté y me alejé.

- Váyase de mi casa.

- Pensé que íbamos a hablar de negocios. - dijo como si nada.

- Esta loco si cree que voy a venderle la casa a usted después de como le falto el respeto a mi madre y a mí.

- Por favor, Yoongi. Seamos racionales. ¿Cuántos interesados has tenido hasta entonces en esta vieja casa? Dijiste que el precio era bajo. Pues estoy dispuesto a pagarte el doble, incluso. Con tal de que desaparezcas de la vida de Jimin de una vez.

¿Estaba chantajeándome? ¿En serio? ¿Quién mierda se creía que era?

- No quiero su dinero de mierda. Y no lo necesito. ¿Cree que soy un muerto de hambre, acaso? No estoy tan desesperado. La casa se venderá a su tiempo.

- ¿Y por qué sigues aquí? Tranquilamente podrías largarte mientras tanto. Tiene que ver con Jimin ¿no es así?

- No es asunto tuyo el por qué sigo en el pueblo.

- No sé qué andas haciendo con mi hijo o con qué mierdas le estás llenando la cabeza pero créeme que no dejaré que siga así. Y te juro que si tienes intenciones sucias con él o le llegas a tocar un solo cabello te...

- ¿Qué? ¿Me va a golpear? - lo interrumpí.

- Yo no. Ya se encargarán de eso en la cárcel. Que es adonde vas a ir si abusas de un menor. Así que yo que tú lo pensaría mejor.

Se dirigió a la salida y en la puerta se volteó para mirarme una última vez.

- Mi oferta sigue en pie. Así que tú decides. Mucho dinero...o la prisión. No creo que sea muy difícil de pensar. - sonrió.

Cerro la puerta tras él y se fue.

Me aguanté las ganas de gritar de la bronca que tenía. En cambio le di un buen puñetazo a la pared mas cercana que encontré.

Me importaba una mierda lo que dijera. Es cierto, probablemente yo no sea la persona más adecuada para Jimin, pero nunca en miles de años dejaría que ese tipo habitara en mi casa, en la casa de mi madre. Eso jamás.

Cuídame - YoonminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora