Capítulo 21

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🐰

Jungkook se sentía desconcertado y ligeramente incómodo, pues al caminar, lo que Jimin le había puesto en su interior, le hacía sentir extraño; le incomodaba demasiado, sin embargo obedeció a su esposo y no lo retiro. Con un sonrojo llegó hasta la mesa de antes, dónde encontró a Jimin mirando a la nada y bebiendo vino como si nada hubiera echo.

— Me incomoda...

Susurra Jungkook cuando se sienta.

— Pronto no lo hara. –Aseguro Jimin sin mirarlo, pero aquello sólo alerto un poco más al menor de ambos, quien intentaba beber también mientras lo miraba queriendo descifrar lo que planeaba.
Jimin por su parte no lo estaba mirando por eso Jungkook se sorprendió cuando de repente giro su rostro capturando su mirada. Inevitablemente Jungkook se removió un poco intimidado y por fin entendió a que se refería Jimin cuando dijo que pronto dejaría de incomodarle. Jungkook apretó sus muslos cuando sintió aquella sensación. Grave error.

— Me lo quiero quitar.

Dijo sin soportarlo más, levantandose para regresar al baño, pero, de pronto antes de siquiera poder moverse, escucha la voz de Jimin dejándolo ligeramente sorprendido e impactado por lo dominante que él se escuchaba en ese momento.

— Si te lo quitas me voy de aquí. Es mi última advertencia.

Advirtió una vez más de una forma completamente autoritaria, haciendo la piel chinita de quién le escuchará, Jungkook bajo su mirada, ahora debatía consigo mismo. No quería sentir esa cosa, era placenteramente incómoda, pero tampoco quería que Jimin se fuera.

— Dije que quería ir lento...

Finalmente murmura apuñando sus manos esperando que Jimin entendiera esas palabras.
Pero apenas da el primer paso, Jimin presiona un botón que no sólo hace que Jungkook se detenga enseguida, lo hace gemir en sorpresa y casi ponerse en cuclillas.

Jimin no dice nada simplemente se pone de pie, toma su mano levantándolo y lo lleva hasta la salida del restaurante, Jungkook sentía delirar ante cada sensación y moría de vergüenza por que habían tantas personas ahí, que podrían darse cuenta de su estado. Eso no estaba nada bien y no le gustaba para nada esa idea.
Jimin lo estaba volviendo loco con su rápida caminata y es que él nisiquiera detuvo aquella cosa antes de tomar su mano, cuando lo levantó y lo obligo caminar fuera del restaurante.

Cuando finalmente llegaron afuera Jungkook soltó su mano agradeciendo que no hubiera gente afuera del restaurante, recién llegando o saliendo de él.

- ¡De-tenlo ahora mis-mo! – Estaba casi retorciéndose pero el podía soportarlo, sus piernas temblaban ligeramente y sus mejillas estaban rojas casi a tope.
Ante su pequeño momento de valentía Jimin no puede evitar rodar los ojos y suspirar.
Entonces se acerca de nuevo a él de manera lenta pero segura. Jungkook se aleja y el mayor alza una ceja. Como un ¿Es enserio, Jeon Jungkook?

— ¡Park Jimin! – Grito.... O gimió? Ahora sí molesto.
Pero Jimin fue un poco más astuto cuando esquiva cualquier movimiento de defensa que Jungkook siempre usaba y lo carga como cuando estaban en casa, Jungkook en su hombro, cabeza abajo, estómago en su hombro y sus manitas golpeando su espalda sin fin.
Antes de seguir su recorrido al auto le da una nalgada por su mal comportamiento y al llegar, no lo sienta del lado del copiloto, lo sienta más bien en los asientos traseros. Jungkook estaría demasiado distraído, penso él.

Él menor se queja por ello, porque nisiquiera es cuidadoso con él ay recostarlo dentro.
Luego de ello, Jimin se adelanta para ir hasta el lado del piloto y comienza manejar, un rumbo que el menor no conocía por supuesto.
Jungkook quiere gritarle y golpearlo apenas él sube al auto, pero no puede porque Jimin ha aumentado la velocidad del juguete sexual que había puesto en su interior, Jungkook básicamente se estaba retorciendo del placer en el sillón luchando por no tocarse (cuidando su orgullo lo más que podía) y sintiendo que llegaría a su orgasmo si Jimin no lo detenía.
Pero era imposible, aquello era demasiado placentero para su aún joven cuerpo.

Rabbit (Jikook)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora