Rabbit (Jikook)

Capítulo 26

¿Recuerdas la primera vez que lloraste por mi culpa?
Te dije muchas estupideces ese día, Taehyung me dió la golpiza de mi vida, me lo merecía.
¿Recuerdas la vez que te ofendí en la cabaña? Me diste una buena bofetada, me lo merecía.
¿Recuerdas la vez que dijiste que nunca me serías infiel, te hice llorar y empeore todo? La vida me castigo horrible. Me lo merecía.

Yo no lo entiendo, por qué a pesar de que las estrellas brillan al igual que la luna, la arena no deja de ser tan suave y las olas del mar  no dejan de sonar como una sutil melodía, nada me llena, ni me emociona, ni me tranquiliza. Me siento tan muerto. Asfixiado...

Estoy sentado abrazando mis piernas, las olas del mar apenas tocan las puntas de mis pies, mi vista permanece fijada en la espuma que llegaba hasta a mí y luego desaparecía en la fina arena. El mar se veía negro, peligroso, da miedo el solo pensar que una ola gigante podría llegar de la nada y llevarse la playa entera. Pero, a mi no me importaba.

¿Cuando le perdí el miedo al mar negro de la noche? ¿Desde cuando me dio igual si una ola me ahogaba o si simplemente mi hora llegaba para terminar con esta agonía?

Acariciaba el metal entre mis dedos, mis ojos ya no estaban tan hinchados, hacia meses que había dejado de llorar, sin embargo, las pequeñas lágrimas no dejaron de caer. Sigo esperando una respuesta que me convenza, una que me resigne porque intento ser fuerte pero es muy difícil no sentirme así, tan acabado y derrotado.

Miro el collar entre mis manos y no entiendo, no entiendo por qué.

Mientras lo miro, de repente un vago recuerdo llega a mi, de la nada, sin siquiera pensarlo, era Jungkook llegando al altar  tan radiante, tan emocionado y tímido, a nuestros amigos con esa esencia de felicidad por nosotros, nuestra familia unida. Recuerdo a Jungkook nadar en el lago feliz, jugando con el agua, mojándome con ella cuando me negaba a entrar... comiendo helado sentado en el sillón o en el suelo, ensuciando sus labios, aveces sus mejillas y aveces... invitándome a comer con el...
Agotado haciendo sus tareas en las madrugadas, aquellas maquetas pasadas de moda, escribiendo largos ensayos hasta altas horas de la madrugada. Lo recuerdo despertándome a besos por las mañanas, abrazándome durante la noche... dormido en mi regazo después de un largo día de estudio, lo recuerdo feliz por mi trabajo, conviviendo con mi familia.
Recuerdo la primera vez que hizo una comida para mí, su timidez y sus locuras.
No puedo olvidar el amor que él me tenía, no puedo olvidar nada de él.
Por ello siento que me estoy muriendo ante su ausencia.
No puedo dormir sin sentir su calor, no puedo comer sin el, no puedo despertar sin escuchar su dulce voz, sus suaves besos, no puedo vivir si él no está conmigo.
No puedo.

Lo extraño... Y desearía que esta pesadilla de 7 meses terminará.
Por qué ya no lo soporto...

Siento el agua fría del mar subir poco a poco, ni siquiera me molesta la fuerza de las olas que llegan a mi torso.
Regreso el collar a mi cuello y mientras me hundo en el agua lo agarro sintiendo paz por eso.

Quiero estar con él, por eso he tomado esta decisión... Ya que el no puede volver a mi... yo iré con el. Mi vida no tiene sentido si Jungkook no está conmigo, no tiene sentido nada.

El agua a tocado mi pecho y sigo, no planeo parar.

Cuando el oxígeno comienza a faltar en mis pulmones, puedo ver luces blancas con flashes de los momentos más felices de mi vida, desde que estaba pequeño.

Me veo con mi primer caramelo, me veo con mis padres en distintos lugares bonitos, los veo felices juntos.
Me veo con mi primera novia, con mi primer novio, mi primer beso... Veo mi primer diploma y mi primer trofeo de futbol y danza.
Veo a Jungkook sentando en esa banca de parque, tan bonito... tan perfecto.
Me veo recibiendo ese cursi anillo en el armario de la cabaña.