WOMAN. #1

CREER.

Las luces de la ciudad durante la noche eran increíbles, pero el silencio en la madrugada era muchísimo mejor.

Sintió el calor entres sus manos entrelazadas al caminar por la solitaria avenida, Harry Styles daba largos pasos a su lado con un extenso abrigo cubriendo su cuerpo y la mirada pérdida en las calles. Se veía guapísimo de aquella forma, sin preocupaciones y relajado, pocas veces lo veía de esa manera así que prefirió quedarse en silencio hasta que él decidiera romperlo.

Los días habían transcurrido con tranquilidad y sorpresivamente sólo quedaban tres shows para Nueva York, tres shows para él concierto más importante en su carrera como solista... El Madison Square Garden.

Y claro, tres shows para que Sarah volviera a Londres y dejará el tour atrás.

Ella había pensado en todas las posibilidades de contarle su rápida salida de Vogue sin que Harry se alterara y tomara represalias en contra de Miranda pero por más que daba vueltas a la situación, no encontraba una solución. Su propio futuro estaba en sus manos y odiaba mentirle a Styles, porque la sonrisa en su rostro y los besos a escondidas detrás de escena no lo merecían.

Entraron en un restaurante de comida china y él se separo de su lado para saludar al dueño. El chico asiático lo saludo con una sonrisa y ambos hablaron en susurros mientras ella estaba de pie en el marco de la puerta observando el lugar.

Harry se acerco a ella con sus grandes ojos brillantes observándola con atención: —Nuestra mesa esta lista.

—¿Podemos hablar sobre el hecho de que es pasada la medianoche y el restaurante esta vacío? 

Sarah camino delante de Harry sintiendo las manos de él en sus caderas, guiándola. La decoración del lugar era impresionante, paredes blancas y diversos elementos dorados junto a una chimenea, la cual entregaba un toque bastante hogareño.

—Estás conmigo y siempre tendrás lo mejor, corazón —Harry Styles tomo el abrigo de Sarah en sus manos y la ayudo a quitárselo, en un acto completamente caballeroso la ayudo a sentarse y luego él rodeo la mesa.

El chico de rulos sacó su abrigo y quedó con una simple remera negra, la luz del fuego en la habitación tiñeron sus mejillas en rosa de forma inmediata, los músculos de sus brazos se alzaron cuando él apoyo sus codos en la mesa y le sonrío abiertamente.

—¿Sushi? —Sarah asintió sin poder ejercer palabra alguna al darse cuenta que aquel chico sólo tenía ojos para ella y pestañeo varias veces al ser consciente que lo había estado observando fijamente. Acerco su mano hasta la de él y entrelazaron sus dedos de forma lenta, el silencio en la habitación los llevo a ambos a un estado de relajación inmediata.

—¿Qué harás cuando llegues a casa? —Sarah preguntó suavemente y llevo la pieza de Sushi a su boca.

—Voy a descansar un tiempo —Admitió el cantante en voz alta y bebió el vino de su copa. Paso la lengua por sus labios y lo mordió levemente elevando su mirada hasta ella —Y iré a algún lugar desconocido, supongo.

Sarah asintió masticando la pieza de sushi en su boca, por debajo de la mesa percibió como él entrelazaba sus piernas y intentaba acercarla muchísimo más a él, lo único que los separaba era la superficie de madera.

Harry tomó una pieza con sus palillos y la llevo hasta los labios de Sarah quién de forma obediente abrió sus labios llevando el sushi a su interior, el cantante observo la forma en que sus labios se abrieron para disgustar la comida y pasó una lengua por sus labios al ver como ella se alejaba con una sonrisa de labios cerrados mientras masticaba.