WOMAN. #1

AMIGOS.

Sarah lo siguió a través de los pasillos y cuando Harry se detuvo abrió la puerta, la dejo así para que ella entrará y dudando, lo hizo.

Observo la habitación perfectamente ordenada con una vista impresionante a la gran ciudad, inconscientemente se preguntó si en todos los sitios a los que iba le daban la mejor habitación del piso que alquilaban.

Eso es lo que la había impresionado más hasta el momento, el equipo de Harry se encargaba de entregarle la mayor comodidad y para ello tomaban un piso completo del Hotel para ellos, nunca había pensado que él pudiese tener aquella influencia en lugares públicos.

Harry Styles paso la mano nerviosamente por su cabello y ella dudosamente se sentó frente a él esperando a que hablará, finalmente Harry quería hacerlo. No quiso pensar en el rostro de todos al ver como la llamaba de forma tan familiar a hablar con él sí sólo era una trabajadora más que supuestamente no conocía, por el mismo motivo, no debía tener mayor problema con ello, evitó la juguetona mirada que Jamie le lanzó y se pregunto por décima vez en estos dos días porque había aceptado este trabajo.

Desde el principio ella intentó mantenerse alejada y actuar normalmente, a fin de cuentas sólo haría su trabajo y luego volvería a su vida normal en Londres, en casa, con sus amigos.

Una vida estable que ella había construido por sus propios métodos a lo largo de todos estos años.Por lo mismo, debía actuar con madurez y viéndolo frente a ella tan complicado con lo que al parecer era su presencia, decidió hablar.

—Harry yo no busque esto —Aclaró de inmediato y luego, cuando notó que tenía su atención, agregó —Mira, estoy tan sorprendida como tú por estar aquí, en Manila lejos de mi hogar, contigo...

Vio como él quitaba sus lentes de sol y observo sus ojos levemente rojos, unas ojeras bajo ellos y el cabello desordenado lo hacían lucir increíblemente destruido, y como no iba a estarlo, si ella había visto accidentalmente como la chica rubia entraba a su habitación durante la noche anterior mientras ella caminaba por el pasillo en dirección a la suya.

No podía juzgarlo, él podía mantener la vida que quisiera.

—... Y de verdad lo siento mucho por la incomodidad —Añadió y cuando mantuvo su mirada sobre los ojos esmeralda que el chico poseía, sintió una inexplicable sensación en su interior —Sé que la última vez no termino nada bien pero quisiera llevar esto de la mejor forma posible.

Harry asintió y respondió:

—Yo también quiero eso, por favor no quiero que te sientas mal con mí presencia o algo así. Finalmente, ambos estamos trabajando.

Intento que él no notara como había tragado duramente ante su tono de voz, uno indiferente y de carencia sentimental, y se obligó a sonreír con los labios cerrados mientras asentía.

—Bien.

Sarah se coloco de pie y caminó hacia la puerta, sin embargo, la ronca voz del chico de ojos claros la detuvo una vez más.

—Una última cosa, la mayoría de las veces, cuando no podamos salir del hotel o esas situaciones debido a los fanáticos ustedes pueden hacerlo, incluso, pueden compartir con nosotros en todo momento porque quiero que disfruten esta experiencia y conozcan lugares nuevos, que no sea sólo estrés.

Lo vio sobre su hombro y sonrío abiertamente, allí estaba su verdadero él.

—Gracias por darnos una cálida bienvenida, Harry. Lo aprecio mucho, de verdad —Murmuro con dificultad, él asintió y extendió las comisuras de sus labios levemente.

—Es lo mínimo que puedo hacer por ustedes, merecen un cómodo lugar de trabajo.

Harry Styles la observo frente a él con una sonrisa en su rostro y decidió mirar más de la cuenta. Definitivamente, su cabello estaba más corto y no llevaba nada de maquillaje, podía ver sus pecas y la conocía tan bien que incluso notaba el sueño que tenía en ese momento.

Deseo pasar las manos por sus brazos y al llegar a sus manos, entrelazarlas.

¿Por qué nos hablamos tan formalmente si nos conocemos en todos los sentidos?

Quería bromear con ella, hablar sobre sus vidas y preguntarle qué había inspirado su último artículo en Vogue sobre las mejores formas para conocer Inglaterra, sí ella lo había hecho y sino que lo hicieran juntos. Pero en aquel momento cayó nuevamente en la realidad porque se olvidaba por completo que ahora eran singular y no plural, en definitiva, todos aquellos cuestionamientos que tenía en su cabeza nunca tendrían respuesta.

—Nunca podría hacerlos sentir incómodos, me conoces —Se sintió con la necesidad de añadir aquellas palabras porque se conocía a si mismo, algunas veces se comportaba como un imbecil arrogante sólo para protegerse a sí mismo y si había actuado de aquella forma con ellos durante las primeras cuarenta y ocho horas, tenía la necesidad de disculparse.

Observo como sus rasgos se suavizaban y una linda sonrisa intentaba aparecer en su rostro pero ella la evitó.

—Es mejor que vuelva, ya sabes... —El tono nervioso de su voz lo hizo pasar la lengua por sus labios y ella observo ese movimiento, él lo notó.

Harry se coloco de pie y abrió la puerta de la habitación para que ella saliera primero de esta y respondió:

—Claro, volvamos.

Caminaron juntos hasta el comedor y antes de doblar al pasillo, la detuvo tomando su mano. Se coloco frente a ella y observo sus lindos ojos avellana expectantes.

—¿Podemos hablar de vez en cuando, a solas? Como dos personas normales.

Vio una sonrisa en su rostro y ella apretó la mano que los unía.

—Claro, me tienes aquí cuando lo necesites —Esta vez Sarah extendió sus labios y él se quedo estático ante aquel movimiento, hace mucho que no la veía sonreír de aquella forma —Eso hacen los amigos. Vamos a terminar el desayuno.

Harry Styles intentó recomponer su rostro luego de aquella directa aclaración y dejó ir su mano mientras evitaba su mirada, fue ella quién entro a la habitación y luego lo hizo él en silencio.

—Que reunión más larga —Comentó Mitch solamente para ambos luego de que tomará asiento a su lado, el sarcasmo en su voz fue claro.

Styles tomó su taza y bebió de su café observando como ella le sonreía a Jamie golpeando su hombro y en como Anwar se unía a la conversación y besaba la mejilla de Sarah en el proceso.

Desvío su mirada hacia Mitch y éste último elevo sus cejas en dirección a él cómo diciéndole ¿Vas a dejar que la trate de aquella forma sin hacer nada?

El cantante se encogió de hombros y luego se colocó de pie para salir de la habitación.

Necesitaba estar solo.