Amame hasta el final [TERMINADA]

Capítulo 60

Matthew

Después de lidiar con los guardias de la entrada, me dirijo hacia el interior de donde se que esta Melodie. Casi siento el mundo caer a mis pies al ver a esa pequeña mujer rodeada de sangre, todas mis terminaciones nerviosas se alertaron, mi asombro no termina al verla puedo reconocer a Charlotte al otro lado de ese garaje.

Ella también está cubierta de sangre y De la Cruz esta junto a su cuerpo, este día no es bueno para ninguno de los dos. Estoy a punto de sacar mi arma y disparar al hijo de puta que atento contra la vida de mi mujer. No lo vi antes junto a Mel estaba su padre, pero que coño hacia aquí el señor Carter.

- Pero mira que me coincidencia.- susurra apenas Vicente.

- Señor dígame que paso.- toma mi brazo.

- Matthew llévate a mi niña de aquí, te la encargo por favor cuida la bien. No le digas lo que sucedió nunca, no podría superarlo.- sonrió irónico, no puedo ocultarle a Mel eso. Su padre dio la vida por venir a buscarla, no puedo tapar el sol con un solo dedo.

- Señor no puedo hacer eso, su hija lo adora y cuando despierte querrá saber despierte usted.- tomó su hombro para apretarlo suavemente.

- No se lo digas Matthew, dile que me fui que tenia otra familia y por eso desapareci.- lo miro asombrado, ¿Otra familia?.

- No podría mentirle así eso le va destrozar.

-Pero no es mentira Matthew si tengo otra familia y necesito que también veles por la seguridad de mi mujer y de mis hijos.- mi cara de asombro es inaudita.

- Está loco pero como paso, sabe se esto Elinor.

-No Matt no lo sabe y en este preciso momento me importa una mierda lo que pueda decir es mujer, no es un secreto para mi que tu padre y ella se revuelcan en mi cama.
Pero este no es el momento chico, quiero que cuides de mi verdadera familia, están en Londres te deje un sobre en mi caja fuerte la contraseña es 9192, necesito que hagas esto por mi Matt. Cuida de ellos por favor.

Lentamente el agarre de su mano sobre mi brazo va cesando, no tengo tiempo para ver por el ahora mismo la prioridad es Melodie, debo llevarle al hospital. Aunque me aterren esos lugares tengo que llevarla de una buena ves o me quedare sin ella. La tomo en brazos y mi corazón se siente a explotar con toda la sangre alrededor, lagrimas empiezan a caer por mis pómulos sin previo aviso.

-Tienes que estar bien pequeña, debes sobrevivir no puedes hacer que te ame, que me hagas compartirlo todo y luego mueras en mis manos, no lo puedes hacer.

Corro como si de eso dependiera mi vida, tomó el auto y llamo al gilipollas de mi padre para informarle que llevo a Melodie sangrando. Las manos se me congelan y con el paso de los minutos el corazón amenaza con salirse de su cuenca.

Pido a Dios para que no le pase nada a mi pequeña, tal vez él y yo no estemos en los mejores términos por todo lo que he hecho, pero Mel no ha hecho nada es tan buena y bondadosa, no se la puede llevar así no ahora que me acostumbre a ella, me acostumbre a su presencia, a su deliciosa fragancia a jazmines y arándanos, no me la puedes quitar ahora no es justo.

Al llegar al hospital me la quitan de las manos para llevársela al cuarto de pacientes críticos, las lágrimas no paran de caer, mis manos tiemblan y el frío en mi espalda me recorre desde hace ya dos meses, no se que hacer mi cabeza es un lío. En lo único que pienso es en que ella este bien, que este estable y lo mas importante no me deje sólo yo la necesito conmigo.

-Donde esta ella.-Veo a mi padre con los ojos rojos, acaso él estuvo llorando por Melodie o que fue lo que sucedió.

Lo único que me provoca ahora esté tan asco como pudo haberle hecho semejante canallada a Vicente, él era un hombre bueno no tenia por que haber sufrido un que el estúpido de mi padre le hizo.