2018
Habían pasado semanas de la muerte de Ernesto, y Jaz había estado recogiendo todas las cosas que podía. Había limpiado el closet de su padre y guardado su ropa en cajas en el ático. Según la psicóloga eso era lo mejor. Solo se quedó con su corbata y sus libros. Aquellos libros que tanto le gustaba leer después de comida.
Tras hacer esto, la colorada se propuso mejorar un poco la casa. Arreglar aquello imperfectos que con el tiempo se habían hecho y ni Mona ni Ernesto habían arreglado.
Ese día Jaz estaba en el techo colgada mientras Mona la regañaba, cuando sintió la camioneta de Javo llegar. Al ver a su amigo bajó rápidamente.
-Cacho, ¿Qué haces? ¿Ahora eres carpintero?- dijo Javo riéndose al verla
-No, Grace, es que quiero arreglar la casa. Al fin y al cabo si me voy a quedar tengo que vivir en condiciones- le reveló con una sonrisa. Ella sabía que la noticia le gustaría al chef
Al oír esto Javo abrió los ojos sorprendido -¿Te quedas?- y ella asintió
Javo feliz la cargó en sus brazos y le comenzó a dar besos como un loco.
-Si, por fin, vamos a ser de nuevo Grace y Juanca-
-Están bien locos los dos- dijo Mona entrando a la casa
-Che, ¿y qué te hizo cambiar de idea?- curioso
-Digamos que alguien me dio un buen motivo para quedarme- dijo con una sonrisa picaresca
Javo sabía muy bien a quien se refería -Juan Carlos Cacho del sagrado corazón de Jesús, ¿En qué andas metido?-
-Tranquilo, Grace, que yo controlo-
-Bueno, no sé si te sirva de algo pero venia a invitarte a una fiesta-
Jaz lo miró confundida, hacia unas semanas que su padre había muerto y no estaba para fiestas.
-Se, todo lo de Ernesto. Lo sé, perdón. Pero es que es la fiesta que se hace por el aniversario de la graduación del instituto. Ya sabes, que se reúnen viejos conocidos, amigos, enemigos a saber qué ha sido de la vida del otro. Y sinceramente no tengo ganas de ir solo- le explicó Javo
Jaz se quedo pensando un segundo
-Y si... ella va a ir seguro- le dijo Javo refiriéndose a Flor
No tuvo que hablar más para que la colorada aceptara. Esta era otra oportunidad de acercarse a Flor, a pesar de que seguro estaría Daniel, pero eso a ella no le importaba.
Por fin llegó la noche y Jaz se arreglaba para la fiesta. Se puso un vestido negro de tirantes, que dejaba ver sus delicados hombros. No era muy largo, de hecho terminaba mucho antes de llegar a sus rodillas. Se veía hermosa y su labial rojo hacía resaltar aun más sus apetitosos labios.
Una vez lista para la velada salió afuera y llamó a su amigo, quién seria su compañero en la fiesta.
Mientras esperaba sentada en su portal no pudo evitar recordar su propia graduación.2001
Ella se encontraba frente al espejo, nos sabía que ponerse. De hecho no quería ir, pero convencida por Javo decidió ser su acompañante. Además ella quería vigilar bien de cerca a Flor, no estaba dispuesta a dejarla acercarse mucho a Juan. Llegó la hora y Mona y Ernesto esperaban junto a Javo en el salón.
Al bajar aquella chica por la escaleras, todos se quedaron boquiabiertos, en especial su padre, pues ahora su que su hija era una princesa.
Llevaba un vestido color rosa claro, casi perla que combinaba perfectamente con su cabello suelto. No tenía mucho maquillaje, lo que dejaba ver la inocencia en su rostro. Javo se acercó a ella y como si fuera un caballero le brindó su mano. Tras esto Mona tomó la foto clásica de graduación, y Jaz se despidió de ellos.
Javo se sentía muy orgulloso, pues estaba seguro que iba a acompañado de la chica más guapa de la fiesta.2018
Los pensamientos de Jaz fueron rotos por el sonido de la bocina de la camioneta de Javo. El chef se bajó de un brinco para recoger a su amiga
-Juanca, dios mío. Estás hot- exclamó al verla
-¿Estoy hot? Límpiate Grace, que sabes que esto no es para ti- dijo montándose
Pero Javo la detuvo muy serio -Espera, espera, te tengo que hacer una pregunta-
-Dime- curiosa
-¿Te siguen gustando las mujeres?-
Al oír esto Jaz no pudo evitar soltar una carcajada. Le encantaba esas bromas de su amigo.
-Muchísimo, pero si me consigues varias copas tal vez hoy tengas suerte y haga una excepción- dijo riéndose
Sin más arrancaron hacía la fiesta. Seria en el gimnasio del instituto.
Al llegar la música se oía a lo lejos, no era muy buena, pero al menos era algo. Jaz estaba más suelta que nunca.
-Dios mío, Juanca, quién te ha visto y quién te ve- dijo Javo al verla bailando sin ni siquiera haber entrado
-Ah, Grace, las cosas han cambiado mucho. Ya no soy aquella pequeña tímida que se escondía tras de ti. Ahora me como el mundo- dijo Jaz poniendo una mano sobre su hombro
-Bien, ¿vamos a por todas hoy?- brindándole la mano
-A por todas- dijo Jaz chocando cinco con su amigo
Y se dispusieron a entrar al viejo gimnasio.
Al ver a Jaz todos se voltearon sorprendidos. Era realmente increíble el cambio que había dado. De ser una total fracasada que se escondía por los rincones ahora era una hermosa y sexy joven, la cual dejaba babeando a más de uno.
Al pasar por un bulto de hombres todos se voltearon a ver el movimiento de sus caderas. Jaz sabía que tenía ese efecto en las personas y le encantaba presumirse. Era muy diferente a la antigua, a la adolescente. La madurez la había hecho convertirse en atrevida y más aun si llevaba unas copas de más.
Se colocó junto a Javo a observar a la gente. Era increíble el cambio que habían pegado algunos, para peor.
Javo se reía de todos, pero Jaz estaba centrada en otra cosa. Buscaba con la mirada a Flor, pero no la encontraba.
-Cacho, creo que ahí llego tu Cenicienta- dijo Javo indicándole hacia la puerta.
Jaz miró para encontrarse con la imagen más hermosa
Sin duda la morocha era la más bella de la fiesta, al menos para ella. Llevaba el pelo suelto, con sus rizos al aire. Un vestido blanco cubría su delicado cuerpo, dejando que se viera parte de su escote. Sus labios eran color rosa pálido, que pegaban perfectamente con sus ojos marrones. Jaz no pudo evitar morderse el labio al verla. La deseaba con locura y estaba segura de que esa noche seria suya.
Al verla la morocha sonrió levemente pero esa sonrisa fue cortada al juntarse con su acompañante. Como era de esperarse Flor había venido con Daniel. Este se veía tan ridículo a su lado. Parecía un pingüino al lado de una diosa.
Jaz frunció el ceño al ver como llevaba su mano a su cintura, cosa que Javo noto
-¿Celos?- con un tono burlón
-No digas boludeces- dijo Jaz lanzándole una mirada asesina
-Es una lástima que tu Cenicienta ya venga con un príncipe- dijo Javo para continuar molestándola
-No todas las princesas son felices con un príncipe, Grace, y eso te lo voy a demostrar-dijo Jaz segura de sí misma
Tomó una cerveza y la bebió de un tirón. Decida caminó hacia ellos con una sonrisa falsa en su rostro. Flor abrió los ojos nerviosa al verla, la conocía bien y sabia que cuando bebía se ponía un tanto loca.
-Que bien que vinieron- dijo Jaz con la falsa sonrisa
-Jazmín, no sabía que habías estudiado con Flor- dijo Dani sorprendido de verla allí
-Sí, sí, estudiamos juntas- dijo Jaz mirándola directamente a los ojos
-Cariño, ¿Por qué no me dijiste que eran amigas?- le preguntó a Flor, la cual estaba embobada mirando de arriba a abajo a la pelirroja
-Es que no lo fuimos. Solo fuimos...- nerviosa
-Conocidas. La vi una sola vez en todo el curso…Creo- dijo Jaz continuando la farsa
-¿Viniste acompañada?- preguntó la morocha con un tono celoso
-Sí, con Javo- le contestó Jaz con una sonrisa al darse cuenta de sus celos
-Ah, ¿no sabía que eran novios?- dijo Dani haciendo el papel de boludo
-Sí, algo tenemos- dijo mirando directamente a Flor, la cual bajó la cabeza roja como un tomate
Jaz se alejó un poco de ellos y volvió al lado de Javo. En ese momento empezaron los bailes, una oportunidad que la colorada no perdería para acercarse a Flor.
En conjunto con Javo esta consiguió que en los cambios de pareja ella cayera con Flor, la cual se puso muy nerviosa al verla.
-¿Qué haces?- mirando hacia todos lados nerviosa
-Bailar- dijo sujetándola por la cintura y pegándola más a ella
El contacto físico con Jaz volvía loca a la morocha, la cual tenía la respiración agitada.
-¿Qué pasa?- dijo la colorada con un tono provocador al darse cuenta del estado en que se encontraba su compañera
-Jaz, por favor. No sigas que no me voy a poder controlar- dijo Flor con la voz entrecortada
-Pues déjate llevar- dijo Jaz muy cerca de ella
Flor miró los labios de la colorada con el deseo más grande del mundo. Se moría por besarla, lo quería hacer, debía hacerlo. Pero en ese momento algo la sacó de su éxtasis.
El DJ cambió la canción y pusieron una romántica.
-Perfecto- dijo Flor irónica, pues sin duda esto no la ayudaba en nada
-¿Qué pasa? ¿No te gusta bailar suave?- dijo Jaz tomando su mano
Colocó la mano de Flor en su cintura y ella colocó ambas en el cuello de la morocha, envolviéndola en sus brazos.
Fue en ese momento en que ambas se olvidaron del resto del mundo, solo eran ellas dos. Su amor era lo único que importa. Sus miradas estaban conectadas y no sentían nada más a su alrededor.
-Te amo- susurró Jaz casi en los labios de Flor, la cual la miró embobada.
Las palabras de la colorada tocaban su corazón -Y se que vos me amas a mí- continuó
-Jaz, yo....- dijo Flor en un suspiro
-Huyamos, Flor. Salgamos de aquí. Vente conmigo- le suplicó Jazmín ansiosa por ella
Fue entonces que Flor recordó el pasado. Esa misma conversación, esa misma promesa y sintió que algo que tenía escondido en su alma salía a la luz en ese preciso momento.
Se mostró aquel dolor que sentía, aquel rencor que llevaba años guardando. No pudo seguir más cerca de ella y se alejó de Jaz con los ojos llenos de lágrimas
Sin decir una sola palabra salió corriendo del lugar, dejando a una confundida Jazmín sola en el medio de la pista de baile.
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Código Postal... Es tu mirada (Flozmín)
FanfictionMuchas veces la vida no es como la queremos, y las cosas nos salen un poco torcidas. No nacemos donde queríamos nacer o no somos lo que queremos ser. El miedo nos gana y huimos sin dar la cara perdiendo la oportunidad de ser felices. Abandonamos tod...