Esta última hora y media hemos caminado para acercarnos al museo, no paramos ni un minuto para descansar. Será malo para todos, pero no hay tiempo para sentir dolor o cansancio, tenemos que largarnos de aquí cuanto antes. Aunque hemos tomado desvío tras desvío por los Locust y su incesante ataque.
-James, ¿qué es eso que se ve a lo lejos? -señala Paris hacia delante de nosotros.
Veo muy difícilmente a esta distancia, pero camino hasta el frente para divisar mejor y al fin lo noto, es el desfile de victoria cuando la COG logró ganarle a la UIR.
-Es el desfile de victoria...
-Solo una cosa que ya tiene ningún sentido -reuelve decir Chris.
- ¿Qué es lo que suena en los altavoces? -pregunta Kathe.
Guardamos silencio y escuchamos atentamente.
-A las diez en punto de la mañana, la Unión de Repúblicas Independientes firmo una rendición formal a la Coalición de Gobiernos Ordenados y ha concertado un tratado de paz. con profundo alivio les comunico que las Guerras del Péndulo han llegado a su fin, y que la COG y la UIR se embarcaran en un programa de reconciliación y de reconstrucción para curar las terribles cicatrices individuales y nacionales que este largo y terrible conflicto ha dejado en Sera. Esperamos que el estado de Gorasnaya se decida a aceptar nuestra oferta de reconciliación y dé su conformidad formal del alto al fuego en la misma línea que los demás estados de la UIR. Unámonos ahora y disfrutemos de este tiempo de paz.
- ¿Hace cuánto fue eso? -pregunta Sophie.
-Hace ya treinta días -respondo.
-Y pensar que creímos que esto acabaría -comenta Paris.
-Sí, pero eso ya no importa, chicos, ahora escapemos de este lugar -exclamo.
Ellos no contestan pero avanzan rápido.
Es demasiado triste que después de que las Guerras del Péndulo acabaran, nos tuviéramos que enfrentar a estas cosas, solo tuvimos dos meses de paz... Tener que sumergirnos en una guerra más y mucho peor que la pasada. Que estemos tan presionados. No puedo soportarlo, es demasiado.
Avanzo ignorando todo el desfile con sus carros alegóricos y edificios adornados.
Cruzamos puertas y brincamos barricadas y muros para lograr llegar al Palacio de Justicia. Ya no queda muy lejos, pero por la posición del sol, puedo decir que son las siete, o no lo sé, solo quiero irme de una vez.
La ciudad se nota más destruida en el centro mientras avanzamos, en realidad esta parte fue la más jodida que cualquier otra parte de Halvo. Debía ser obvio, ya que es donde se concentran la mayor parte del ejército de la COG.
Bueno, las larvas parecen atacar de manera estratégica, lo cual nunca podría haber imaginado. Son muy salvajes, no parecen tener otra cosa en la cabeza más que matar a los humanos. Más los Drones, ellos solo disparan a matar.
Sin embargo los Granaderos son muy peligrosos, usan las Gnashers, estos no llevan armadura en el torso y dejan ver su piel. Los francotiradores se diferencian por tener lentes especiales para su trabajo y los Boomers lo son más con su Lanzagranadas mortal. Estos son Locust grandes y gordos con voces muy profundas salidas del mismo averno. Pero lo que enserio da miedo y es muy letal son los Therons.
Ellos son muy inteligentes, no son idiotas como las demás larvas, serían una unidad de élite de ellos, así que no quisiera estar cerca de uno en toda mi vida.
-James -oigo exclamar a Sophie-, ya estamos cerca.
Veo al frente y ahí está, el Palacio de Justicia y aún es buena hora. Pero ahora viene a mí una pregunta que no me había hecho en todo este tiempo, que debí hacerme desde que decidimos quedarnos porque la salida estaba bloqueada: ¿cómo pasaremos inadvertidos por el museo sin qué los soldados Locust y Gears nos vean?
-James -exclama Chris-, aquí cerca hay un punto de avanzada, pero lo que más me interesa es que puede haber uniformes de la COG para poder pasar como si nada.
-Pues vamos, ya tenemos que escapar de aquí.
Camino detrás de él para saber dónde está el puesto de avanzada. Esa idea que tuvo Chris es buena, somos soldados de la Coalición, y podremos tomar un Raven sin problemas, solo temo a las preguntas que nos puedan hacer. Dejaré que Chris se encargue.
Caminamos a través de rocas de un edificio destruido para poder pasar. El cielo esta rojo, pero noto un poco de verde en él y algo que parecen ratas voladoras. Simplemente no importa y sigo avanzando hasta ver el puesto en uno de los edificios que no ha sido destruido.
Pasamos la puerta y noto un sentimiento de nerviosismo y tensión aquí, debe ser por los soldados que se encontraban antes de que tuvieran que ir a pelear contra los Locust. Está todo vacío, pero los dormitorios de los soldados están intactos.
Vamos hacia los casilleros y vemos si hay algún uniforme y si los hay, de hecho hay cinco, pero tres son de mujer.
-James -susurra Chris acercándose-. ¿Crees que deban usarlos?
Pienso detenidamente si deberían o no hacerlo. Analizo que podría pasar si dejamos que los usen. Lo que ellas podrían pensar de solo tener que usar uno.
-No -contesto-. Déjalo así. No podrían fingir bien frente a alguien importante.
Asiente y volteamos con los uniformes hacia el vestidor. No decimos nada, solo nos damos prisa. Aquí se escucha otra grabación en un altavoz.
-Ciudadanos, si les han expedido sus documentos de evacuación, prepárenlos y llévenlos consigo para mostrarlos a su asistente de evacuación, si aún no han recibido los documentos de evacuación, diríjanse al centro de diligencias más cercano con una prueba de identidad.
-James, enciende tu radio. Veamos qué sucede en las cercanías.
Lo enciendo y este de inmediato recibe una comunicación.
-Repito, el pelotón Omega ha derribado al Sembrador, comunicaciones reestablecidas. Todas las unidades al Museo de la Gloria Militar, recuperaremos la ciudad edificio a edificio -es el coronel Loomis.
Miro a Chris y está inmune a lo que ha dicho Loomis, y yo igual, la verdad no me interesa lo que haga el coronel o lo que diga, yo solo quiero que salgamos de aquí.
- ¿Coronel Loomis? Aquí el teniente Baird.
-Teniente, ¿cuál es tu posición?
-Punto Onyx, acabamos de activar el Misil de Masa Ligera y vamos a...
- ¡Ni una maldita palabra más teniente!- miro a Chris y ahora si estamos sorprendidos.
El misil... Se me había olvidado por completo que había uno aquí en Halvo. Pero si pienso bien o me lo imagino bien, Baird intentara matar a ese monstruo con eso y podría funcionar, lograría matar a ese maldito y liberarnos de esto.
-Si el misil está en ese silo es por un motivo -sigue Loomis.
-Coronel, no tiene idea de a qué se está enfrentando -exclama un soldado con voz rasposa.
-Sé exactamente a que me enfrento: una larva que ha matado a unos inútiles de la UIR. Le estrecharía la mano a esa cabrona si pudiera.
- ¡Usted y sus hombres morirán! -repone el soldado.
-Teniente, arreste al soldado Paduk y permanezca en esa roca -así se llama el soldado-. O mejor no. Cadete Hendrick, arreste a Paduk y al teniente Baird si se resiste –Sofía...
-Aquí Omega Dos, estamos atrapados a dos manzanas del museo, necesitamos evacuación.
-Estamos en marcha, sargento, podemos llevarles un Raven en una hora -habla Control.
- ¡No tenemos una hora!
Ya no se escucha comunicación alguna, pero Chris y yo estamos congelados debido a la idea de Baird. Chris me hace continuar.
Nos ponemos el uniforme rápidamente. El mío es de color gris, pero tiene la distinción de teniente y el de Chris igual, solo que el de él es de un color azul. Nos observamos y tenemos una sensación extraña, o al menos yo la tengo, y salimos. Ellas de inmediato captan que sucedió algo, Kathe más que ninguna otra.
- ¿Qué pasa? –pregunta Kathe.
-Muchas cosas -contesto-. Pero ahora vamos a ayudar a Omega Dos. Están cerca del museo y podrían morir. Ya allí, aprovecharemos su evacuación en Raven para irnos –Chris me mira y sonríe por la idea que tuve.
Ellas asienten y vamos rápidamente.
El museo está relativamente cerca, pero buscar a Omega Dos será difícil, solo dijeron que estaban a dos manzanas de ahí. Mientras, veo el cielo y los tejados. De algunos salen tablas para trasladarse de un lado a otro. Fue muy ingenioso de las personas, pero no se imaginaron que las larvas subirían a matarlos o incluso que los Reavers les dispararan.
-James, seamos cuidadosos, podrían reconocernos.
–Claro.
Doblamos el paso para llegar al museo a varias cuadras adelante. Miro de vez en cuando a los cuatro que nos siguen el paso pobremente. Sid parece cansado y Sophie lo jala para que no se quede atrás.
Vaya vida que nos espera.
Luego de casi veinte cuadras, escuchamos disparos al frente de nosotros, él corre hacia allá y yo me quedo con ellas y Sid.
-Tendrán que quedarse lejos de ahí, terminaremos con la mayoría de las larvas, y cuando ya no escuchen ningún disparo, se acercaran sin armas -asienten-. Y también estén atentas al cielo. Un pelotón soltara un misil.
- ¿Qué? -pregunta Paris sorprendida y preocupada.
-El teniente Baird y su pelotón soltaran el misil contra ese monstruo, pero no se preocupen, no tiene mucha potencia así que no nos matará.
Siguen preocupadas y es obvio, yo también lo estaría si me dijeran eso.
-Ve -exclama Paris-, estaremos bien -le sonrió y me voy, aunque ella me detiene y me da un beso.
Con ese acto, parto decidido a escapar.
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Gears of War: Exilio
FanfictionLa guerra ha marcado el mundo Sera y a todos sus habitantes. En un principio entre humanos que se disputaban el "líquido milagroso" y luego... Desde el suelo han emergido seres humanoides que destruyen y matan a cualquier humano a su paso. Este enem...