Acto 2 - Capitulo 4

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En el camino vemos Nemacyst en el aire y ellos hacen que la tinta tape el sol y que la oscuridad se expanda más rápido de lo común.
Pasamos por el Ayuntamiento de Ilima el cual ya no luce tan bello ahora. los Locust han destruido a la COG y lo peor, es que la Guardia Onyx también ha sido derrotada por las fuerzas de RAAM.
Caminamos unos metros por algunas calles, en una hay un agujero enorme y después nos detenemos, algo está enfrente de nosotros. Diviso más claramente y me quedo clavado al suelo.
–RAAM… –murmuro.
Ellos están igual. RAAM tiene tomado de la cabeza a un Guardia Onyx y él se retuerce para que lo suelte, pero veo a RAAM toma su espada —que parece más un cuchillo en sus manos— y le corta el cuello, arroja la cabeza hacia atrás y veo a más Gears y Guardias muertos al frente.
Todos soportamos el horror al ver que lo ha tratado como a un simple muñeco. Es cuando escucho que alguien deja caer su arma al suelo y ha sido Sid. Él se aterra por el hecho.
RAAM voltea y sus Locust también, nos ven y se nos quedan mirando de manera aterradora y siniestra, sus Locust son de elite y  lucen temibles, tanto como él. Ahora no puedo moverme, no puedo retroceder e irme rápidamente. Sería inútil tratar de matarlos, pero no me queda algo más.
–Paris –exclamo–, váyanse rápido, Chris y yo nos trataremos de darles tiempo.
– ¿Qué? –pregunta en tono alto y un tanto grosero.
–Lo que escuchaste.
–Y ahora tú escucha –dice Kathe–, estás idiota si crees que te dejaremos con este monstruo solo. Somos familia y triunfaremos o caeremos juntos.
–Sí, como ella lo dijo, James, somos todos o ninguno.
Todos o ninguno, sí que suena poético. Pero prefiero ser yo a ellos.
–No –contesto fuertemente–, váyanse, pueden vivir y nosotros veremos cómo salir de aquí, ¿cierto, Chris?
Me mira en modo indiferente, como si no le importara lo que yo dije. No contesta, está callado, se acomoda los lentes y voltea hacia RAAM. No pensarás...
–Todos o ninguno, James –contesta–. Hagámoslos trizas.
Corren y se ponen a cubierto, pero solo veo a Kathe, a Paris y a Chris, no están ellos dos. Giro mí cuerpo hacia atrás y observo a Sid con Sophie, ella habla con él agachada. Él asiente y ella le sonríe y le da un abrazo y por fin viene hacia mí.
– ¿Y bien?–le pregunto.
–Se irá, no morirá aquí –contesta y da una sonrisa forzada.
Sid se va corriendo por donde volvimos, para no morir. Voy a ponerme a cubierto de un auto, Chris y Kathe están ocultos en una pila de costales de arena al igual que Sophie y Paris.
Los Maulers , que son Boomers que usan escudos y una maza golpeadora, se van acercando y el Theron se queda a un lado de RAAM. Chris le dispara a uno y la larva se cubre con su escudo, pero la bala rebota y da a un costado del auto en el que estoy cubierto.
– ¡James! –grita Chris–. Son…
– ¡Lo sé! –sus escudos rebotan las balas, esto empieza a tornarse horrible.
¿Cómo podríamos vencer a estos Maulers? Es obvio que no podremos dispararles. Piensa, James, no debe ser tan difícil.
Si lo es.
Miro que se acercan a Paris y Sophie y que preparan sus mazos explosivos.
– ¡Aléjense de ahí! –grito.
Se mueven rápido y logran evitar el golpe, pero la sacudida en el piso las hace desequilibrarse y caen al suelo. El Mauler de elite se acerca de nuevo, a paso de tortuga, pero Kathe le dispara y este se cubre por reflejo.
Los Maulers no pueden golpearnos, y eso hace que RAAM haga que su Theron también ataque, corre rápido y trata de acercarse a uno de nosotros con su escopeta Recortada, una antigua escopeta que dejamos de usar ya hace años por su ineficiencia. Pero esta que trae es diferente, tiene cuchillas en la punta para apuñalarnos como una Lancer vieja.
– ¡Cuidado! –grito–. ¡Trae una cuchilla en la Recortada!
Ven al Theron y le apuntan aunque este es cubierto por una capa de Kryll, como si se tratase de RAAM. Corre de un lado al otro con ese escudo de Kryll y se detiene.
– ¡James! –volteo hacia Chris–. ¿Traes las lámparas?
Veo en el bolsillo que traigo y no hay más que una. Maldita sea, ¿cómo pude olvidar algo tan importante?
– ¡No!
– ¿Qué?
– ¡Lo siento!
– ¡Al carajo con eso, James!
– ¡Dejen eso ya! –grita Sophie–. ¡Hay cosas más importantes que eso!
Miro a los Maulers y siguen con sus escudos frente a ellos y el Theron toma su arco explosivo. Apunta, pero le disparamos para que falle. RAAM escupe algo que no entiendo y se acerca cubierto de Kryll, pero hace retumbar el suelo con cada paso.
– ¡Cuidado con RAAM! –grita Chris.
Esta cerca y los Maulers no dejan de acosarlas, Chris entretiene al Theron, entonces me toca encargarme de RAAM. Voy hacia él y se detiene al verme. Es imponente y terrorífico con esa expresión seria y fría. Su mirada podría matarme, pero no me detendré ahora que he llegado a esta instancia.
Disparo y de inmediato lo cubren los Kryll, veo una granada de fuego en el suelo y corro a tomarla y luego se la lanzo, los Kryll se apartan por ello. Disparo a su cara, pero se cubre con las manos y estás rebotan.
–No puede ser –exclamo por lo molesto que es que hasta la piel la tenga como el acero.
Enciendo la motosierra y voy hacia él rápido, estoy cerca e intento dividirlo. Ya a centímetros, pongo la motosierra en su cuerpo, aunque la armadura que trae es fuerte y no logro hacerle daño. Alza su brazo y me golpea tan duro que quedo mareado, como si estuviera a punto del nocaut.
Logro divisar que se dirige a mí con frialdad, pero también luce enfadado. No puedo moverme, tengo todo el cuerpo adolorido y me cuesta moverme. Esta enfrente y solamente me toma de la cabeza y me levanta como al Guardia Onyx de hace un rato.
Me aprieta la cabeza y me ve con su mirada horrible y espeluznante. Lo miro tomar su espada para cortarme la cabeza. Con el rabillo del ojo checo a Chris que esta tirado en el suelo y las chicas siguen con los Maulers. RAAM tiene la espada ya a la altura de mi cuello, escucho a Chris dolerse y esforzándose.
Este no es el fin que quiero, pero al menos ya no tendré que estar en esta pesadilla.
Fallar puede llegar a ser un respiro, ¿eh?
RAAM dice algo con su voz abismal y aguda.
–Muere.
Caigo al suelo repentinamente, RAAM gime de dolor y miro mi alrededor, veo a Sid y dispara al Theron para que no haga nada a Chris, al cual tiene contra el suelo. Me alejo de RAAM y Chris del Theron en cuanto esté se aturde.
– ¡Hay que largarnos! –grito.
Ellas lanzan una de humo contra sus acosadores y huye. Observo a RAAM una última vez y está aturdido. Grita pero no nos siguen, Chris llega a mí lado y ellas igual incluyendo a Sid, tomo mi Lancer rápido. Corremos fuera de su rango, escapando por calles de un lado al otro.
– ¿Se encuentran bien? –pregunto agotado.
Asienten.
–Bien, intentemos llegar al orfanato tan pronto como sea posible. Y tú, Sid –le miro pero no él a mi–. Bien hecho. Te debemos la vida.
–Yo se las debo a ambos. A todos.
–De acuerdo. Ya después te daremos una lección.

Vemos que cerca del ayuntamiento, del cual ya nos hemos alejado, han desplegado Martillos del Alba. No me puedo imaginar qué es lo suficientemente peligroso como para usar esa arma, pero no le daremos importancia
-Zeta Seis a control. Control, ¿me recibes?
- ¿Zeta Seis? Zeta Seis te recibo. ¿Cuál es la situación?
-Seguimos vivos, me alegro de oír tu voz, Walker.
-Yo también, Kim. Supongo que debemos agradecerles los usos no autorizados del Martillo.
-Afirmativo. Tomamos el ayuntamiento y aniquilamos a los Sembradores de la zona, espero que así consigan un poco de tiempo.
-La evacuación ha terminado, Zeta -no puede ser, no los van a abandonar, ¿o sí?-. Solo quedan ustedes, no se muevan de ahí, enviaremos el ultimo APC para recogerlos.
-Control, tenemos que llegar al orfanato de Wisen. Iba a llevar a los niños ahí y podrían seguir con vida.
-Zeta, el orfanato esta un kilómetro al este del ayuntamiento. Pero otros Sembradores han acelerado la tormenta de Kryll. El Mando ha ordenado retroceder a todos.
-Negativo, Control, no vamos a abandonar a Wisen y a los niños. Walker, necesito encontrar su orfanato. Si quieren sacarnos, que nos recojan ahí.
-Recibido, Zeta. Yo... les trasladaré su solicitud de evacuación, buena suerte. Control, fuera.
-Ya escucharon, debemos correr -dice Kathe.
-Espera, deja les aviso que vamos –clama Chris–. Sid, contacta a Zeta.
Sid comienza a llamarlos por radio. Miro a ellas tres y parecen estar exhaustas, no debió ser fácil lidiar con los Mauler. Enseguida Sid logra hacer contacto y Kim responde.
–¿Quién es?
–Dile: "soy un civil que no pudo evacuar y escuché que irías al orfanato para ayudar y luego salir de aquí. Quiero ir con ustedes" –Sid le dice lo mismo a Kim, con las palabras que Chris  dijo.
–¿En dónde estas?
–En los alrededores del ayuntamiento.
–Bien. Ve a ese orfanato, está al este a un kilómetro. Date prisa, esto se volverá un infierno.
–Gracias. Los veo allá.
–Muy bien, está listo –exclama Chris–. Sophie, llévanos rápido.
Corremos a pesar de estar cansados por este día de locos. Es la última oportunidad antes de que se nos acabe el tiempo y comience la tormenta de Kryll.

Gears of War: ExilioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora