Capítulo 13

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MinKi imaginaba lo que podía pasar si llegaba a casa con DoYeon, por lo mismo tenía la esperanza que su papá JiHoon estuviese allí y no SeungCheol.

Pero para su mala suerte no fue así.

—¿Hola? —Habló SeungCheol mirando a los adolescentes entrar a la sala, dejó la taza de café en la mesa y cerró el computador donde estaba trabajando, se quitó los lentes de descanso y se acercó a los menores —¿Desde cuándo tengo dos hijos?

—¿Dónde está mi papá JiHoon? —Preguntó MinKi buscándolo con la mirada, esto no era bueno.

—Hoy tenía turno, llegará mañana en la mañana así que yo estoy a cargo —Comunicó inflando el pecho de orgullo.

—Ve a cambiarte mientras tanto —Murmuró DoYeon dirigiéndose a MinKi.

—¿Disculpa? —Simuló no escucharlo y alzó la voz —No, MinKi quédate con el uniforme.

—Debo cambiarme de ropa de todos modos, a mi papá JiHoon no le gusta que me quede con el uniforme —Recibió su mochila de las manos de DoYeon ya que se la había llevado todo el camino.

—Ve a cambiarte —Dijo SeungCheol dándose cuenta de que los menores estaban demasiado cerca, MinKi lo miró confundido —Te lo estoy ordenando yo, puedes hacerlo.

Cuando el castaño desapareció, SeungCheol posó los ojos en DoYeon.

—Señor Choi —Habló el menor tragando saliva sonoramente —Le quería pedir permiso para que MinKi fuese a mi casa.

El pelinegro levantó las cejas —¿A tu casa? ¿Para qué?

—Sí, mis abuelos me celebrarán el cumpleaños y querían que invitara a MinKi.

—Feliz cumpleaños —Dijo sin ganas y apuntó el sofá —Siéntate.

DoYeon lo obedeció y SeungCheol caminó detrás de él, apretando los dientes.

—¿A qué hora estará de vuelta? —Preguntó con una expresión seria en el rostro.

—A las diez —Respondió DoYeon juntando las manos como acto de nerviosismo, ya que nunca había hecho esto por nadie y mucho menos llevar a alguien a su casa.

—Nueve y media.

—Como usted diga —Asintió sin reclamar, seguían siendo suficientes horas para estar con MinKi.

—Que sea a las nueve y media, no con treinta y un minutos, ni dos —Se sentó en el sofá pequeño frente a DoYeon.

—Sí, señor.

—¿Sabes que soy médico? —Cruzó las piernas mirándolo desafiante.

—Sí, MinKi lo ha mencionado antes.

—Y puedo hacer que tu muerte parezca un accidente —Habló con una mano cerca de sus labios para murmurar.

—¿Me está amenazando? —Se inclinó hacia adelante para cerciorarse de que había escuchado bien.

—No, para nada —Escuchó los pasos de MinKi bajando por las escaleras —Yo soy un médico, salvo vidas, no acabo con ellas.

—¿De qué hablaban? —Preguntó MinKi mirándolos.

—Tu compañero tenía curiosidad sobre mí trabajo —Se levantó y abrazó a su hijo por los hombros, sonriéndole dulcemente —DoYeon ha dicho que te traerá a casa a las ocho.

—¿Ocho? —MinKi miró a DoYeon.

—S-Sí —Respondió el menor levantándose y mirando al adulto —Es una hora prudente.

—Supongo que sí —Sonrió el castaño y DoYeon le devolvió la sonrisa, SeungCheol al percatarse de la situación abrazó a su hijo llevándolo a la cocina.

—Si ocurre algo puedes llamarme y yo iré a donde estés lo más rápido posible —Dijo casi en un susurro, inclinándose hacia un lado, donde podía ver a DoYeon en la sala.

—No te preocupes, estaré bien —Rió divertido.

—Toma esto —SeungCheol sacó un spray de las encimeras y se lo entregó —Es por si te intenta besar.

—Papá, somos amigos.

SeungCheol lo miró con ternura, si bien no conocía a ese chico agradecía el gesto de haber ido a casa para pedir permiso y ser tan respetuoso en todo momento a pesar de sus amenazas en broma que le realizó.

No hablaba en serio, no lo mataría.

Él podría hacerlo regresar del coma si le hacía algo a su bebé.

Además confiaba en MinKi, demasiado a pesar de que seguía castigado para JiHoon, SeungCheol no dudó en entregarle el móvil y decirle que no volviera a escaparse de casa.

—Diviértete —Le sonrió a MinKi —Pero no demasiado.

MinKi lo abrazó con fuerza y SeungCheol acarició su cabeza, dándose cuenta recién que había vuelto a usar los gorros de lana que tanto le gustaban.

Salieron de la casa bajo la atenta mirada de SeungCheol quien los acompañó hasta la puerta para despedirse.

Besó a MinKi en la frente y con DoYeon se limitó a asentirle con la cabeza.

Después de todo se estaba llevando a su hijo.

—Tú papá es un poco... —Comentó DoYeon mientras caminaban.

—Sobreprotector —Continuó MinKi —Lo sé, ambos me cuidan mucho pero mi papá SeungCheol es más intenso.

—Se nota que te quiere mucho —Miró hacia un lado y MinKi hizo lo mismo, sonrió ligeramente y el corazón del castaño latió con fuerza —Antes debo advertirte algo.

—¿Qué cosa?

—Mi casa no es tan grande y linda como la tuya —Llegaron a la parada de autobuses y MinKi se quedó en silencio.

—¿Y la advertencia? —Preguntó después de unos segundos haciendo sonreír al mayor, quien lo tomó de la mano cuando llegó el siguiente autobús —Espera —Lo afirmó del suéter y sus mejillas se sonrojaron —No traje dinero, pensé que nos iríamos caminando.

—Oh... —El pelinegro buscó en sus bolsillos más dinero, al encontrarlo le enseñó las monedas a MinKi —No te preocupes, pago por ti.

—No —Negó con la cabeza sujetando la mano del mayor.

—Pero no te saldrá gratis, esperaré un helado el lunes en la tarde —Le guiñó un ojo, MinKi asintió y se hizo a un lado para que subiera primero, pagó los dos pasajes que los llevaría a su casa, se sentaron juntos con las manos unidas y los dedos entrelazados.

Sus corazones parecían querer explotar de la emoción y ese sentimiento de estar viviendo el primer amor lentamente comenzó a crecer en cada uno.

JiCheol ♡ Amorterapia II: Because it's you.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora