Hybrid Pet -Tododeku-

-Capítulo 32- Ups

Se removió molesto al sentir su costado frio y brazos vacíos. Pestañeo sintiendo los parpados pesados, Arrastro su mano por las sabanas desordenadas sintiendo el vacío.

—¿Izuku...? —llamo cansado, el olor impregnado en la habitación no le decía nada si Izuku estaba o no.

Se incorporo tomando asiento sobre la superficie, los muelles rechinaron y las sabanas de deslizaron. Bostezo estirándose, su cola incomoda se escabullo por el espacio libre; su vista viajo por la habitación, por las cortinas se vislumbraba un leve tono azul claro y el trino de las aves a la lejanía le dio una leve idea de donde estaba Izuku.

Se sentó al borde de la cama, se tomo su tiempo observando sus pies descalzos antes de decidir levantarse sintiendo un leve mareo al incorporarse. Se arrastro por el cuarto buscando alguna pista pero no encontró nada realmente relevante.

Al salir simplemente no había nadie en casa, Inko aun no había llegado de su viaje y por lo que ve Izuku debió haberse ido al instituto, o eso supone viendo la hora en el reloj de pared en la cocina. Arrastro sus pies hasta el sofá en la sala dejándose caer en este, supone que aún es temprano y aun se sentía horriblemente cansado.

Se dejo caer, recostándose en la superficie levemente dura que era el sofá, su cola balanceándose y su olfato captando los leves rastros de aroma de que tenía Izuku, ese delicioso aroma a cítrico y menta; ronroneo recordando lo de ayer, sintiéndose satisfecho y permitiéndose volver a caer en el mundo onírico.

—Y bien nerd ¡¿Puedes explicarte porque mierda tienes esa mordedura en tu mano?! —Cuestiono el rubio mientras sostenía fuertemente su muñeca izquierda mostrando en dorso herido, con las claras hendiduras de color rosa.

—Es...una...Mordida... —Respondió mortificado, su cabeza gacha y su mirada desviada a un lado evitando los penetrantes ojos rojos de su amigo.

—Sí, felicidades no eres tan imbécil, es una mordida —Felicito falsamente Katsuki con una sonrisa forzada, sus dedos presionaron la piel de la muñeca bajo su agarre —¡¿Y por que mierda la tienes?!¡¡Eso te pregunte nerd de mierda!!

—¿Me...Mordieron? —Volvió a responderle a su amigo de la infancia, quien obviamente no estaba satisfecho con su respuesta.

—Claro Deku, tienes una mordida porque te mordieron —Continuo sarcástico, moviendo levemente la muñeca del nombrado —¡¡Tienes una puta mordida que ayer no tenías!! Y espera, espera, Ni se te ocurra venir y decirme que es la mordida de un perro Deku, esta mierda no es una mordida de un puto perro.

Y el silencio se instauro entre ambos, parados en la parte trasera del edificio del instituto, con el viento mañanero despanándolos. Mal momento para olvidar usar los guantes, la gasa que había puesto esa mañana fue demasiado notoria y al llegar al instituto seguido del rubio, fue arrastrado hasta la parte trasera para ser interrogado por este, la gasa se encontraba en la zurda del rubio mientras su diestra mantenía un fuerte agarre en su muñeca izquierda con la herida expuesta.

El ceño fruncido del rubio se marcaba cada vez más a medida que no respondía, la presión en su muñeca aumentaba hasta provocarle un leve dolor.

—Fue un accidente —Trato de calmar al más alto, pero al parecer logro lo contrario.

—¡¿Cómo mierda te ganas una mordida, de una persona, por accidente?! —Grito furioso el rubio jalando la muñeca y exponiendo la marca frente al rostro del peliverde —Mira Deku de mierda, si no me dices te juro que te lo voy a sacar a base golpes.

—¡¡P-Pero te digo la verdad Kacchan!!¡¡Fue un accidente!! —Insistió nervioso.

—Y bien, si es un accidente ¡¿Cómo mierda sucedió?!