Hybrid Pet -Tododeku-

-Capítulo 45- Entrevista.

Gimió guturalmente, sus dedos clavándose en los hombros de su novio. Sus ojos nublados observaban el rojo rostro de Shouto quien apretaba los parpados y mordía sus labios, sintiendo como este se venía en su interior.

Agotado se dejo caer, completamente agitado, deleitándose con la vista de su novio completamente agotado. Sintió como este se retiraba de su interior cuidadosamente, sintiendo un escalofrió cruzar su espalda al momento de sentir el flácido miembro salir de su interior llevando consigo parte del semen en su interior.

Debía agradecer a Toshinori, sea quien sea, porque desde que ese hombre llego al trabajo de su madre esta pasa más tiempo con él.

Quizás, si hubiese sido unos meses atrás, antes de que Shouto llegara, podría admitir que se sentiría celoso de su madre como su único hijo; pero, ahora con un novio que sinceramente, aunque no lo parezca, parece tener las hormonas revolucionadas, no se preocupa tanto y realmente se alegra que ella tenga un amigo aparte de Mitsuki.

Ambos se acomodaron en la blanda superficie abrazados, permitiéndose calmar sus agitadas respiraciones y caer en el bello mundo onírico juntos.

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Se removió entre los brazos de Shouto, sus ojos entreabriéndose, observando el dormido rostro de Shouto. Sonrió enternecido al verlo tan calmado, cómodamente ronroneando, con una leve sonrisa en el calmado rostro.

Apoyo su rostro en el cálido pecho de su novio escuchando los latidos calmados del felino, pronto entraría a estudiar para profesor y ahora su deber era conseguir un trabajo medio tiempo para poder costearse algunas cosas, agradeciendo la beca que había conseguido.

Cuidadoso de no despertar al dormido felino se arrastra asía a fuera de las sabanas, sintiendo sus piernas temblar y una punzada atravesar su espalda, no sabía se debían hacerlo más seguido para acostumbrarse o dejar por un tiempo a su novio en abstinencia. Se arrastro hasta el cuarto de baño, cerciorándose que su madre estuviera dormida.

Cargando consigo un pantalón de chándal simple se encerró en la habitación de baldosas para luego dejar caer el pantalón al suelo y adentrándose a la ducha, aprovechando que Shouto tenia la maña de quitarle cada prenda que poseyera.

El agua calmo sus músculos adoloridos, suspiro gustoso para luego fruncir el ceño, recordando cierto asunto que debía atender en su parte baja gracias a su tierno gato.

Para la próxima lo obliga o a usar un condón o a correrse fuera.

...

Despertó sintiendo el ruido de los cajones del cuarto ser movidos, entreabrió los ojos viendo como su novio se abotonaba una camisa de color celeste pastel, llevaba unos pantalones gris oscuro y sus calcetas. Se incorporo levemente para ver mejor a Izuku, quien estaba batallando con una corbata de color negro.

—¿Qué haces Izu? —pregunto acomodándose entre sus brazos cruzados. El nombrado dio un brinco ante la sorpresa.

—Jo, me asustaste Shouchan, pensé que seguías dormido —Dijo el chico rindiéndose y dejando uno de los nudos más raros que había visto en revistas y televisión, a veces la gente que pasaba por la ventana.

—Lo siento, pero aún no respondes mi pregunta Izu ¿por qué estas vestido así? Pensé que no te gustaban los trajes. —Recordó entre las conversaciones que tuvo con su novio, el chico soltó un suspiro paseando su mano por los cabellos levemente húmedos.

—Sobre eso, iré a un par de entrevistas que había agendado hoy, realmente no te había ido decirte, pero en verdad necesito apresurarme, hablemos de esto cuando llegue a casa ¿bien? —Se acerco para besar su frente, volviendo hacia su armario y sacando una chaqueta del mismo color que los pantalones de vestir —Hasta más tarde Shouchan, mamá no trabaja hoy así que puedes pasar el día con ella. —Informo para luego salir de la habitación apresuradamente tomando su celular y billetera dejándolo en la cama, hundió su rostro repasando las palabras de su novio, no tiene idea que es una entrevista, a escuchado el termino pero, realmente no encuentra mucha lógica que entrevisten a su novio, bueno, es tierno, lindo y todo eso pero realmente no quiere que salga en la televisión o alguna entrevista ¿Qué pasa si por eso se vuelve famoso y lo deja de lado como todos aquellos que ve en los extraños programas de farándula? —Espera... —Dio un brinco asustado, saliendo de la cama arrastrando las sabanas y casi tropezando con estas, salió de la habitación corriendo hasta la entrada, pero la puerta y estaba cerrándose con un clic y Inko-san se había asomado asustada.

—¿Ocurre algo Shouto-kun? —Inquirió la mujer al verlo en el suelo, sentado viendo fijamente la puerta.

—Izuku tendrá una entrevista —Dijo con voz lastimera, a lo que la mujer se descocerte.

—En realidad tendrá tres Shouto-kun, pero ¿Qué hay con eso?

—Que se va a volver famoso y a mi me dejara de lado —Sollozo hundiendo sus orejas en su cabello mientras su cola permanecía totalmente quieta.

—¿F-Famoso?

—¡Sí! Primero era Bakugo y ahora cualquier otro —Continuo su lamento sin ver como la mujer se cubría la boca para no soltar una carcajada. Poniéndose a su altura Inko poso su mano en su espalda.

—S-Shouto-kun —La mujer comenzó sobando su espalda, volteo el rostro a esta quien cubría su boca con su mano —I-Izuku tendrá una entrevista de trabajo

—¿De trabajo, que es eso? —Pregunto amurrado con el ceño levemente fruncido.

—¿no sabes? Pensé que solías meterte en el ordenador de Izuku —Desvió la mirada ante las palabras de la mujer, vale, sí, se mete al ordenador de su novio...algunas veces curiosea por la internet...otras, buscaba algunos temas en específico. —Bueno, veras, una entrevista de trabajo es una entrevista para aplicar a un empleo, mira, yo trabajo ¿verdad? Bueno, para conseguir aquel trabajo tuve que conversar con recursos humanos, ellos me entrevistaron para ver si era apropiada para el puesto ¿entiendes? Izuku solo esta buscando un empleo, eso es todo, no planea dejarte —Con cariño Inko acaricio sus cabellos para calmarlo, lográndolo sin mucho problema.

—Yo...gracias...

—No hay de que Shouto-kun ¿Por qué no me ayudas con el almuerzo ya que estamos? —ofreció la mujer a lo cual asintió levantándose y siguiéndola a la cocina.

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La puerta principal abrió cuando el reloj marcaba las seis de la tarde, por el marco un agotado Izuku se asomaba dejando los incomodos zapatos de vestir a un lado, llorando internamente por no haber podido usar sus zapatillas rojas. Tran pronto la puerta atrás suyo cerro fue recibido por un emocionado Shouto quien lo apretujaba contra su pecho mientras frotaba su mejilla contra su cabello, soltando gustosos ronroneos.

—¿Me extrañaste mucho Shouchan? —pregunto mientras palmeaba la cabeza de su novio quien no tenia ganas de separarse de él. Shouto se limito a asentir con su cabeza aún en sus cabellos —Lo siento sí es que me demore mucho.

—No es eso —Murmuro ahogado entre sus cabellos —Solo pensé...olvídalo...

—Eh ¿Qué ocurrió Shouchan? Puedes decirme —Alentó palmeando la espalda del más alto. Los pasos suaves de su madre acercándose le llamaron la atención, la bajita mujer se asomo con una tranquila sonrisa.

—Bienvenido a casa Izuku, vamos la cena ya está casi lista ¿cómo te fue en las entrevistas? —Pregunto su madre mientras comenzaba a adentrarse en la sala.

—Bien —Como pudo camino con un Shouto apegado a él, vio a su madre adentrarse en la cocina y tomar asiento en una de las sillas del comedor —Empiezo a trabajar el próximo lunes, desde las seis hasta las ocho, desde jueves hasta sábado —Comento con calma dando suaves golpecitos en el brazo que le apretujaba —Vamos Shouchan, suéltame para que nos sentemos.

—No quiero...

—¿Shouchan? —Frunció las cejas levemente al ver la extraña actitud del felino —¿Seguro que no ocurre nada? Sí es por que hoy demore mucho, en verdad lo siento...

—Oh, Quizás se deba a lo de hoy en la mañana —Recordó repentinamente su madre entretenida.

—¿Esta mañana?¿cuándo me fui? —su Madre asintió a sus palabras entretenida.

—Veras, Shouto pensaba que tenias una entrevista para una revista o algo así y se le ocurrió que lo cambiarias porque te harías famoso —Explico entretenida mientras agitaba su mano, apretó los labios conteniendo la risa cuando escucho al felino quejarse, aún ocultando su rostro en su cabello.

—Shouchan —Murmuro enternecido —No tenias de que preocuparte, ahora vamos, tenemos que sentarnos —¿Shou? —Sin aviso fue arrastrado por el otro hasta su cuarto mientras su madre los miraba sorprendida, soltando una risita por lo bajo.

—Bueno, aún le faltaba un poco al arroz.

—Continuara—