Confíen en mí, cuando les digo que nunca creí, en el "destino", en el "Karma".
Dejé atrás mi pasado, para vivir al máximo mi presente, para forjar un excelente futuro, sin depender de nadie, ni nada del pasado.
Pero el destino, se metió en mí presen...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
-Pero ustedes... hijo no entiendo, han hablado del compromiso y cuando seria, o esto se te ocurrió a ti Catalina, eh ,nosotros si hablamos del compromiso, pero yo quise darle la sorpresa de los anillos, lo siento primero Catalina tendría que saberlo, segundo hemos hablado del compromiso, sí, pero siempre hemos dicho que no queríamos apurarnos y justo esto es lo que yo llamó apurarnos, gracias por la cena, y los anillos los guardaremos para más adelante, y si me disculpan estoy exhausto, lo único que quiero es descansar, con permiso y se fue a su cuarto, dejando los anillos sobre la mesa, Catalina estaba furiosa, pero la reina Beatrice la hizo entrar en razón, saludo a todos con un seco chau, se marchó, los demás comimos en paz, al terminar Charlotte y yo, íbamos a nuestros cuartos, hablando de lo que pasó, Charlotte, -"no te das cuenta de que Catalina, "se le venció la fecha de caducidad", "se le quemó el foco", "o sea está más loca que cabra"-, pobrecita.
-Sé que lo de pobrecita lo decís sarcásticamente Harry, pero hermano creo que tienes razón, "yo nunca me ofrecería en bandeja de plata como lo hizo Catalina", yo nunca haría eso esperaría que mi novio se decida y me lo proponga él, así se habla Charlotte, puedo estar tranquila de que tomaras una buena decisión y que no serás como nuestro hermano mayor, un dominado por su novia.
-Aparte Charlotte no puedes regalar un compromiso, ya que eso es lo que quiere Catalina y con grandes ansias, pero creo, no me corrijo estoy 100% seguro de que George, no tiene ni la cuarta parte de ganas de comprometerse, es más creo que tiene ganas de seguir en Dinamarca y nunca haber tenido esta cena, en eso tienes razón -dijo Charlotte-, ya llegamos a nuestros cuartos y nos despedimos, chau Harry, chau Charly.
Al día siguiente, Harry desayuno con su familia y fue a la universidad, al llegar no vio a Sharon por ningún sitio, entró en la clase -pero supuso que se había quedado a descansar-.
-Sharon se despertó con su móvil, miro la hora y empezó a maldecir, al darse cuenta que no eran las seis de la mañana, eran las cinco, pero todavía lo tenía en horario de Dinamarca arggggg,-por Dios, esto es malo como Caín ebrio- levante el capó del auto, "realmente no se para que", -si entiendo menos, que Adán en el día de la mujer-, justo apareció Roger, ¿Sharon tienes problemas con el automóvil?, si Roger no enciende y tengo que irme a la universidad, encima voy a llegar tarde.
-Hagamos esto Sharon, yo llamaré al mecánico, tu vete en taxi, puede ser que a la tarde este arreglado, gracias Roger y chau me voy si no, no llego, chau Sharon.
-Como lo imaginé, -llegue tarde-, me perdí las dos primeras horas, ¡he Sharon!, sentí que alguien, gritaba mi nombre, cuando gire era Harry, quien venía hacia mí, hola Sharon, ¿Te quedaste dormida?, "no Harry, no me quede dormida, es más tenía el móvil con hora de Dinamarca", así que me levanté a las cinco de la mañana, pensando que eran las seis, pero tuve un problema con el automóvil, no arrancó y tuve que llegar en taxi, es por eso que llego tarde, "después me pasas lo que dieron en las primeras horas", y vamos, si no llegaremos tarde a esta clase también, vamos, al terminar nuestro día, fui a despedirme de Harry, ¡Espera, yo te llevo a tu piso y no quiero un no!, me arrastró de la mano hasta que llegamos a su automóvil, nos subimos y emprendimos viaje a mi piso, puse música para relajarme, aunque Harry, iba muy concentrado manejando, ya que nos acercabamos a la intersección de la gran avenida, en la cual, tenías que tener tus cinco sentidos alertas para cruzar, porque había muy a menudo accidentes.
